Un loco amor

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Enrique

La vida nos regala momentos maravillosos. Nos permite muchas cosas. Como ver el amanecer, ver el recorrido de las nubes, sentir el aire en nuestro rostro, ver las hojas de los árboles moverse, el anochecer, mirar las estrellas, la luna, en fin las cosas más lindas de la vida.

Los días pasaban y todo iba mejor que nunca, y eso no me gustaba en lo absoluto. Ya que cada que algo estaba bien algo debía estar mal. Debía haber un equilibrio en las cosas para que todo estuviera bien.

Estaba más preocupado que nunca. Ahora estaba feliz con algo y pronto debía haber algo malo.

Los padres de Carol habían llegado. Lo más raro es que me habían citado en su casa, no tenía ni la menor idea de los que sucedia.

Llegué, me recibieron sus padres y nos dirigimos a su despacho.

—Buenas tardes Señor

—Buenas tardes Enrique, toma asiento.

Asentí y me senté enfrente de él.

—Te preguntaras para que te cité aquí¿No es así?

—Exacto señor.

—Pues verás la razón es muy sencilla, mi hija debe estudiar una carrera universitaria para tomar las riendas del negocio de sus padres.

—¿Y que tengo que ver yo aquí?

—te lo diré lo más claro que se pueda—dijo una voz en la habitación que conocía a la perfección—alejate de ella, tu no eres nadie.

Se ve que no tienen ni la menor idea de lo que está diciendo, deberían de  medir sus palabras—pense mientras en mi interior me reía de él.

—ok, pero hablaré con ella primero lo merece sino caerá otra vez en lo de la vez pasada.

—tienes razón

—Hola Carol—dije en cuanto llegue a su habitación—te traje algo

Era un libro que tenía dentro una nota que decía:

"Léeme con sumo cuidado las palabras que necesitas saber están escondidas, tira esta nota pronto, no dejes que la vea alguien"

Sospechaba algo así, y por si acaso hice esto.

Entendío y asintio con la cabeza.
Otra nota decia: " pronto nos veremos".

Alguien le metió ideas erróneas en la cabeza de sus tíos y esa persona era su hermano Mateo. Temblaria de miedo si se entera quién soy en realidad. Todo a su tiempo.

Me despedí de ella y salí de esa casa. Esto me dolía, pero algo me confortaba. Y eso era lo mejor. Carol al ser de una familia de buena posición iría a una buena universidad, y yo iré a la misma. Se lo que piensan y no fue así. Fue una extraña coincidencia (aunque yo no creo en eso).

Pasaron dos semanas y tenía que mudarme a otra ciudad para iniciar mi carrera universitaria. Decidí estudiar administración de empresas ya que le ayudare a mi hermana Dayana a tomar las riendas de los negocios familiares.

Entre a una universidad prestigiosa la misma en dónde estará Carol. Sabía que pronto la veria pero no imagine que demasiado pronto.