Paradies [✓]

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Uoahh una abejita, seguro me quiere picar. Huiré de aquí cantadooo y bailandooo Taraarará.

Hades.

Fue gratificante escuchar ese "Te quiero" por parte de mi cría, fue tan único ver sus orbes honestos y ese pequeño gesto de poner mi mano en su pecho me afirmo el porque me gusta tanto, porque estoy enamorado de ella.

Cuando la vi por primera vez en el concierto me gusto físicamente, pero había algo más que me atraía a ella, y después de nuestra noche por alguna extraña razón me dolió que se fuera, es decir, confíe lo suficiente en ella como para dormir en la misma cama y aunque ha sido muy poco tiempo el que hemos hablado —mi culpa por ignorarla una semana—, todo el tiempo estuve pensando en ella, y en como eliminar este sentimiento que estaba naciendo. Siempre confíe en ella y esta tarde me ha demostrado que no me equivoque, pues no intento ocultar lo sucedido, al contrario, me aclaro las cosas, me hizo saber que si tenia preguntas ella me las respondería.

Después de cenar vimos "Thor Ragnarok" y la molestaba cada vez que salía el dios de las mentiras, no puedo ponerme celoso pues es mi antihéroe favorito. Ahora estamos en la cama, yo sobre su pecho y ella esta acariciando mi cabeza, sus dedos se pasean entre mi cabello y hacen círculos lentos creo que aquí le llaman "hacer piojito" me gusta estar en esta posición con ella, me da una paz que nunca pensé sentir, me da seguridad, espero yo cause los mismos sentimientos en ella.

No quiero preguntar nada sobre el idiota que vino a molestarla pues yo también tengo un pasado del cual aun no me siento listo para hablar con nadie y la verdad es que no me quiero ganar su desprecio. Por el momento solo quiero terminar lo que estábamos haciendo antes de que nos interrumpieran.

—Cría. —la llamo levantándome de su pecho para poder conectar nuestras miradas.

—Mande.

—¿Hacemos cardio? —pregunto con una sonrisa coqueta.

—¿Tienes energía?

—Para ti siempre y más si se trata de quemar calorías juntos. —digo pasando las yemas de mis dedos por sus muslos.

Me besa con vehemencia mordiendo mi labio inferior, me gusta el que no se cohíba a la hora de obtener lo que quiere ya sea en su vida diaria o en la cama como ahora, me abro paso entre sus piernas y tomo sus caderas refregándome en su intimidad dejándole claro que esta vez el control lo tengo yo. Ella cede cuando lamo sus pechos por encima de su pijama, me gusta el juego previo y su reacción a él.

Pequeños jadeos salen de su boca, pasa los dedos entre las hebras de mi cabello sujetándome más contra ella, eso me deja claro lo mucho que esto le está gustando.

—Tienes que ser más silenciosa si no quieres que nos escuchen. —digo a la vez que le muerdo un pezón, haciendo que ella se muerda el dorso de la mano para no soltar un gemido.

Quiero hacerla perder el control me gusta cuando eso pasa, decidido bajo hasta su abdomen dejando un camino de besos, con la punta de mi nariz recorro la tela de su short hasta llegar a su entre pierna donde hago círculos oliendo su excitación, puedo ver lo mojada que está ya que su humedad traspasa la tela del pijama, tal vista envía una punzada a mi entre pierna que como es de esperarse esta dura y lista.

Me incorporo sobre mis rodillas, hago que mis manos viajen al borde de la parte de arriba de su pijama sacándola, dejando sus pechos expuestos a mi vista, los pezones están erectos y su respiración es acelerada, los masajeo sin perder el contacto visual que se ha formado, sus pupilas están dilatas, tiene las mejillas rojas y los labios hinchados. Dejo sus pechos para recorrer su abdomen, juego con su piercing para después seguir hasta el inicio de sus pantaloncillos y bragas, pero no los bajo, me inclino hacia sus piernas y empiezo a besar desde sus pantorrillas hasta la cara interna de sus muslos dejando un recorrido de besos sin romper la conexión de nuestras miradas, dejo un beso encima de su intimidad viendo como tiembla presa de la expectación.