HIJOS DE LA NOCHE

30. REVELACIÓN

Capitulo dedicado a Dafne y a Rikimi18 por ser las más cercanas a la cifra. Disfrutenlo <3

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Era cuestión de una semana para recibir a las castas vecinas para la celebración anual en Bergwald. La manada se preparaba en sus ratos libres con sus debidos entrenamientos; desde la velocidad, hasta la fuerza, trabajo en equipo y participaciones individuales.

Namjoon nunca había presenciado tal evento, por lo que no sabía que esperar. Debido a que su percance aún se encontraba reciente, detectaron que los movimientos rápidos aún ocasionaban molestias hasta quitarle el aire, los sanadores recomendaron no esforzarse demasiado si deseaba participar.

Lastimosamente todas las actividades involucraban fuerza, así que quedaría como un espectador en la festividad. Escuchar eso fue decepcionante para el líder, se preguntó porque le angustiaba tanto defraudar a la manada y lo que pensaran.

La respuesta era sencilla, a pesar de no ser un nacido de su tierra y negarse a llevar a cabo sus costumbres o a tomarles cariño por su estadía temporal, los lugareños le dieron una oportunidad. La manada lo cobijó dándole la bienvenida como si se tratara del hijo prodigo y esa actitud le hizo replantearse su comportamiento, hasta familiarizarse con su trabajo.

Al que por cierto, comenzaba a tomarle cariño.

Tras la decepcionante noticia, Namjoon se sintió cabizbajo por temor a la opinión del pueblo. Cora negó el hecho brindándole apoyo, habría más celebraciones en las que involucrarse e incentivó al joven prometiendo que el siguiente año sería mucho mejor.

¿Lo sería? Al llegar a Bergwald, Namjoon tenía claro que volvería a la ciudad cuando su trabajo estuviera hecho como su padre ordenaba, pero ahora que sus días habían dejado de ser un calvario dándole la razón a Jackson, todos sus planes lucían inciertos.

Las palabras de Cora no fueron lo que le devolvieron la vitalidad, sino encontrarse con Min Seokjin practicando junto a sus hermanos. Yoongi estaba allí mostrándole a Jimin la técnica perfecta para lanzar el cuchillo.

-Seokjin es demasiado ágil -comentó Hoseok-, será mejor que vayas con cuidado.

El líder no supo si tomarlo como una pequeña broma o solo una advertencia, aunque fuera un juego no se atrevería a dudar de lo que el omega era capaz de hacer. Imaginarlo alerta y demostrando sus habilidades le hizo sonreír de oreja a oreja y soñar con eso más tarde.

Con la celebración en puerta, la emoción se esparcía por el bosque, excepto en el grupo de niños de orzaya, liderados por Soobin y Lina, que desde hace un rato se negaba a soltar la mano del omega.

Las expediciones eran las favoritas de los niños, solo que no después de haber practicado tanto al aire libre.

Para los pequeños los ejercicios durante la celebración eran más simples, como juegos para mantenerlos activos y totalmente entretenidos con algunos pocos de las otras manadas invitadas.

Sin tener que mirar, Soobin estaba seguro que los cachorros estaban cansados, su voz apagada los delataba, además de la forma en que algunos arrastraban los pies por las pocas energías.

Estaban volviendo a orzaya luego del arduo entrenamiento. Kai no estaba obligado a acompañarlos de vuelta, pero Mason había terminado tan cansado que se ofreció a llevarlo sobre su espalda. Apostaba que el cachorro estaba quedándose dormido sobre su hombro, ya que la canción se perdía entre su débil voz.

Mason no era el único que deseaba tirarse a descansar, todos estaban exhaustos y hambrientos, pero sería imposible cargarlos a todos. Las únicas que contaban con la energía suficiente para mantener el paso eran Kiara y su amiga Sara, quienes trataban de que sus compañeros se contagiaran de ella.