En esta y un millón de vidas ||Wilmon ♤ Young Royals♤

06: Mamá no esta

Narra Simón

Caminaba por el hospital, iba hacía el consultorio de Wilhelm, cuando sentí un brazo encima de mi hombro por un momento creí que era el pero escuche la fastidiosa voz de August.

- Hey ¿que tal todo Simón?.

- Pues estaba bien hasta que llegaste ¿No tienes algo que hacer?

- Hey tranquilo lindo, sólo trato de ser tu amigo.

- Pues no me interesa tu amistad gracias, pero no gracias - Quite su brazo de mi hombro - Y no me llames lindo.

- Vamos deja de ser así -Se puso enfrente mío y me acorralo con su brazo- ese idiota de Wilhelm sólo va a jugar contigo yo no.

- El verdadero idiota aquí eres tu, como se nota que lo que te duele es no tener ni la mitad de atención que tiene Wilhelm ¿Pero sabes algo? El tiene todo eso por que es todo lo que tu no eres incluso como doctor - Lo aleje de un empujón y seguí caminando -

Tremendo idiota ¿Cómo se atrevía?.

- Tarde o temprano lo verás Simón, y entonces vendrás a mi.

- Sigue soñando imbécil - Trate de calmarme antes de llegar con Wilhelm no quería darle una mala cara -

Llegue con Wilhelm y toque la puerta.

- ¡Adelante! - Gritó desde adentró -

- Hola...

- Hola Simón - Sonrió y hice lo mismo - ¿Descansaste bien?

- Si todo bien, por cierto Sara me dijo que tuviste que cargarme - Baje la mirada - Gracias.

- No tienes que darme las gracias, estabas cansado y no quise despertarte.

- Ayer la pase muy bien, espero podamos volver a salir algún día - Sonreí -

- Pues ahora que lo mencionas hoy iba a decirte, si querías ir a una fiesta conmigo... casi no habrá gente que conozca así que pensé en ti.

Sentí algo raro en el estómago cuando me dijo eso, algo en mi se sintió especial al escuchar "pensé en ti".

- Me encantaría acompañarte ¿Cuando es?.

- Es el siguiente fin de semana pero igual invitado ya estás.

- Y ¿Dónde va a ser?.

- Con mi vecina, no es muy lejos y yo pasaría por ti y te dejaría en tu casa.

- En ese caso voy con todo gusto.

- Ahora que ya tengo seguro que me vas a acompañar, vamos a ver por que te cansas tanto, así el día de la fiesta nos quedamos hasta amanecer.

- Igual si me duermo tu me cargas - Ambos nos reímos y seguimos con la consulta -

Narrador Omnisciente

De el otro lado de la puerta August había escuchando todo, el sentimiento de celos lo invadió, ¿Por qué Wilhelm?, ¿En verdad era mejor que el?.

Era claro que siempre se había sentido intimidado por el, pero justo ahora se sentia pisoteado, lo que Simón le había dicho le dolió, era un idiota, tenia que gustarle justo el chico que ahora tenía a Wilhelm en un pedestal. Si tan sólo una parte de el hubiese razonado todo y entendiera que su actitud fue la que lo llevo a esto quizás no hubiera llegado a algo tan estúpido como lo que pensaba.

Su cerebro ya no razonaba sólo necesitaba sacar su coraje, estaba molesto, con Wilhelm, con Simón. Iba a desquitarse sin duda lo haría.