¡Renací Para Vengarme De Esa Perr*! . [REEDITANDO]

Capítulo 52.

En el salón se escuchaban los gritos furiosos del Emperador Rosier, los sirvientes ni siquiera pasaban por al frente de la puerta.

Emperador Rosier: no puedo creer lo que has hecho!-regaño mirando enojado a su hijo- y todo por que no te di el título de heredero!.

Kyle: lo de Isabelle fue un accidente!-repitió molesto- yo me esforcé mas que Edmond, yo e Isabelle hicimos que la pobreza y los criminales dejaran de existir!.

Emperador Rosier: encerio eres increíble!-le grito golpeando el muro- no te di el título de heredero por eso mismo!.

Kyle: explicame ese "por eso mismo"!-contestó molesto, quizás así podría cambiar y poner todo a su favor.

Emperador Rosier: eres demasiado dependiente de Isabelle!-declaró llevándose la mano a su cabello y tirarlo hacia atrás- siempre estas al lado de ella, siempre la buscas, no puedes hacer nada sin ella!.

Kyle: yo hice cosas en las que ella no me ayudo!-debatió señalándose a sí mismo- te recuerdo que yo fui a la guerra, mientras que Edmond estaba por política, yo estaba en el campo de batalla!.

Emperador Rosier: eso lo se, pero quién te dijo que fueras?-pregunto mas calmado, el silencio reino- ves? Sabes que ella no estará para siempre a tu lado.

Kyle: no! Ella siempre estará a mi lado-se tapó los oídos tratando de no seguir escuchando.

Emperador Rosier: en algún momento ella tendrá que casarse....-le quito las manos de las orejas a su hijo- tendrá que tener hijos, tendrá que centrarse en su hogar y en su trabajo.

Kyle: no, mentira!-trato de volver a colocarse las manos en los oídos- ella nunca me dejaría, ni siquiera estando casada!.

Primero el muerto antes de que ella se case con otra persona y peor aún, que quede embarazada, el tenía un plan ser el futuro Emperador y tener a Isabelle como Emperatriz e iba a mantener ese plan pase lo que pase.

Emperador Rosier: se como la miras hijo-soltó de la nada dejando al joven pálido- se nota que tu la amas pero entiende ella es tu prima, lejana o no, eso no cambiara y tu debes dejarla ir.

Kyle: no la dejaré ir-empujó a su padre para salir corriendo del salón- encontraré una manera, ella me ama, ella también me ama por eso me quería ayudar a conseguir el trono!.

Llegó a su habitación y cerró con seguro la puerta, no saldría de la habitación, ni aunque tenga que faltar al muelle a despedirse.

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La delegación estaba lista para partir y todos se despedían entre sí, por supuesto que Shilra estaba pegada a Isabelle quién le correspondía el abrazo también contenta.

Shilra: podemos seguir en contacto?-pregunto ilusionada.

Isabelle: claro que si princesa!-contestó alegre- siempre que quiera hablarme use esto.

Extendió una caja más o menos grande de color mostaza con un listón lila, la morena abrió la caja, era una esfera transparente que estaba flotando sobre una pequeña plataforma color plata.

Isabelle: es un dispositivo para llamadas-explicó, de su bolsillo sacó otra igual- tu solamente dices el nombre y enseguida estará avisándome a mi.

Shilra: esto es muy increíble y hermoso-agradeció para darle un abrazo- esto lo hizo algún mago o hechicero?.

Isabelle: es una mezcla entre magia y santería-señaló llevando una mano a su mentón- así que aunque estemos a varios kilómetros de distancia la esfera no tendrá ningún problema con eso.

Shilra: eso es perfecto-abrazo su regalo con emoción- me gusto mucho estar aquí.....contigo.

Isabelle: también me gustó mucho estar contigo-le respondió de la misma manera.

Raje: princesas, ya es hora de que nos vayamos-avisó el traductor.

Isabelle: gracias, bueno....-detuvo sus palabras- ya es hora de que vayas y patees a esos malnacidos en el trasero.

Shilra: si señora!-hizo el gesto de poner su mano en el frente y ponerse recta- también quería agradecerte, me ayudaste mucho, te le agradezco de corazón.

La morena se puso se puntillas, se afirmó de los hombros de la peli-negra, y se acercó a su rostro para darle un beso en la mejilla dejando sus labios marcados en esta con su labial. Keljan vio esta y quedó en shock, tuvo que ser retenido por su esposa y algunos más para no ir a interrumpir.

Isabelle: es mi deber ayudar a las personas-se sonrojo un poco al recibir ese beso- deseo de corazón que te vaya bien.

Ahora fue el turno de la oji-roja agacharse un poco, y le dio un beso en la frente, Keljan seguía tratando de luchar, estaban seduciendo a su hija!, en sus narices!. Agradeció enormemente que ahora debían irse, su hija se acercó a él para colocarse debajo de su brazo.

Isabelle: espero que hayan disfrutado de su estadía en este imperio-hablo estando cerca de los regentes.

Emperatriz Leah: nuestro imperio siempre estará abierto para ustedes si lo necesitan-abrazo a Ranhea en señal de cariño y despedida.

Reina Ranhea: realmente estamos agradecidos por todo y lamento los malos ratos-se disculpo por el tema de las concubinas.

Emperador Rosier: no se preocupen, son detalles, detalles-repitió sin importancia- sólo espero que para la próxima no ocurra de nuevo.

Isabelle: no hay que preocuparse Emperador Rosier-sonrió la muchacha colocándose al lado- el Emperador Keljan aprendió su lección, cierto?.

Keljan: si, aprendí mi lección-acepto algo avergonzado- ya no es necesario recordarlo.

Reina Ranhea: bueno, ya es hora de irnos-junto sus manos, y sonrió con tranquilidad- el capitán no está esperando.

Después de otra despedida, los regentes y su hija junto al resto de la delegación subieron al bote, quedaron en el muelle hasta que el barco desapareció de sus vistas.

Isabelle: realmente fue una visita que nunca que olvidará-mencionó dándose la vuelta para ver a sus tíos- donde están Edmond y Kyle?.

Emperador Rosier: bueno, Edmond se quedó en el palacio tratando temas políticos con otros nobles-respondió y luego se hizo un silencio incómodo- y Kyle se quedó en su habitación, no se sentía muy bien.

Isabelle: esta bien, entonces no habrá problema en que me vaya a casa cierto?-pregunto mirando a los mayores- tengo trabajo que hacer.

Rosier: rayos....-se acercó a la joven y la abrazó- porque no pudimos tener una hija tan linda como ella?!.

Isabelle solo se quedó quieta mientras el color rojo subía por su rostro junto con orejas y se reía nerviosamente, casi nunca, el Emperador le mostraba afecto de esa forma no se quejaba tampoco pero no era muy común.

Leah: cariño, dejala-pidió riéndose en voz baja- ella tiene asuntos que resolver, al igual que nosotros.

Rosier: nos gustaría que mañana vinieras con nosotros a almorzar-invitó con una sonrisa- si es que no estas ocupada claro.

Isabelle: para tía y tío nunca estaré ocupada-aclaró con una sonrisa- estaré mañana en la cena.

Rosier: oh, por si acaso...-llamo la atención de la princesa- trae ropa formal y elegante, tengo una pequeña visita para la tarde.

Isabelle: oh, claro que si-acepto algo dudosa pero con una sonrisa.