Capitulo 7

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Al día siguiente me desperté muy alegre, bajé corriendo las escaleras y me encontré a mi tía desayunando, le di un beso en la mejilla y ella me miro extraña, ya que sabia que odiaba levantarme temprano.

—Tía, ¿No crees que es un bonito día?, el sol brillando, las nubes tienen formas de animalitos jugando y los árboles parecen bailar de un lado para otro— dije sonriendo como un bobo, mi tía soltó una carcajada.

—Hay hijo, cuando estas enamorado, estas mas cursi que una chica— dijo sacando lágrimas de risa, yo me enderecé en mi asiento, haciéndome el macho, pero ya para que, si ya la había cagado.

—Basta tía— dije metiendo mi cabeza en el cereal, avergonzado.

—Como quieras hijo, pero, mejor apúrate que ya se hace tarde— dijo dándome un beso en la frente y saliendo rumbo al trabajo.

En cuanto la oí salir, tomé mi chaqueta y cerré con llave la puerta, después me dirigí a la calle de Dayan, para verla, en cuanto la vi salir de su casa la comencé a seguí y cuando menos me lo esperaba ella volteó, su cara se arrugó ya que el sol le pegaba en la cara, se cruzó de brazos.

—¿Me estás siguiendo?— me preguntó poniendo un pie adelante y el otro atrás, su mirada me hacia sentir en un interrogatorio.

—No, solo pasaba por aquí, casual, cuando vi un payaso rojo y decidí ver si me hacia un truco— le dije bromeando, ella frunció el ceño enojada.

—Eres un odioso— me dijo con la cara llena de rabia para luego curvarse a  una sonrisa maligna—, pero por lo menos se que tengo un admirador— soltó una risita.

—Hey, yo nunca dije eso— dije frunciendo el ceño.

—Como quieras- dijo empezando a caminar pero luego dio media vuelta y me miró—, ¿Vienes o quieres que te cargué?— dijo ajustando la correa de su mochila.

—Quiero que me cargues, gracias— dije alzando mis dos brazos hacia mi cabeza.

—Idiota— solté una carcajada y la seguí al collage.

—Gracias por lo de Tobi fue... dulce— le dije tratando de mirarla a los ojos.

—Fue lo menos que pude hacer por un amigo— dijo volviendo su vista al camino, yo salté de alegría cuando me dijo que ya me consideraba "amigo", eso me daba una ventaja más.

Platicamos de cosas absurdas hasta que llegamos a la escuela y nos tuvimos que separar ya que ella iba a buscar algo a su casillero entonces me dispuse a buscar a Erick ya que le tenía que preguntar si le había dicho a Dayan sobre mi madre.

Erick estaba recargado en la pared besándose con una chica morena con un escote muy pequeño y una falda muy minúscula, él le estaba apretando su trasero contra su cuerpo, carraspeé y ellos se despegaron, le hice un gesto a la chica para que se fuera, ella reviró los ojos y le dio un beso fugaz a Erick, él le dio una nalgada y le dijo que la llamaría (pero no lo iba a hacer), le dije que camináramos a la cafetería y cuando íbamos entrando...

—¿Tú le dijiste a Dayan sobre mi madre?— le pregunté de repente, él me volteó a ver con los ojos abiertos.

—Amigo— dijo mirándome a los ojos, eso me indicaba que no le había dicho—, claro que le dije, si es mi conquista— me dijo mirándome con una sonrisa, entonces supe que estaba equivocado.

—Idiota— fue lo único que dije ya que Dayan y su amiga sexy se nos cruzaron en el camino, pero su amiga parecía que la estaba arrastrando por que su cara reflejada incomodidad.

—Hola Jason, ella es mi amiga Melanie— me dijo señalando a su sexy amiga, le puse la mano para estrecharla pero ella la tomó y se acercó para darme un beso en la mejilla, luego se despegó mordiéndose el labio sensualmente.

—Mucho gusto— le dije incómodo—, Dayan, él es Erick mi amigo— le dije señalando al correspondido, Erick la miro mordiéndose el labio como Melanie y ella lo miró con asco, yo solo no solté la carcajada porque si lo hacia estaba muerto.

—¡Hey!, tengo un idea, ¿Por qué no comemos juntos?— dijo Melanie saltando, Erick asintió muy entusiasmado, pero Dayan y yo no asentimos por que estábamos realmente incómodos, pero nos jalaron a la mesa valiéndoles gorro lo que nosotros dijimos.

Llegamos a la mesa que se encontraba en la esquina mientras todos nos miraban raro, Melanie se sentó al lado mío y Erick al lado de Dayan quien pasó un brazo por sus hombros y algo en mi interior hirvió, no se porque, pero sabia que ella iba a apartarlo y así lo hizo.

—Y... Jason ¿Tienes novia?— dijo Melanie moviendo sus pestañas.

—No, no tengo— dije mirando fijamente a Dayan quien se ruborizó.

—Hay que bien pues... si gustas tal vez podríamos tener una cita, no se salir a algún lugar...— dijo coquetamente, no era por nada pero Melanie no era mi tipo, bueno tal vez para un rato pero ya había superado esa faceta de mi.

—Si claro, cuando quieras— le respondí poniendo mi mejor cara, ella soltó un chillido.

—Genial, ¿Qué te parece si en dos semanas?— dijo aplaudiendo.

—Si, yo pasaría por ti en mi carro a las ocho y nos vamos a un restaurante ¿Qué dices?— por lo que vi, ella estaba muy entusiasmada ya que distinguí un brillo en sus ojos pero por un momento deje de verla ya que vi a Dayan saliendo al patio trasero de la escuela hecha una furia.

No dude ni un segundo y me levante de la mesa para seguirla, cuando llegue para alcanzarla, ella se había sentado en una banca que daba vista hacia los árboles y a las aves que revoloteaban en ellos, la alberca estaba vacía por lo que era relajarte, me acerqué lentamente y me senté al lado de ella.

—Este lugar me tranquiliza cuando los de natación no vienen a ensayar— me dijo reposando todo su peso en sus brazos y rompiendo el silencio.

—Me estoy dando una idea de lo que te gusta— le dije viendo el paisaje, ella se volteó con una sonrisa en su rostro pero dándome una idea de que prosiguiera—, ¿Por qué te fuiste de la mesa?, estábamos hablando... bien.

—Porque quisiste seducir a mi amiga con tus encantos— me dijo moviendo sus manos alrededor de su cabeza, alcé una ceja.

—¿Encantos?— le pregunté y se puso colorada.

—Ah... si... en-cantos... eso dije ¿No?— me preguntó tartamudeando, se estaba poniendo como un tomate, a pude más y solté una carcajada, ella frunció el ceño—, ¿De qué te ríes?

—De ti.

—¿De mi?— me preguntó preocupada y confundida.

—Si, de que estas celosa— le dije como si fuera obvio, ella frunció el ceño.

—¿Celosa yo?, pffff, de que iba a estar celosa ¿De Mel?- dijo agitando los brazos como loca.

—Ok, hacemos esto "celosina"— le dije y ella rodó los ojos—, para que cuides a tu amiguita, porque no vas a la cita, puedo invitar a Erick por que veo que tú le encantas demasiado— rodeé los ojos.

—Y yo soy la celosa— dijo en voz baja pero la había escuchado—, ok, acepto, tal vez así salga más— dijo estrechando mi mano.

Le conté a Erick sobre el plan y se puso como loco ya que tenía una oportunidad de llevársela a la cama y también le conté a Melanie y se puso contenta ya que su amiga jamás salía con alguien, ya que siempre estaba en el trabajo o en la escuela.

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Aquí empieza todo mis queridos lectores, a partir de ahora la historia se vuelve mas interesante.

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