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—¿Cuántos incendios había? —le preguntó Baekhyun a Chan. El incendio del restaurante no había causado muchos daños, pero los clientes tendrían que aguantar durante un tiempo el olor a madera chamuscada.

—Seis —contestó Chan.

—¿Alguno fue grave?

—No. Eran una advertencia.

—¿Sobre qué?

—Alguien dejó una nota en la puerta de la cárcel. Decía que se deshicieran de mí o el pueblo sufriría las consecuencias junto conmigo y mis hermanos.

—¿Estás seguro de que sólo era una advertencia?

—Si quisieran incendiar el pueblo, habrían esperado hasta que la gente estuviera dormida y habrían volado los tanques de agua.

Baekhyun sabía que la confrontación se estaba acercando, pero ahora que era inminente, le parecía difícil creer lo que estaba pasando.

—¿Qué vas a hacer?

—Bill Norton ha convocado una reunión para mañana por la mañana.

—No estoy hablando del pueblo —dijo Baekhyun—. Me refiero a qué vas a hacer tú.

—Voy a esperar a ver qué decide el pueblo.

Baekhyun agarró a Chan del brazo para que lo mirara a la cara.

—No puedes confiar en que el pueblo te vaya a respaldar. ¿Por qué crees que la paga es tan buena? Los últimos tres comisarios fueron asesinados y nadie hizo nada para ayudarlos.

—Tengo a mis hermanos. Yo no les pedí que vinieran, pero ya que están aquí, pueden servir de algo.

—Eso sólo suma seis personas. Y habrá al menos dos docenas de Byun.

Tal vez más. —Chan no entendía el peligro, no comprendía los temores de Baekhyun. Nunca lo haría.

—Eso sólo son cuatro por cabeza. Minho se va a sentir estafado.

Baekhyun dio un zapatazo en el suelo para expresar su frustración.

—Ponte serio. No te quedes ahí como si esto fuera un juego. Tú y yo sabemos que esa gente tiene la intención de matarte, a ti y a cualquiera que se ponga de tu lado.

—Muchas personas han querido matarme. Y hasta ahora nadie ha podido.

—Pero esta vez se trata de los Byun. Vendrán al menos veinticuatro de ellos...

—Después de que DongWook y Siwon regresaron de la guerra, nos enfrentamos con más de cuarenta que estaban decididos a matarnos por medio millón en oro que no teníamos. Eso fue hace once años. Ahora sabemos pelear mejor.

—Pero ellos son ladrones de ganado.

—Igual que en ese entonces.

—Y asesinos.

—Recuerdo mataron al joven Alex Pendleton. Lo asesinaron sin darle ninguna oportunidad.

Baekhyun no podía entender por qué los hombres parecían pensar que si una vez lograban hacer algo peligroso, podían seguir haciéndolo toda la vida sin que les pasara nada. Se preciaban de pensar con lógica, pero cualquier otro, sin importar lo sentimental que fuera, sabía que uno no podía vivir tentando al destino. Ni siquiera los Choi eran inmortales.

Chan agarró a Baekhyun y lo acercó a él para besarlo suavemente en los labios.

—La gente como los Byun nunca hace planes. Piensan que el solo hecho de ser numerosos los hace invencibles. Si las cosas no les salen como esperan, no saben qué hacer. Cuando teníamos la edad de Lisa, Minho y yo sobrevivimos a cinco años de pelear con ladrones de ganado, bandidos e indios. DongWook y Siwon eran oficiales en la guerra. Los tendremos dominados en segundos. 

Baekhyun (Libro 4 - serie 7 novios)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora