Miss Movin' On (Zayn Malik Fanfic)

Capitulo 6

— Parece que te conoce, porque desde que entro no deja de mirarte Elena. — Marta dijo analizándolo de pies a cabeza — Y no es feo... ¿Por qué no le hablas?  Preguntó - El no sabe que te están buscando - Al parecer Marta vio el gesto de preocupación que hice al siquiera pensar en hablarle, ya que segundos después respondió con ironía

- Tal vez vio alguno de los carteles donde me buscan y me recuerde. Todos hacen lo que sea por dinero - Dije apagada porque era la verdad. Vivíamos en un mundo que se manejaba a través del dinero, no importaba lo que hicieras o quisieras, todo lo que hiciéramos era con el fin de conseguir dinero.

Marta no respondió, solo seguía observando al chico hasta que se fue, Tomás se volvió hacia nosotras y se sentó.

- Parece conocerte - Dijo Tomás

- ¿Verdad que si? - Respondió Marta

- ¿Por qué no lo saludaste? - Pregunto Tomás

- Que porque podrían encontrarla - Marta respondió por mí una vez más

- Pero si trabajarás aquí es más probable que te encuentren ¿No lo crees? tendrás que hacerte un cambio entonces, no podrás esconderte de cada cliente que entre por esas puertas - Termino diciendo Tomás, y era cierto, aun que mis padres no supieran que trabajaba aquí, tenía que tomar medidas

- Me cortaré y teñiré el pelo, creo que los pupilentes también serían una buena opción - Tome un mechón de mi cabello y me aferre a él como si trataran de robarlo. Era largo, 5 años cortando únicamente las puntas maltratadas habían dado como resultado un cabello de 48 centímetros.

Cortándolo corto y con un fleco cubriendo mi frente y cejas sería perfecto. Más los pupilentes, nadie incluyéndome a mí, me reconocería.

- Pues vamos ahora mismo - Marta se levanto y me sostuvo la mano para ir con ella

- ¿AHORA? - Definitivamente ahora no quería despedirme mi cabello y la personalidad que había construido con el tiempo. Esta era yo, y si era capaz de cambiar mi apariencia, significaba que no solo cambiaria algo de ella, si no toda yo.

- ¿Cuánto dinero Tienes ahorrado? -

- 800, ¿Por qué? - Pregunte aterrada

- Perfecto, vamos ahora -

- ¡Pero Espera! Tengo que quitarme el uniforme -

- ¡Apúrate! - Camine en dirección al cuarto y me puse lo que traía originalmente (http://www.polyvore.com/cgi/set?id=97604596)

Una vez que estaba lista, fui corriendo de vuelta. Nos despedimos del señor Tomás y salimos de la panadería. Estaba preocupada por Tomás ¿Cómo podría cargar con todo el trabajo de la panadería solo?

Admito que también estaba nerviosa y alterada al saber que había una posibilidad «Por más mínima que fuera» de encontrar a mis padres, la policía o algún amigo que me reconociera. No pude evitar bajar la guardia por ningún momento y el tiempo se me hiso horriblemente eterno.

Había olvidado que traía puesto mi gorro y los lentes de sol. Si la gente no era astuta, no se podía aparentar la persona detrás de los lentes y gorra. Realmente no quería cortarme el pelo pero era algo necesario y sentí un nudo instantáneo en mi cabeza al imaginarme con el cabello hasta la clavícula.

Fuimos primero a una peluquería cualquiera, en la que por primera vez en toda mi vida «Y por "Toda mi vida" me refiero a estos 17 casi 18 escasos años de sufrimiento y limitaciones» permití que me cortaran el cabello más de 15 centímetros. Haciendo que este llegara a la altura de mis omóplatos y fuera el cabello más corto que me había cargado además del nuevo color avellana que lo invadía desde la raíz hasta las puntas.