MOON 2 || Maria Becerra - Daniel Ribba

Cápitulo 3

Maria B.

Entro para revisar chats, aún no se porque tengo bloqueado a Dani. Creo que lo nuestro quedo bien ¿no?

Al desbloquearlo, me llega un mensaje al instante. Parece que me aún me odia, y yo pense que había quedado todo bien.

Tengo que responderle, decirle algo..

"Pense que habíamos quedado bien vos y yo, y que nuestra historia había quedado en el pasado. Seguis pensando en mi teniendo a una gran mina a tu lado?"

Deje mi celular nerviosa, creo que no le debí poner eso. Soy una pelotuda.

Veo que Sebastián está a punto de agarrar mi celular y yo lo agarro primero.

Sebastián: ¿Pasa algo?

Maria: Pense que ya te habias quedado dormido, pero no, no pasa nada. Solo quiero revisar instagram.

Sebastián: Pero vos siempre me dejas agarrar tu celular y actuaste medio raro.

Maria: No nada que ver, solo que justo me entraron ganas de ver instagram como te dije.

Sebastián: Espero no me ocultes nada, Mari.

Maria: Hay no me hagas sentir culpable, - pongo los ojos en blanco - Desbloquee a Daniel porque pensé que habíamos quedado bien, pero me llego un mensaje diciendome que me odia, que soy una mierda y que sigo provocando cosas en él.

Sebastián: ¿Qué me estás diciendo?, Supongo que vos no le respondiste, no?

Yo bajo la mirada y él sale del cuarto enojado.

Salgo atrás de él, cuando se pone así, es mejor frenarlo antes que cometa una locura.

Maria: Para, Sebas ¿A donde vas?

Sebastián: A ponerle los puntos a ese pibe.

Sigue caminando, intento retenerlo miles de veces, pero no puedo.

Soy una boluda, ¿Cómo se me ocurrio contarle esa mierda a él?

Sebastián: ¡DANIEL! , ¡IDIOTA!

Maria: Para, no lo hagas por favor.

Después de un momento, alguien abre la puerta y son los padres de él.

Mamá: ¿Qué haces vos acá? - pregunta mirándome.

Sebastián: ¿Donde está su hijo?

Papá: ¿Por qué querés saber vos?

Dani: Hey ¿Qué pasá? - sale y Romina viene atrás de él - ¿Por qué venís a gritar a mi casa?

Maria: Yo.. Perdón, está enojado.

Sebastián: ¿Encima preguntas? Vos sabes perfectamente lo que acabas de hacer, no tienes respeto ni porque Mari está en una relación, pero yo te voy a enseñar a respetar - le tira un piña.

Maria: ¡NO SEBASTIÁN NO!

Dani se la devuelve, para luego comenzar a pelear.

Mamá: Mira todo lo que provocas - dice mirandome.

Entre todos, pudimos separarlos, y yo agarre a Sebastián.

Sebastián: Escuchame bien, no vuelvas a escribirle a mi novia diciendole que aún te provoca cosas, ni nada de eso. Respeta - se va y yo miro avergonzada.

Noto a Romina triste al escuchar lo que dijo Sebas. Esta vez si se paso.

Maria: Yo pido posta mil disculpas.

Mamá: No vuelvas por aquí, Maria. Por favor - dicen entrando a casa con Dani.

Él voltea y nos miramos a los ojos hasta que decidí irme atrás de Sebastián.

Lo freno y le tiro una bofetada.

Maria: ¿Vos sos idiota? , ¿Cómo pudiste hacerme esto, Sebastián? Armaste un quilombo por las purás.

Sebastián: ¿De qué te quejas? - se ríe sárcasticamente - seguro vos estás feliz de que ese wacho te haya puesto eso, porque sabes que aún te quiere. Si no querés nada más conmigo, entonces, la dejamos ahí.

Maria: La dejamos ahí, entonces - él frunce el ceño - ¿Qué te pensas? ¿Qué voy a rogarte cuando yo no fui la que cometio el error? Encima que fui sincera, venis y haces esto? No lo pense de vos - regrese a mi casa bajoneada.

No se él donde pasará la noche, pero yo no quiero verlo. Estoy muy emputada.

Daniel R.

Al llegar al cuarto, mis papás se fueron y Romina se sento en la cama mirando hacia el suelo.

Dani: ¿Pasa algo?

Romina: ¿Me pasa algo?, ¿posta me lo estás preguntando? - me mira - me acabo de enterar que le escribiste a esa mina ¿Cómo querés que este?

Dani: Yo pensé que ella me seguía teniendo bloqueado, yo no siento nada de lo que le dije. Es más le puse te odio, y yo no la odio. Le puse puras idioteces, ella ya no provoca nada en mi.

Romina: ¿Vos me querés ver la cara de idiota? Yo ya aguante muchas cosas, y no pienso seguir aguantando más. Decidete y deja de jugar conmigo. Desde que esa piba llego no hace más que armar quilombos.

Dani: Ella no tiene la culpa. La culpa lo tiene el idiota con el que esta.

Romina: ¿Encima la defendes?

Dani: ¿Por qué la odías? Ella no te hizo nada a vos - ella mira hacia otro lado.

Romina: Odio no poder hacer que me ames como la amaste a ella, por eso también la odio a ella. Ahora déjame dormir - se echa nuevamente y se tapa.

Yo me echo a su costado, intento abrazarla, pero es inútil, ella me saca.

Maria B.

Al despertar, me metí a ver las conversaciones, pensé que Daniel me había respondido, pero no. Al contrario, me bloqueo.

Se nota que prefiere estar bien con su enamorada, y yo no soy más que un problema para su relación.

Bajo a la sala y veo a Sebastián junto a mi mamá.

Irene: Ustedes dos necesitan hablar.

Yo me cruzo de brazos y mi mamá se va.

Sebastián se me acerca con un ramo de rosas y yo las recibo.

Sebastián: Me comporte como un completo idiota, te prometo que no volvera a pasar. Yo te quiero mucho y no quiero perderte.

Maria: que bueno que aceptes que sos un completo idiota.

Sebastián: Pero me queres no? - yo lo miro seria - ¿Ni un poquis? - hace puchero.

Maria: Hacelo de nuevo y te juro que se termina todo de una vez por todas. No bromeo, Sebastián.

Él sonríe entre dientes y me abraza.

Daniel R.

Bajo a desayunar y veo a Romina despidiéndose de mi mamá y mi papá.

Papá: Cuidate, hija.

Romina: Muchas gracias - me mira seria - bueno yo ya me voy.

Mamá: Anda con cuidado.

Ella asiente y se va. No voy a ser tan idiota de hablarle sabiendo que está así por mi culpa.

Papá: No entiendo como sigues extrañando a Maria, teniendo un buena mina a lado tuyo. Deberías abrir los ojos - se va.

Mamá: Lo único que se, es que si decides dejar a Romina y volves con Maria, no lo voy aceptar.

Dani: Mamá, no voy a volver con Maria. ¿No te diste cuenta que tiene novio?

Mamá: De ustedes dos, no me espero nada. Ví como se miraban cuando vino ayer, ustedes no respetan ni porque están con otras personas. Dejen de hacer daño a la gente y superen su pasado.

Dani: Lo decís como si fuera fácil.

Mamá: Ya pasaron meses, Daniel. - se va y yo pongo los ojos en blanco.

Quizás tiene razón.