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𝐍𝐀𝐑𝐑𝐀 𝐌𝐀𝐑𝐈𝐍𝐀

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𝐍𝐀𝐑𝐑𝐀 𝐌𝐀𝐑𝐈𝐍𝐀.

Tenía pequeños momentos en mi mente, con una pequeña con el cabello rubio pero a la vez castaño.

Llevaba teniendo muchos momentos, su nacimiento, sus primeros pasos, sus primeras palabras, muchas cosas en especifico.

Lo que me mantenía en duda, esque la niña era mía, el nacimiento fue por mí, yo la tuve..

Abrí mis ojos topándome con el techo del hospital, sentía que estaría Edward aquí pero el efectivamente no estaba.

Mi habitación estaba vacía, suponía que el estaría conmigo ahora.

‐¡Marina!

Levanté la mirada viendo a mi mamá con una enfermera, ni mis hermanos estaban aquí.

‐Hola mamá y señorita -Me senté en la cama mientras veía como la nueva enfermera comenzaba a tomar mis análisis respecto a lo que salía en cada máquina.

Escuchaba todo lo que mamá decía pero en ciertos puntos no la escuchaba, sentía que algo faltaba en mi corazón y para más me sentía fatal.

Quería tener a mi novio a mi lado.

Los brazo de Alex rodeando mi cuerpo diciendo que todo estará bien.

-¿Leah y Seth? -Pregunté, vi como en su rostro apareció una mueca, aquello no me decía nada bueno.

-Están en la reservación, debes estar tranquila, ellos saben cuidarse.

Asentí mientras me acostaba dejando que me coloquen otro antibiótico conectado a mi brazo, ya estaba acostumbrada y no quería esto para mí.

Ya era mucho con lo que debía cargar.

Estuve horas con esa medicina hasta que se acabó, había prendido mi computador para poder divertirme pero nada había salido de ahí para poder estar cómoda o alegré.

-Sabes que Marina necesitaba de tu presencia cuando despertará.

Solte un quejido al sentir aquella exclamación, se escuchaba desde aquí adentro, era la voz de Rosalie pero no sabia contra quien reclamaba.

Océano de Enfermedades-Edward Cullen.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora