|𝐌𝐈𝐊𝐄𝐘 𝐒𝐀𝐍𝐎 𝐘 𝐓/𝐍| +𝟐𝟏 𝐒𝐖𝐄𝐄𝐓 𝐎𝐁𝐒𝐄𝐒𝐒𝐈𝐎𝐍

𝑪𝑨𝑹 𝑺𝑬𝑿 - 𝖘𝖆𝖓𝖟𝖚 𝖕𝖙.2

🔞 𝗖𝗢𝗡𝗧𝗘𝗡𝗜𝗗𝗢 +𝟮𝟭

Junto al peli-rosa nos precatamos qué una camioneta negra nos está siguiendo. ¿Quiénes son? nos preguntamos. Nos alejamos un poco de la ciudad, para no armar lío. Estamos en una carretera vacía, llena de árboles, el vehículo sigue detrás de nosotros.

— ¿Tienes armas? — preguntó.

— En mi bolso.— miré atrás. Me estire un poco y lo agarré. Saqué el arma.

— Hazlo, muñequita.— me miró y sonrió. Saqué la mitad de mi cuerpo por la ventana.

Las balas me rozan, y la brisa del auto hacen volar mi cabello. La camioneta está polarizada, mierda. Es un poco complicado, pero no imposible. Me concentré y apunté primero hacía el piloto. Sanzu movió el auto haciéndome entrar nuevamente, y disparé por error.

— Carajo, Sanzu.— me quejé.— ¿Acaso quieres matarme?

— Fue necesario.— respondió.— Acabalos.

Saqué nuevamente la mitad de mi cuerpo, y él copiloto hizo lo mismo. Quién dispara primero gana. Si tiene buena puntería, se dificultaría la situación. La mano del hombre tiembla, no disparará. Apunte a su cabeza y él hombre de negro disparó primero, falló. Disparé, su cuerpo quedó colgando sobre la puerta y un camino de sangre queda en la carretera.

Su compañero no detuvo el auto, y siguió conduciendo. Sacó la mano izquierda con una pistola y empezó a disparar al azar. Entré al auto nuevamente, las balas no son controladas, están fuera de control. Él auto de Sanzu es aprueba de balas, y se escucha como los disparos rebotan. Conté las balas, la última la acaba de disparar, tiene que recargar.

Volví a salir, es mi oportunidad perfecta. Me concentré y apunté al conductor. Disparé, la camioneta salió de la carretera y chocó contra un árbol. Minutos después el auto explotó.

— Lo hiciste espectacular.— se rió.

— ¿Quién carajos eran? — pregunté.

— No lo sé.— respondió.— Tenían traje negro, ¿lo viste? — asentí.— Quizá eran peones de Kimura.

— La furgoneta tenía el símbolo de un dragón.— respondí.— Debemos contárselo a Mikey.

— Será una buena idea.— sugirió.

— La policía también me sigue.— confesé.— Aunque, de eso me encargo yo.

— Si necesitas ayuda, avísame.— respondió.— La policía también está involucrada con Bonten.— el peli-rosa rodó los ojos.— Son una molestia.

— ¿Hay un largo camino?

— Nos alejamos mucho del camino.— mencionó.— En media hora estaremos allí.

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Bajamos del auto, el atardecer se hizo presente. Pude ver un auto con una tela negra, ¿algún ejecutivo compró uno nuevo?. Entramos a la mansión, Koko está en la sala contando fajos de dinero, y al lado están los hermanos Haitani. Se acercaron al vernos.

— T/N, pastillitas-kun.— hablo Ran.— Él jefe los espera en la oficina.

— Cierra la boca, berenjena.— Sanzu caminó con el ceño fruncido y lo seguí.

Mi celular vibró, tengo dos, el que sonó fue el de trabajo. Es un número no registrado.

• 𝐍𝐔𝐌𝐄𝐑𝐎 𝐃𝐄𝐒𝐂𝐎𝐍𝐎𝐂𝐈𝐃𝐎 •