Parte 7

326 40 9
                                    

Xingqiu POV.

El agua es indispensable para la vida. Sin agua no hay vida. Todo lo que conforma esta vida está hecho por agua. Xingqiu siempre pensó eso...

Pero ahora el agua lo estaba matando.

Trataba desesperadamente de romper esa burbuja pero parecía estar hecha de plástico, y por más que luchara, parecía estar consumiendo oxígeno a lo tonto. La falta de aire poco a poco le iba arrebatando la consciencia, sabía que si se desmayaba ahí iba a morir.

Pero tampoco era algo que se podía evitar... no...

Cerró los ojos, esperando el gran momento a que Morax extendiera sus brazos para llevarse su alma. Pero al contrario de lo que esperaba ver, una gran luz lo transportó a un hermoso estanque; era el estanque más azul y hermoso que Xingqiu había visto en su vida, solo que en esta no había peces... ni plantas... ni rocas... no había nada más que agua azul, brillante y cristalina. El cielo no era más que una pantalla dorada con una gran nube muy blanca y brillante.

De esa nube bajaron unas manos femeninas y frágiles con listones blancos y azules para darle una... ¿visión?

Se veía gris y sin vida, solo se podía ver como una gran nube tapando la magia de las visiones. Xingqiu estaba decepcionado.

Cuando Xingqiu extendió su brazo para tomar la visión, ésta empezó a brillar con miles de luces azules que iban directo hacia él, envolviéndolo en un calido... pero húmedo abrazo. De pronto, Xingqiu pudo soltar todo el aire que no sabía que estaba aguantando y toda esa fantasía se rompió como una burbuja.

—————❄️💧—————

Xingqiu se levantó abruptamente del piso. Estaba empapado, el mago del abismo ya no estaba y Chongyun se lanzó a abrazarlo mientras lloraba.

-¡Estaba tan asustado! ¡no querías despertar! ¡Llevabas media hora inconsciente! - Chongyun apretó su abrazo mientras le acariciaba el cabello. - Estaba muy preocupado, lamento no haberte protegido bien, todo es mi culpa.

Xingqiu le devolvió el abrazo. Realmente sentir el calor del cuerpo de Chongyun lo hizo olvidarse de todo lo que había pasado y solo lo hizo ver como un mal sueño. Cuando el mar de lagrimas se despegó, lo inspeccionó. - ¿Estas herido? ¿Te sientes mal? ¿Te duele la cabeza?

-Chongyun, estoy... bien. Solo... - Xingqiu se acomodó para estar mejor sentado y sintió el peso extra de algo que colgaba en su cintura. Al voltear lentamente la cabeza a ese objeto, se dio cuenta que ahí estaba su visión.

Tengo una visión... realmente los arcontes voltearon a verme...

Chongyun, al darse cuenta, se inclinó sobre Xingqiu y examinó el nuevo accesorio divino con la marca elemental Hydro.

-Yo... sinceramente no se como sentirme. - Admitió Xingqiu.

-Hablaremos de esto llegando a casa. Hay que encontrar a la niña y salir de aquí. - Chongyun lo levantó del piso con una fuerza que Xingqiu desconocía y, tomados de la mano, siguieron corriendo por el denso bosque, la visión de Xingqiu hacía peso con cada paso que daba, recordándole su presencia. Justo al detenerse en un lago vecino de la aldea Chingsté, vieron a una niña que lloraba en los brazos de una joven con coletas.

Xingqiu la reconoció de inmediato, era la chica del correo.

La joven, al verlos, cargó a la niña y se dirigió a ellos.

-Supongo que esto es lo que buscan. Se llama Mei, dice que subió aquí por una tonta apuesta de parte de sus "amigos".

-¡Me portaré bien ahora! ¡Por favor! ¡Quiero ver a mi madre!

-Tranquila, te llevaremos con tu madre. - Chongyun la cargó con dulzura. Luego sacó una paleta de una de sus bolsas. - Mira, ten, es una paleta por ser tan valiente. No tiene un sabor dulce, pero puede calmarte.

A Xingqiu le enterneció mucho esa escena. Después de ese encuentro, los tres jóvenes bajaron la colina para entrar a la ciudad de nuevo. Xingqiu descubrió que el nombre de la chica era Hu Tao y estaba allí porque le interesaba mucho el tema de los espíritus y la muerte.

Ambos chicos estaban horrorizados pero fascinados a la vez; usualmente la gente evitaba hablar de la muerte ya que se consideraba de mala suerte, pero Hu Tao parecía burlarse de la mala suerte y de la muerte. Lo hizo ver como que alguien en el mundo de los mortales debía encargarse de esos asuntos para que no sea un problema para los vivos.

Cuando entraron en la ciudad, pudieron ver el gran gentío de personas que trataban de calmar el llanto de la madre de Mei. Cuando ésta vio a su madre, saltó de los brazos de Chongyun y corrió a abrazarla.

-¡Chicos! ¡Volvieron! - Xiangling había salido del restaurante para ir corriendo a abrazarlos. Chongyun y Xingqiu le regresaron el abrazo, algo cansados.

-Muchas gracias por salvar a mi hija. - La madre de Mei reverenció a Chongyun. - No sé como podré pagarte.

-¡Yo sé! - Xiangling exclamó de pronto. - Puedo servirles una comida a ambos por su acto heroico.

¿"Ambos"? Pensó Xingqiu. Pero si somos tre-

Antes de que sus pensamientos terminaran la frase, se había dado vuelta y había descubierto que Hu Tao había desaparecido. Esa chica daba miedo.

-Yo les cocinaré algo rico. - Xiangling los tomó de la mano a ambos y los llevó a una mesa exclusiva del restaurante. Que estaba sospechosamente muy bien arreglada y bonita.

-No tienes que molestarte Xiangling, en serio. - dijo Chongyun.

-¿Molestia para mi cocinar? Jamás. - Xiangling los colocó en la mesa y les prendió una vela. Antes de que Xingqiu pudiera preguntar, Xiangling le leyó la mente: - escogí esta mesa porque las demás están ocupada jejeje. Ah, por cierto, aquí se sientan las parejas que siempre terminan casándose. ¡En un momento regreso! - Y desapareció por la puerta de la cocina.

Maldita Xiangling...

Cerca de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora