• Dolor de alma •

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Narra ana

me había quedado dormida en el tejado del cuarto de mi papá, la verdad no estaba incómoda pero si estaba haciendo mucho frío y sip soy masoquista y hasta ahora me entero, cuado desperte vi a mirabel justo saliendo de su cuarto y subiendo al tejado con ayuda de la casa, una vez subió se dirigió a la ventana de la abuela y justo salía por ella, sosteniendo un collar con una foto que no vi con claridad, me escondi para que no me viera mientras que mirabel hacia lo mismo y ahí empezo a rezar la abuela 

alma - hay pedro...te necesito... grietas en nuestra casita... si la familia supiera cuan bulnerables somos en realidad... si nuestro milagro agoniza -suspiro- no dejaré que se pierda otra vez nuestro hogar... ¿por que tienes que pasar esto? Abre mis ojos... si la respuesta esta aquí ayudame a encontrarla, ayudame a proteger a la familia, ayudame a salvar nuestro milagro -besa la foto de su querido esposo y entra al cuarto-

mirabel - ... yo voy a salvar el milagro ...

eso fue lo que escuche, al parecer nadie noto mi precencia, mirabel se fue a su cuarto y yo aproveche para bajar del techo en silencio...

•a la mañana siguiente•

mirabel - dolores, hola! De mis primas mayores tu eres mi favorita y siento que puedo contarte lo que sea y siento que tu puedes contarme a mi lo que sea como el problema con la magía de anoche que no le preocupo a nadie más pero tal vez si paso algo y tal vez yo deba saberlo

felix - camilo deja de fingir que eres dolores solo para repetir

camilo - tocaba intentar -cambió a su verdadera forma-

dolores - la única preocupada por la magía eres tú y las ratas que hablan entre los muros, oh y luisa, oí ese tic de su ojo toda la noche mjin -su sonidito tipico ^^-

luisa - aqui tienen -pone la mesa-

alma - a la mesa todos a comer ahora ... familia todos nos regocijamos por Antonio y su maravilloso don~ -mientras se sentaba pero había animales en ella-

Antonio - estaban calentado la silla

alma - gracias toñito - decía con desagrado- y pronto encontraremos como aprovechar la bendición que recibiste

Ana - aquí vamos otra vez

alma - dijiste algo ana 

Ana - nop, nada que quieras saber abue~ -interrumpida por un golpe en la mesa por parte de mirabel-

alma - mirabel! Si no puedes poner atención yo te ayudo!... casita...

Mirabel - en realidad ¡uoh! - decía mientras la casa la acomodaba al lado de alma-

alma - y como les decía, jamás debemos dejar por hecho nuestro milagro

Ana - aja

alma - Ana si no quieres poner atención yo te puedo ayudar también

Ana - no gracias estoy muy atenta -indiferente mientras no deja de jugar con la comida-

alma - almenos come!

Ana - estoy admirando la comida ¿puedo? -Mientras la fulminaba con la mirada-

alma - agh -rodea los ojos- en fin, asi que hoy trabajaremos el doble de duro