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Un albino soltó un largo suspiro mientras observaba el techo, el viento soplaba con algo de fuerza, ventilando así la habitación en la que se encontraba, la cual no era suya, por supuesto. Cubrió su rostro con una almohada, recapacitando un poco sobre lo que acaba de hacer. La noche era algo tranquila, bueno, para 2 personas fue de todo menos tranquila...
El albino escuchó su teléfono timbrar, ignoró aquel sonido y prosiguió en su intento de descansar, el celular volvió a timbrar, y nuevamente, el albino ignoró aquel sonido, una vez más, el teléfono comenzó a sonar, ya harto de aquel tono de llamada, el albino agarró su celular, viendo la persona la cual llamaba era Mitsuri, su compañera de cuarto, así contestó la llamada algo irritado.
- ¡Hasta que contestas! - Exclamó la peli-rosa.
- Si, si, si. ¿Que putas quieres? - Contestó molesto el de cicatrices.
- Sólo quería avisarte que estoy con Iguro-san e iremos a la casa de una amiga a hacer cualquier cosa, así que no me esperes - Avisó la oji-verde.
- Ah... De acuerdo. Ahora deja de joder, quiero dormir. Adiós. - Colgó la llamada y dejó el celular en la mesa de noche.
Se quedó pensando unos segundos mientras miraba su celular, después de analizar bien la situación, quedó algo atónito.
- Espera... ¿Cómo carajos va ir a dormir con Obanai a otra parte, si Obanai ahora mismo está durmiendo en su cama conmigo... - Dijo en voz baja el albino impactado, para luego mirar al peli-negro el cual estaba durmiendo, encontrándosecompletamente desnudo, pero la manta le tapaba la cintura para abajo. - Maldita zorra, se va a ir a cojer y por eso me mintió, todas las mujeres son iguales. - Dijo de la manera más hipócrita posible, si, hipócrita porque acababa de engañar a su "novia" con su mejor amigo, en fin la hipocresía.
El albino sólo suspiró y abrazó al pequeño peli-negro, mientras le daba pequeños besos y mimos.
Bueno, rebobinemos, ¿Cómo llegaron a esto? Fácil, unos chistes sexuales y junto con algunas botellas de cerveza, fueron más allá de lo que pensaron y terminaron cojiendo en la habitación del azabache.
~🍃
Un albino y un azabache se encontraban caminado, la noche estaba algo clara, y el viento soplaba con fuerza, a pesar de ser casi media noche, había bastante ruido en la ciudad. El azabache intentaba "consolar" a su amigo, el albino había tenido una discusión con su "novia", si, entre comillas porque no era nada oficial, de vez en cuando follaban, hablaban, a veces se besaban, pero nada más, nada serio, y eso era exactamente lo que le jodía a Kanae, a esta chica se le mojaba la tanga con el simple hecho de ver a Sanemi, y saber que el albino no la quería como nada serio, y sólo la veía como un juego más, le cabreaba demasiado.
