Tn Kido hermana mayor de Saori por un año, son adoptadas desde bebés por Mitsumasa Kido en su viaje por el Himalaya, desde que Tn vio a Saori, juro protegerla de cualquiera que se atreviera a hacerle daño, su abuelo antes de morir, le había dicho a...
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𝟏𝟔 𝐚𝐧̃𝐨𝐬 𝐝𝐞𝐬𝐩𝐮𝐞́𝐬...
En una mañana tranquila, un joven alto de cabellos castaños y ojos rojizos con un collar con el símbolo de un Pegaso grabado en el, se encontraba en la azotea de un edificio contemplando el horizonte, hasta que desvió su mirada observando brevemente su mano izquierda...
Flashback
Se encontraban dos niñas de 9 y 10 años protegiendo a un gatito de un perro que lo quería lastimar, una de ellas era de cabellos lilas y ojos verdes quien sostenía al pequeño gato con una expresión asustada, mientras que la otra niña era de cabellos negros y ojos azules con una expresión de seriedad.
xx: ¡No te acerques! Quédate ahí— Mencionó con cierto temor retrocediendo un poco con el gatito en brazos.
xx1: Saori no te muevas, si lo haces solo lo alterarás — Advirtió algo seria la joven colocándose enfrente de la de cabellos lilas.
Saori: ¡Por favor no te acerques a mí! — Pidió asustada observando al perro que se encontraba delante de ellas.
El perro comenzó a gruñir preparándose para atacar.
xx1: ¡Saori detrás de mí! — Exclamó la chica de cabellos oscuros preocupada, tomando rápidamente de la muñeca a su hermana, jalándola atrás de ella al ver que el perro iba a atacar.
Justo en ese momento el perro corrió en dirección a las niñas dispuesto a atacar... la mayor estaba adelante de manera protectora hacia su hermana esperando el ataque.
xx: ¡Cuidado! — Exclamó el niño empujándolas para poderlas salvar del perro.
Cuando las niñas despertaron se encontraron con el niño que las había ayudado, estaba agarrando su mano izquierda la cual estaba herida...
xx: Me duele— Se queja por el dolor y ardor de la herida.
Saori: ¿Estas bien? — Preguntó con cautela levantándose del piso mirando al niño preocupada.
El niño simplemente rio nervioso ante la pregunta de la peli-lila.
xx1: ¡Estas sangrando! — Exclamó de manera preocupada en cuando la pelinegra se levantó y se dio cuenta de su herida.
Saori: — Observó sus manos por unos segundos —Tn...— Miró a la mayor como pidiendo permiso por lo que ella asintió estando de acuerdo.
Tn: No le digas a nadie de esto ¿Entiendes? — Mencionó con seriedad mirando al niño quien las miró confundido.
xx: ¿Huh? — Fue lo único que logró decir aun observando a la de cabellos lilas.
La menor colocó sus manos un poco temerosa sobre la herida del niño, donde de ella una brillante luz salió de sus manos por unos momentos, en cuanto la niña las retiró, la herida del niño ya estaba curada.
