Has hechizado a mi corazón

♡ Capítulo Nueve ♡

Antes de iniciar quiero pedirles que busquen la canción "One last time" de LP pues estará dentro de la historia y es que la he añadido en contenido de multimedia pero ahora que he revisado ya la vista al momento de publicarse no aparece y bueno eso es todo.

—¿Qué debería de cocinar?— dijo Jimin hablando con Paenji.

La gatita sólo le dio un corto y perezoso maullido en respuesta.

—Tienes razón, un pollo al limón estará perfecto— se puso sus zapatos, tomó las monedas que dejó Yoongi y salió a hacer las compras.

Las calles estaban llenas, por supuesto era de esperarse, comprar los mejores ingredientes iba a ser difícil pero lo lograría.

—Tu eres el muchachito que vive con en Guardián Min ¿cierto?— dijo la señora que atendía el puesto.

—Así es señora— respondió Jimin.

—Sabía que su novio debía ser guapo, pero ¿no crees que es muy gruñón? Te ves amable y alegre a comparación de él.

—Se equivoca señora, además el es muy amable— dijo Jimin tomando los condimentos que necesitaba tratando de no tomar en serio lo que la señora había dicho.

A Jimin le incómodo mucho la situación, también el llegó a pensar que Yoongi era gruñón pero al conocerlo mejor supo que sólo era un poco tímido con las personas que no conocía y su imagen fría ayudaba a mal entenderlo. Además no era su novio, aún. No es cómo si sus sentimientos florecientes fueran correspondidos pero tenía la esperanza de que así fuera.

—Supongo que contigo debe serlo, en lo personal siempre he creído que es algo frío y ¿como decirlo?

—Egocéntrico y grosero—completo un hombre que estaba a lado escuchando.

—Sin dudas puede parecer muchas cosas pero es una excelente persona con errores claro pero no creo que deban hablar así a sus espaldas— dijo Jimin ya molesto.

—No es que estemos diciendo algo malo— se excuso el hombre.

—Es normal que lo vea así, el amor es ciego— rió sarcastimente la mujer.

—No es así — exclamó Jimin dejando las especias, no compraría nada ahí y de una vuelta se marchó.

No pensaba tolerar más las habladurías de esos dos. Sabía que Yoongi no era perfecto y en efecto podía llegar a ser un poco molesto pero aún con sus defectos era alguien brillante, además siempre se preocupaba por la seguridad de la gente. Lo había visto despertarse por la noche o muy temprano de madrugada para investigar o unir cabos por la aparición de esta amenaza desconocida, todo para que los demás lo vieran de tal forma.

—Que tontería ¿Cómo puede hablar así de alguien tan lindo como el?—murmuró Jimin mientras buscaba un buen lugar donde comprar los ingredientes que le faltaban y un poco de cerveza.

Para ser una festividad había escogido un platillo sencillo y es que aún siendo hábil en la cocina, no sabía muchas recetas así que su mejor opción había sido el pollo al limón y un poco de cerveza era ideal para acompañar. Ya en días anteriores había acompañado a Yoongi a comprar algunas cosas pero no sabía en dónde podía conseguir cerveza.

Después de dar varias vueltas comenzó a lamentarse, no haber esperado a Yoongi como este se lo pidió no había sido una gran idea.

(Creo que debería de preguntar, espero que no me pierda de nuevo) pensó Jimin.

—Niño— dijo un anciano que lo detuvo a mitad del camino.

—Dígame, señor.

—¿Tu eres el joven que vive con Min Yoongi?