20- Yo me quedo

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¿Decepción? ¿Era eso lo que había sentido? En su cabeza se había ido formando la mínima posibilidad de que aquel bebé fuera suyo, desde que la vio a su vuelta de San Diego, decía mínima porque Lexa tomaba anticonceptivos y con Nicole nunca habían fallado ¿Pero existía la posibilidad, verdad? Estaba ahí. No sabía cómo sentirse, se bloqueó, se quedó en estado de shock y no solo un rato, tanto tiempo que creyó que no volvería a la normalidad nunca más, pensando en Lexa y en lo que había visto. Lexa embarazada, es que todo su organismo por dentro y por fuera reaccionaba de forma brusca y su cabeza no terminaba de ubicarlo, de encontrarle sentido y mucho menos de asimilarlo ¿Le gustaría que fuera suyo? La pregunta se respondió sola cuando sintió aquel pinchazo frío en el pecho y esa sensación de decepción y bajada de tensión, todo a la vez, cuando le dijo con aquel tono y una mirada dura "No es tuyo" tan segura de lo que decía que no había lugar a duda que no lo era. Y en lugar de sentir alivio porque ella no quería tener más hijos, y lo tenía tan meridianamente claro, que le sorprendió demasiado sentir aquello, tan ilógico y fuera de lugar, porque no solo significaría que fuera suyo, si no que el hecho de que lo fuera lo cambiaría todo, todavía no sabía cómo, pero estaba segura de que nada sería igual. Lo pensó, lo pensó durante dos días e intentó adivinar cuales serían exactamente las consecuencias y pensó el por qué Lexa no le había dicho nada, ahora lo entendía, porque no tenía nada que decirle y eso debería ser genial, porque así ella tampoco tendría nada que decirle a Nicole, ni deberle explicaciones a Connor, aquella vida que había salvado la mantendría así, pero es que verla embarazada la había removido al completo y no se lo podía sacar de la cabeza.

Es que se convenció inconscientemente de que era suyo, a pesar de no querer hacerlo. Mal, estaba horriblemente mal sentirse decepcionada por eso ¿Es que acaso no era consciente de la que se le vendría encima? Quizás su parte racional había quedado tan eclipsada que era incapaz de tomar las riendas, enterrada entre kilos y kilos de "Un bebé de Lexa y mío" algo que no se había planteado ni cuando pensaba dejarlo todo por ella y que de repente le decepcionaba que no fuera así, no podía querer algo que no debía pasar, que no podía pasar, pero quiso a Lexa, amó a Lexa y todavía la amaba y tampoco debía ni podía pasar, tampoco esperó enamorarse de ella, no lo planeó y fue lo mejor que le había pasado en la vida ¿Por qué no podía pasar lo mismo con aquello? A veces lo inesperado se convierte en algo bueno, es lo que le pasó con Connor y ahora era la única persona sin la cual no podría vivir. No entraba en sus planes, no lo quería, aquello afectaría de forma irremediable a su familia, es posible que todo se fuera a la mierda y si Lexa no le había dicho nada era porque tampoco quería tener nada que ver con ella ya, y a pesar de todo eso, ella va y se decepciona, es que no estaba bien de la cabeza, era la única explicación lógica. Querer a su familia tal cómo era, tal cómo estaba y a la vez querer un bebé con Lexa era del todo incompatible y precisamente porque Lexa era incompatible con su familia, había tomado aquella decisión, el propósito de todo eso era su jodida familia.

¿Cómo iba a ser su relación con Lexa a partir de ahora? ¿Inexistente? ¿Compañeras de trabajo? ¿Enserio? Pues tendría que fingirlo. Pero eso no era lo peor de todo, no, ni mucho menos, porque si no era suyo significaba que tenía que ser de alguien más, una tercera persona ajena a ellas dos, a un tío, más concretamente a un tío al que Lexa se había follado y lo había hecho poco después de que ellas lo dejaran, no había perdido el tiempo en aquella puta cuidad y eso le jodió y lo entendió a partes iguales, ella se lo merecía y Lexa no le debía nada. ¿Sentiría algo por él? ¿Se podría enamorar de dos personas a la vez? Era imposible que se hubiera enamorado de él, completamente imposible y menos que ese niño hubiera sido buscado. ¿Estarían juntos? ¿La había dejado después de dejarla preñada? Porque si era así lo mataba, vio cómo lo pasó Nicole cuando ella se comportó con una desgraciada, no quería que Lexa pasara también por aquello, le dolería igual y más que cuando fue consciente de lo que había hecho ella. Se iba a marear, al final del día siempre acababa así, con una sensación demasiado extraña en el cuerpo, dolor de cabeza y ganas de romper cosas para sacarlo todo. Cada vez que pensaba en lo que le había dicho Lexa, en cómo la había mirado, se hundía un poco más, Lexa la odiaba, la odiaba aunque intentara disimularlo, estaba claro que ya no la quería, que no la quería cerca, y eso era lo que ella había buscado, por el propio bien de la morena, pero dolía demasiado a pesar de haberse hecho a la idea, pero es que encima ahora iba a tener un bebé, algo que Lexa siempre había querido, y lo iba a tener con otra persona, formaría su propia familia y ella no estaba preparada para eso, era una egoísta de mierda pero no estaba preparada, cómo tampoco lo estaba para estar cerca de ella y no poder tocarla, no poder besarla, volver a hablar con ella, a mirarla tan de cerca solo había hecho que recordarle con muy mala leche lo que todavía sentía, lo que significaba para ella y la perdió estando lejos, pero es que seguía sin ella aun estando cerca. Debía de ser así, no había que darle más vueltas y lo mejor que le podría pasar es que aquel niño no fuera suyo y que la morena rehiciera su vida, de verdad era lo mejor para las dos. Se acabó el drama definitivamente.

The price of loving you - GIP Clarke -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora