AUTOSTOP [YoonSeok]

9a parada: Carrera de motos [Pt.2]

La moto iba mucho más rápido de lo que Hoseok había imaginado. ¿En qué momento le había parecido que era una buena idea subirse a ese trasto? Ugh, claro, cuando se imaginó abrazando a Yoongi mientras este conducía la dichosa motocicleta. Ahora lo estaba viviendo, pero mentiría si dijera que lo estaba disfrutando.

Hoseok temía por su propia seguridad, pero también por la de Yoongi, porque este le había dado su casco antes de arrancar.

Ni siquiera sabía dónde estaban, lo único que podía ver eran los coches que iban esquivando y a otros participantes de la carrera que intentaban alcanzarlos. No sabía quién iba a ganando, pero definitivamente no eran los primeros porque a su izquierda había una motorista de cabello rizado con otra chica abrazada a ella, e iban a la misma velocidad que ellos.

— ¡Hobi hyung! ¡Hola!

El susodicho miró a su derecha y vio a Jimin sonriéndole de oreja a oreja, mientras un concentrado Jungkook aceleraba con la intención de adelantarlos. Suga y Kook cruzaron miradas por un momento, luego el más joven volvió a mirar hacia delante y consiguió dejar atrás a sus amigos.

Atravesaron un túnel escasamente iluminado y a la salida tuvieron que esquivar varios coches y un camión cisterna; el sonido de los cláxones reflejaba el enfado de los demás conductores, pero para los motoristas servía de estímulo para continuar la carrera.

Hoseok seguía firmemente abrazado a Yoongi, y en un momento incluso presionó su frente contra la espalda del mayor con los ojos cerrados, esperando que aquello terminara pronto. Se sentía como en una maldita montaña rusa, y Seok odiaba las montañas rusas con todas sus fuerzas. Confiaba en Suga pues era obvio que tenía experiencia y no era la primera vez que participaba en una de aquellas carreras de motos, pero seguía siendo peligroso.

Habían perdido de vista a la motorista de cabello rizado y ahora en esa posición estaba Harin, acompañado por una joven de pelo rubio. Cuando los alcanzó, el tipo le guiñó el ojo a Hobi y se dispuso a adelantarlos. Por el ruido de los motores no se escuchó, pero Yoongi soltó un gruñido molesto y pisó más el acelerador; no se iba a dejar ganar por él.

La chica de la otra moto chilló de emoción cuando la velocidad aumentó todavía más, mientras que Seok tuvo la sensación de que su alma abandonaría su cuerpo en cualquier momento, como en las películas de dibujos animados.

Ignorando a los demás participantes, la mayoría de los cuales ya se habían quedado atrás, Suga se concentró en competir con Harin. Su rivalidad se remontaba a la primera vez que Yoongi participó en una carrera muchos años atrás, y para sorpresa de todos, ganó arrebatándole así el título al que hasta entonces había sido "el número uno": Harin.

Un tiempo después también apareció otro competidor que los ganó a ambos: Jungkook. Sin embargo, a ninguno de los dos les importó no ser el ganador porque aquello se había convertido en una cuestión de honor. No se trataba de llegar en la primera posición, sino de llegar antes que el otro.

Volviendo al presente, la segunda posición estuvo reñida por un buen rato porque en el instante que uno tomaba la ventaja, el otro en seguida le alcanzaba. Hoseok divisó de nuevo a Jungkook y Jimin en la distancia y, segundos después, se dio cuenta con gran alivio de que estaban regresando al punto de partida.

No obstante, en lugar de ralentizar, en ese momento la moto alcanzó máxima velocidad de toda la carrera y Seok vio pasar toda su vida por delante de sus ojos. Nunca más cometería el error de subirse a una motocicleta. Cerró los ojos con fuerza otra vez y no los abrió hasta que sintió que estaban a punto de detenerse.

— ¡Jungkook es el ganador, un fuerte aplauso para el campeón! — escuchó que anunciaba la chica de la banderita a cuadros. Jimin le aplaudió también, antes de darle un beso en la mejilla y después otro más largo en la boca.