A los 15 años conocio -no por primera vez- a quien seria su salvador, alto de cabello negro, ojos castaños, vesrido con traje a medida, a ojos de Saint "increiblemente guapo".
Desde joven, antes de los abusos fue conciente de que le gustaban los chicos, nunca lo dijo y despues de todo lo que habia pasado estaba tan roto que era imposible que se dejara tocar por alguien.
El joven doctor, Perth Tanapon vio a Saint, aquel hermoso chico que ha atendido en muchas ocasiones, se quedo un momento observando a esa bella criatura sin entender como podian la vida ha podido ser tan cruel, mas decidido le dedico una sonrisa y retomo su camino al despacho del padre del joven, estaba alli para hacer negocios y conocer la clase de animales que era esta familia, él se consideraba un depredador que podia acabar con quien quisiera, y para la desgracia de esta familia se habia interesado en el pequeño al que ellos lastimaban, por lo que si estas personas tenian que morir para él obtener a ese hermoso y herido joven, que asi fuera, no le importaba, solo eran basura. Entro al despacho sin llamar y con una sonrisa ensayada ignoro el espectaculo de infidelidad que estaba dando el patriarca de la familia, se aclaro la garganta y le dijo al hombre que tenian que hablar, el dueño de casa le pidio a la joven que le estaba dando placer que se retirara a esperarlo en la habitacion. Cuando ella se fue comenzaron a hablar.
Saint se encontraba en su habitacion, durante toda la tarde no lo llamaron, lo que en parte fue un alivio y una decepcion, agradecia que el hombre guapo no lo comprara tambien le generaba desilucion, muy en sus adentros admitia que le hubiera gustado estar entre esos fuertes brazos, reprendiendose por semejantes ideas golpeo su cabeza con la palma y se acosto boca abajo dispuesto a dormir hasta el dia siguiente.
A media noche, como era costumbre fue sacado de su habitacion a rastras por su padre, lloraba en silencio sabiendo lo que le esperaba, fue metido aquella oscura habitacion de siempre, desnudado y atado con cadenas que lo dejaban colgado de una de las vigas del techo, lastimando sus muñecas hasta el punto de hacerlas sangrar, Saint se concentraba en ese dolor, retrayendose de lo que sea que le hicieran despues. Golpes, cortes, latigazos y luego venia lo mas repugnante.
Los hombres en la casa eran como lobos que solo querian poseer su cuerpo, solo buscando su propio placer y las mujeres solo miraban hasta que todo acababa y luego lo golpeaban porque sus maridos les eran infieles por su culpa.
Vio una sombra cerca de la puerta media abierta y reconocio esos ojos castaños en medio de la oscuridad, aquello lo hizo llorar mas fuerte y sentir tanto asco de lo que le estaban haciendo hasta el punto de vomitar, no queria que ese hombre lo viera asi. Los golpea que recibio por lo que habia hecho ensuciando a su abusador, no se hicieron esperar, uno tras otro hasta dejarlo inconsciente.
Perth estaba asqueado, horrorizado y furioso, no podia creer lo que hacian a esta hermosa criatura, haria hasta lo imposible por salvar a esa criatura, lo tomaria bajo su cuidado para protegerlo, amarlo y cuidarlo.
*Mientras estoy escribiendo esto, por primera vez en mi vida tengo ganas de matar a uno o varios personajes de muy mala manera.
Por cierto esto va a ser una historia corta, de capitulos cortos. Cualquier sugerencia es bien recibida, los quiero. Tori PS.
