Mismos intereses (Aizen × OC)

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Después de que los hollows con apariencia animal entendieran que no era su enemiga sino su aliada, Aizen me dio un pequeño recorrido por las habitaciones y salas más importantes de la gran estructura para que me familiarizase con ellas, maravillándome con cada una de ellas y, una vez visto todo, volvimos a la Sociedad de Almas con el mismo método de entrada que hicimos anteriormente, intentando no parecer que habíamos estado mucho tiempo fuera del cuartel, cosa que resultaba increíble ya que nadie notó nuestra ausencia.

Aizen: Confío en que no vas traicionarme tras haberte llevado al lugar donde nos hospedaremos durante un largo tiempo mientras nuestras filas estén bien entrenadas, porque no dudaré en matarte.-dijo serio- Somos semejantes y yo sé cómo puedes actuar, por ello.- se posicionó delante mía-

Kaori: No debes preocuparte. Hemos hecho un trato, tú te conviertes en el nuevo rey espiritual y a mí me dejas el trabajo burocrático- dejé mi zanpakuto sobre el colchón- Deberías prestar más atención a tu alrededor y no tanto andar vigilándome mientras intento permanecer con el perfil bajo.

Aizen: Esa es una buena idea-sonrió satisfecho- Aunque si no aparentas ser una chica buena, te tratarían igual de bien. Recuerdo a un hombre que era de lo más descarado con las mujeres y que era muy querido por todos.- tomó una pose reflexiva- Quizás te mande al mundo de los vivos para que lo puedas conocer y os llevéis bien. Prepararé todo y te avisaré con antelación para que te mentalices. Por cierto, no quiero que te inmiscuyas en la pelea que se dará en vuestra primera noche-yo asentí dándole a entender que había comprendido todo mientras veía como él se acercaba para seguir hablando- Y, lo más importante, debes tener cuidado con un hombre de pelo largo rubio y sombrero de rayas

Kaori: No te preocupes por Urahara. Lo mantendré a raya-dije sin borrar mi sonrisa dejándole con la boca abierta- ¿En serio creías que no investigaría?

Aizen: ¿Como sabes su nombre?-frunció el ceño y yo rodeé mis brazos en su cuello-

Kaori: Digamos que hablo mucho con Mayuri- rocé mi nariz con la suya y este no hizo intento de apartarse-

Aizen: No me gusta que pases tanto tiempo en ese laboratorio y por eso te digo que no quiero que te relaciones con Urahara Kisuke. Es igual de insoportable que Kurotsuchi, incluso más-esta vez utilizó un tono más duro.

Kaori: Dame una razón para hacerte caso y me lo pienso-dije divertida-

Aizen: Porque desde que te expliqué mi plan te convertiste en parte de mí, eres de mi propiedad -colocó sus manos en mi cintura acercándome más a él-

Kaori: Ni en tus mejores sueños, Sosuke.-acaricié su nuca- Yo soy dueña de mi vida.

Aizen: Ni los corazones más nobles caen ante los más oscuros-dijo rozó nuestros labios provocando una corriente eléctrica en mi columna vertebral-Ten linda noche- se marchó dejándome con el líbido por los cielos.

Kaori: Este hombre es peor que el opio.- me llevé las manos a la cabeza- Me tiene totalmente loca.

Fueron pasando los meses y ya me había ganado la confianza de muchos del Seireitei cogiéndole cariño a más de uno, pero sin que afectase a mi percepción del mundo en el que vivía para no desviarme de mi objetivo, siendo Rukia la persona con la que más tenía más relación, ya que era una pieza bastante importante en el plan, que sería el detonante del principio de lo que sería una nueva era, aunque debía tener cuidado debido a que su hermano solía rondarnos en varias ocasiones haciéndome actuar con cautela.

Kenpachi: Niña, te estoy hablando-se quejó y yo volví de mis pensamientos- Te pregunté si ibas a tardar mucho en volver de la misión.- comentó tras contarle que seguramente me enviarían a una exploración del bosque a las afueras de la ciudad, al haber avistado algún que otro hollow rondando por el territorio. Obviamente era una tapadera creando cierto desconcierto en las personas a las que se las comenté y que llegasen a cuestionar los mandatos de los superiores, ya que tras mi pelea en aquel lugar, me felicitaron por ello y me asignaron dicho cometido.