⚜️22-¿Cuál Mikaelson?

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Desde hace casi 100 años me condene a la soledad, abandoné a mi familia en 1918 y los hice olvidarme; era la única forma de protegerlos, pero al hacerlo los deje a la merced de Nick y eso los mato... Ahora solo puedo vengarlos, encontré a otra doppelganger para hacerlo. Pero Nick volvió y todo parece estar a la deriva, espero que esto funcione.


-¿Como sabes que no usa verbena? -murmuro Elena confundida.

-Por que yo hice que dejara de hacerlo -respondí con una media sonrisa falsa- Justo antes de que asesinaran a Elijah.

-Dos veces -completo el castaño- Si nos disculpas bajamos en un momento -despidió ofreciendo su mano y yo la tome sin preguntar.

Subimos hacia el vestidor y luego de que la señora Lockwood le dejara ropa y se retirara yo suspire mientras me recostaba en el sofá.

-Habla -pedí mientras lo veía quitarse la corbata sucia con algo de impaciencia.

-Así que le devolviste sus recuerdos a Niklaus... -murmuro por lo bajo pero le oí perfectamente.

-Él intento matarme con su brujo y yo lo incapacite con los recuerdos -explique con tranquilidad- Además, nunca debí quitárselos... a ninguno -aclare viéndolo a los ojos a través del reflejo del espejo y él me mantuvo la mirada.

-¿Y de que hablaron? -indago quitándose la camisa y el saco.

-Le di una advertencia, si toca a Bonnie lo mato -respondí con honestidad- Quiero completar el ritual, se que solo podremos hacerlo juntos pero si toca a Bonnie se me puede olvidar -agregue sarcástica y él volteo a verme alzando una ceja.

-Veo que no te tiene muy alegre su presencia.

-Solo quisiera terminar todo esto de una vez, matar a quien se debe, revivir a quien lo necesite y luego encontrar la forma de traer a nuestros hermanos de vuelta -suspire quitándome ese peso de encima y en un parpadeo lo vi frente a mi ofreciéndome su mano.

La tome y me impulso hacia él para levantarme del sofá.

-¿Te ha echo algún daño? -pregunto acariciando mi mejilla y cerré los ojos por el contacto.

-Soy prácticamente inmortal, Klaus no puede dañarme -respondí como si fuera obvio.

-Ambos sabemos que Niklaus puede herir de muchas maneras -aclaro haciéndome volver a estar seria- Ten cuidado Threa.

-Necesitan dejar de decirme eso -murmure por lo bajo recordando a Nick- No soy una adolescente Elijah -me queje moviéndome lejos de su agarre- Yo se como tratar con Nick.

-Y él sabe como tratar contigo -replico de inmediato haciéndome fruncir el ceño- Incluso vuelves a llamarlo Nick -dice con algo de gracias mientras se mueve por la habitación.

-Es solo un nombre, no significa nada...

-hasta los pequeños detalles significan algo para ustedes-replico haciéndome suspirar con impaciencia.

-¿Puedes parar tus celos hacia Niklaus por un momento? -pregunte cansada- Mato a nuestros hermanos, ya no siento nada por él, así que, ¿Podemos volver a nuestro plan original? -pedí mirándolo suplicante mientras se acercaba a mi.

Sentía deseos de sacarle en cara que Nick no mato realmente a nuestros hermanos, pero si lo hago creerá que tiene salvación y se uniría a nosotros.

Y aunque eso me haga la vida mas fácil, quiero saber hasta donde puede llegar a Elijah, si seria capaz de traicionarme...

-Oh, dios lo siento -se disculpo Elena llegando de repente al ver a Elijah sin camisa y tan cerca de mi.

-Esta bien, te oímos venir -respondí manteniéndole la mirada a Elijah y este asintió a mi petición antes de volver al vestidor.

Diarios de Vampiros: La Trihibrida OriginalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora