She is my Queen.

7.-Baile de la alianza.

—¿Quien es esa mujer con la que hablas con tanta confianza? –trague saliva ante la mirada de Lena.

—¿De quién hablas? –me hice la desentendida.

Ella alzó una ceja. Mierda.

—¿Crees que soy una estúpida? ¿Quien carajos es ella? –aun estábamos en el salón del trono.

Luego de terminar nuestra sesión de besos, ella comenzó a hacerme preguntas de las tripulaciones.

—Ella es... La sucesora de la tía Lara, cuando ella decida cederle el mando a alguien más.

—¿Me estás queriendo decir que ella será parte del consejo? –asenti. —¿Por qué?

—Porque Kal-El tiene pensado seguir los pasos de mi tío Jor-El, si a mí no me sucede nada y no tiene que tomar el trono por un tiempo hasta que Zia sea mayor de edad y este apta para gobernar. –explique con rapidez.

—¿Pero que mierda dices? ¿Como que "si no me sucede algo"? –ella se veía enojada.

—Es una manera de decir. No creo que me suceda algo en un muy largo tiempo. Estamos en paz, o al menos eso creo. –susurre acariciando su cabello, me gustaba jugar con el. Era muy suave y olía bien, además de que sus hondas eran hermosas y muy oscuras. —Y de ser así... Ya que nos casaremos, tú tomarias el mando. –la mire a los ojos. —Serias la nueva reina y emperatriz de Krypton y muchas tierras. Te verías muy hermosa con mi corona. –sonrei.

Pero a ella no le hizo nada de gracia, ya que me dió un golpe en el pecho.

—Auch, Lee...

—¡Deja de decir eso! ¡No te sucederá nada! –me ordena.

—Okey, está bien. No lo volveré a hacer. Pero deja de golpearme, te vas a lastimar. –la tome de las muñecas y ella me miró a los ojos, buscando la mentira. —Lo digo enserio, no me sucederá nada. No dejaré que nada me separe de ti, no ahora.

—Ni nunca. –completa y me da un beso. —No vas a librarte tan fácil de mi. Kara Zor-El.

Me rei, amaba cuando me llamaba por mi nombre completo.

—Bien, volviendo al tema. La chica es Samantha, mi prima. Hija de la tía Astra.

—¡¿Ella es Samantha?! –asenti. —¿Por qué tiene nombre humano? O sea, todos tienen nombres raros.

Hice una mueca.

—Digamos que mi padre, el de Samantha y el de Harley tenían algo con los nombres humanos. Es por eso que mi nombre es Kara. –me encogi de hombros. —¿Cuando tengamos hijos que nombre le pondremos? ¿Kryptonianos o humanos?

Ella se ahogó con su saliva y comenzo a toser mientras su rostro se ponía rojo. La mire con preocupación, según había leído, los humanos hacían eso cuando se sentían nerviosos, eran muy torpes.

Incluso podían morir por una tos.

—¿Estás bien, Lee?

—S-si... Así que... ¿Hijos? –asenti, ella me miraba con los ojos bien abiertos. —¿No crees que es muy pronto? No nos hemos ni casado.

—Tenemos como mucho dos semanas para hacerlo. –me encogi de hombros. —Y dos meses para tener hijos.

—¡¿Que?! ¡¿Por qué tan rápido?!

—El pueblo de Krypton necesita su heredero.

—Ya tienen a Zia, que se aguanten. –de queja.

—Si, tienen a Zia. Pero ella no es una heredera de la casa de El. Kal-El aún no piensa casarse, y de ser así, no podría tener un hijo antes que nosotras.