Bali Bey

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Suleiman miro con atención a los visires que se encontraban a su lado prestando atención a cada una de sus palabras, hasta que se dio por terminada la reunión fue cuando hablo.

Suleiman; Bali Bey - llamo dejando a los demás hombres curiosos- me has servido fielmente sin importar los problemas, ganándote mi confianza ciegamente - hablo mientras el bey solo escuchaba al igual que los visires.

Suleiman; Bali Bey - llamo dejando a los demás hombres curiosos- me has servido fielmente sin importar los problemas, ganándote mi confianza ciegamente - hablo mientras el bey solo escuchaba al igual que los visires

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Bali Bey; solo hago mi trabajo sultán - respondió con simpleza aun con la mirada baja.

Suleiman; es por esos motivos que he decidido lo que cambiara tu futuro - con esas palabras dejo un ambiente tenso en la habitación.

Los visires sonreían con disimulo pensando que seria un castigo y que por fin se quitarían de enésima al bey de una vez por todas.

Suleiman; la Sultana Ahlam me a pedido contraer matrimonio - eso sorprendió a todos en la sala - y me confió a mi la tarea de escoger al indicado - miro al bey quien alzo la mirada con sorpresa - y he decidido de que tu seas el esposo de la sultana - sentencio sin tomar en cuenta la sorpresa que genero - eso es todo en la hora de la cena Bali Bey te presentare a la sultana - sin mas salio de la habitación.

Bali Bey aun sorprendido salio de la habitación con la atenta mirada molesta de los visires en su espalda, camino hasta el jardín preguntando una y otra ves el porque a el y no a otro, era consciente que era una muestra de gratitud del sultán hacia su persona pero casarse con una sultana que no había visto era algo loco para su mente.

Sumbul; Bali Bey! - llamo su atención con la respiración agitada.

 Bali Bey; que pasa Sumbul? - pregunto dejando de lado sus pensamientos.

Sumbul; la Sultana Hurrem desea verlo enseguida - empezó a caminar sin dar oportunidad de que Bali Bey hablara este ultimo solo lo siguió.

Al llegar afuera de los aposentos de la sultana Hurrem, Sumbul toco para después pasar seguido del bey. La sultana caminaba de un lado al otro sin mirar a los recién llegados los príncipes miraban con nervios a su progenitora mientras la sultana Mirihmah miraba al bey.

Sumbul; sultanas - la llamo reverenciando ante su presencia- príncipes - saludo del mismo modo- he traído de Bali Bey como lo pidió - ante la mención del hombre la sultana miro al bey.

Bali Bay; sultana - saludo con respeto - Sumbul me informo que me necesitaba - Hurrem solo asintio.

Hurrem; se que estuviste en la reunión con el sultán y los visires - el bey asintio- bien entonces sabrás a quien decidieron como esposo para la Sultana Ahlam - el bey se tenso ante las palabras de la sultana.

Bali Bey no era tonto no es por nada que el sultán confiaba plenamente en el y en sus estrategias, la gran importancia que era la Sultana Ahlam para el sultán y la Sultana Hurrem era la misma que la de un hijo de sangre eso junto a los rumores del palacio de la pequeña sultana que murió en su nacimiento y el nacimiento de Ahlam no era coincidencia para el bey.

Y esta situación lo confirmaba...

Bali Bey; el sultán hablo de ello pero que tiene que ver sultana ? - pregunto algo le decía que no dijera la verdad.

Hurrem; dime el nombre - exigió al bey quien no confió - la Sultana Ahlam no debe casarse - respondió al ver que no diría nada sin una explicación.

Mirihmah; para deshacernos de el - respondió dejando sorprendido al bey y una enojada sultana.

Bali Bey miro el suelo preguntándose si esa era la razón de que el sultán lo escogiera a el como candidato, por la seguridad de la sultana pero pronto desecho esa idea había escuchado lo valiente y fuerte que era la sultana incluso que logro salvar al príncipe Mehmet de un atentado contra su vida.

Bali Bey miro el suelo preguntándose si esa era la razón de que el sultán lo escogiera a el como candidato, por la seguridad de la sultana pero pronto desecho esa idea había escuchado lo valiente y fuerte que era la sultana incluso que logro salva...

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Bali Bey; me temo que no se podrán descaer de el tan fácilmente mi sultana - Hurrem lo miro confundida y enojada al igual que sus hijos - porque yo soy a quien escogió el sultán - esto sorprendió a todos en el lugar.

La Sultana MagníficaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora