Dopamina | Rosalie H. & Victoria S. (Terminada)

Capítulo 21

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- ¿Cómo esta ella? - Le pregunto Rosalie preocupada

- Mejora - Le contesto Carlisle- Su pulso va a cómo debería de ir

- Es mi culpa todo esto - Tapo su rostro con sus manos- Si no la hubiera llevado a jugar con nosotros no hubiera pasado esto, es mi culpa Carlisle

Carlisle la abrazó consolándola, los demás miraban con tristeza la escena, Emmett había ido a ver a Antonio, quien estaba informado de todo excepto de lo último ya que querían decírselo en persona.

- Ella estará bien - Le murmuro Carlisle consolándola- Todo saldrá bien, ella te quiere tanto como tú a ella

- Me odiara, me odiara tanto que no me va a querer ver de nuevo - Negó entre sollozos secos

Esme se unió al abrazo, no le gustaba ver a ninguno de sus hijos así de mal. Escucharon como Edward había regresado de ver a Bella.

Él iba a preguntar por su amiga, pero al leer la mente de todos prefirió quedarse callado, se estaba odiando por todo lo sucedido.

- Hicimos lo que pudimos, Ros - Le dijo suavemente

- ¡ES TU CULPA! - Le grito saliendo del abrazo de sus padres- ¡LA TUYA Y DE ESA ESTUPIDA HUMANA INCOMPETENTE! ¡DEBÍ DEJAR QUE ELLA Y ANTONIO LA MATARÁN! ¡AHORA ESTOY PERDIENDO AL AMOR DE MI VIDA!

Las palabras de su hermana le estaban destrozando el corazón porque todo era verdad, por su culpa ahora Julia estaba sufriendo en aquella camilla donde alguna vez estuvieron ellos.

- Lo sé - Admitió- No quería que algo le pasara a alguna de las dos, Julia es una amiga para mí, una hermana Rosalie - Trago ponzoña- Cuando la vi en el estudio de ballet solo podía sentirme mal por haber ocasionado todo esto - Se acerco a ella- Ella me trato como un humano más, no como un monstruo, ella, así como a ti me devolvía ese calor humano que todos en esta casa extrañamos, pero las cosas se salieron de control y ni Alice pudo verlo venir

Rosalie abrazó a su hermano sollozando secamente enterrando su cara en su cuello, Edward no dudo en abrazarla con fuerza consolándola.

>> Perdóname por arriesga su vida así, si pudiera cambiar las cosas créeme que las cambiaría, perdóname por haberla arriesgado de esta manera - Murmuraba arrullándola- No siento lo mismo que tú porque eres su pareja, pero como su amigo y hermano me duele saber todo lo que le está pasando

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- Ya lleva casi una semana así - Les dijo Rosalie preocupada- No debería pasar tanto

- ¡¿Dónde está?! - Interrumpió Antonio llegando a la casa

- Antonio es mejor... - Interrumpió a Carlisle

- No me voy a calmar - Le dijo alterado- ¿Dónde está mi hermana, Carlisle?

Al ver que se quedó callado, se guio del aroma de su hermana, corrió a gran velocidad hasta llegar a una habitación, al abrirla vio que era un consultorio, corrió hasta donde estaba Julia acostada.

- ¿Qué le hicieron? - Murmuro viendo a su hermana- La convirtieron, ¿Cierto? - Miro a los Cullen

- Teníamos que hacerlo, se hubiera muerto por los golpes - Le contesto Edward confundido

- No - Negó molesto- La están matando, están matando a mi hermana - Los miro con enojo

- No morirá en realidad... - Interrumpió a Edward

- No lo entiendes, nuestra naturaleza rechazara el veneno y la matara de verdad - Soltó molesto- Con unas transfusiones de sangre y mi ayuda se iba a recuperar, la están matando literalmente y su corazón está dejando de latir por lo mismo, ya hubiera despertado

Los Cullen quedaron estáticos ante la información de Antonio, en vez de ayudarla, la estaban matando.

>> ¿Qué hacen ahí quietos? Hagan la transfusión para sacarle el veneno - Los Cullen reaccionaron

Carlisle con la ayuda de Edward empezaron a buscar todo para hacerle la transfusión, los demás vieron como Antonio enterraba levemente unas garras en el brazo de Julia con los ojos cerrados, unos segundos después la soltó gritando de dolor.

Emmett lo agarro al ver que se iba cayendo de espalda por el dolor, Antonio al abrir los ojos estaban de color amarillos sin brillo alguno, cuando solo jadeaba por aire regresaron a su color natural.

- No sé cómo Julia lo hace, pero duele demasiado la ponzoña - Dijo con dificultad- Ahora entiendo a Derek cuando nos curaba - Dejo ir la cabeza hacia atrás recuperándose- ¿Cómo soportaron el dolor? - Les pregunto a los Cullen

- Nadie lo pudo soportar - Le respondió Emmett- Era como si te quemaran por dentro

- Así lo sentí - Asintió parándose mejor- Esperemos unas horas o unos días, si no despierta tendremos que hacer que se despierte - Vieron como salía de la habitación mientras sudaba

Emmett lo siguió para cuidarlo, los demás veían a Julia quieta, su corazón bombeaba cada vez más lento como estos días que había pasado, Rosalie estaba demasiado temerosa a lo peor.

Habían empeorado la situación en vez de mejorarla, todos compartían ese mismo pensamiento sin dudarlo.

- No despierta - Le dijo Rosalie apenas lo vio entrar a la habitación

Veían como Antonio escaneaba el cuerpo inmóvil de su hermana mientras se ponía a su lado izquierdo, Rosalie se mantuvo alado derecho de Julia sosteniendo su mano tibia.

El corazón de Julia bombeaba lo suficientemente lento para mantener su temperatura tibia, en vez de caliente como antes, la palidez de Julia había aumentado.

- ¿Intentaron quitarle la anestesia? - Les pregunto a todos sin dejar de mirarla

- Sí, ya no tiene nada, pero no funciona - Le contesto Carlisle

- Bien - Trago saliva en seco- Tendré que despertarla, Rosalie aléjate - Le pidió

- ¿Qué? - Lo miro confundida

- Aléjate, si ella despierta alterada te lastimara gravemente - Le explico- Manténganse en distancia, por favor

Los Cullen se juntaron cerca de la puerta apartados de ellos, Antonio suspiro profundamente preparándose mentalmente. Vieron como las garras que habían visto el otro día volvían a salir, las patillas de Antonio se alargaban, de su boca salían grandes y afilados colmillos.

Su rostro empezó a tomar otro aspecto entre pequeños gruñidos, los ojos cafés de Antonio se pusieron de un color amarillo sin brillo, vieron como tomo aire para soltar un gran rugido muy parecido al de un león.

Durante el gran rugido hizo que Julia se sentara de golpe con los mismos rasgos que Antonio mientras gruñía, pero sus ojos no eran de ese mismo amarillo sin brillo. Los Cullen estaban sorprendidos al saber por fin que naturaleza eran ambos hermanos.

Cuando pararon de rugir Antonio regreso a la normalidad al igual que Julia quien se dejó caer a la camilla jadeando por aire.

- Maldita sea - Le dijo a Antonio- Me quemaba por dentro la ponzoña, duele menos los golpes de Derek que esta mierda, hermano - Miraba a su hermano con una sonrisa

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