Love Of My Life/ C.F

VI

Estaban todos en la sala de estar, los niños eran niños jugando videojuegos y ella le estaba enviando mensajes de texto a Nicole, sus piernas estaban en el regazo de Conrad mientras él jugaba.

–Hasta luego, chicos.– anunció Belly y Love se giró para mirarla y su boca se abrió.

–Belly, te ves tan linda!– Dijo mirándola con una sonrisa.

–¡Maldita sea!– Jeremiah dijo dejando el controlador en la mesa de café caminando hacia la chica con los brazos abiertos.

–¿Estás bromeando? Sí, está bien, simplemente abandona el juego por completo, Jere–, dijo Steven sarcásticamente

–Te ves caliente– Jeremiah la felicitó haciéndola girar en su lugar.

–Oye, deja de coquetear con mi hermana–, advirtió Steven y Love se rió entre dientes apoyando la cabeza en el hombro de Conrad.

–¡Callate Steven!

–No, cállate tú– le dijo a su hermana. –Aunque te ves bien.

–¿Vas con nosotros o nos vas a encontrar allí?– preguntó Jeremiah cruzando los brazos.

–No escuchaste Jer, Belly aquí tiene una cita– anunció Love y sintió como Conrad se tensaba, ella lo ignoró.

–Sí, no voy a ir a la fiesta del libro, voy al autocine–, explicó Belly. Y Conrad se volvió para mirar a Belly.

–¿Con quién?– Jeremiah frunció el ceño. El teléfono de Belly sonó y ella fue a revisarlo.

–Amigo, concéntrate, vamos.– le dijo Steven a Conrad y Love no se dio cuenta de que toda la atención de Conrad estaba en Belly en lugar del juego mientras le enviaba un mensaje de texto a Nicole sobre su relación.

–Um... uh, está bien, adiós– Belly se separó y Love le dedicó una sonrisa y un saludo. Conrad siguió mirando a Belly y Love miró a Conrad, confundida sobre por qué seguía mirándola. Miró a Belly, que tampoco se dio cuenta, y de nuevo a Conrad, que todavía tenía los ojos puestos en ella.

Se levantó del sofá y Conrad finalmente se giró para mirarla –¿Adónde vas?

–No sé, a la playa probablemente– se alejó y sintió como los ojos de Conrad la seguían hasta desaparecer de su línea de visión.

Realmente necesitaba pensar.

~♡~

Era tarde en la noche y después de estar horas en la playa, algunas de ellas en compañía de Nicole y sus amigos, finalmente regresó a la casa.

Entró en silencio, con cuidado de no alertar a nadie de su llegada, estaba a punto de ir a la cocina cuando escuchó las voces de Conrad y Belly.

Sabía que era malo, pero no pudo evitar quedarse escondida detrás de la pared y escuchar la conversación.

–¿Cómo estuvo tu cita caliente?– preguntó Conrad.

–¿Disculpa?– Escuchó que Belly le preguntaba.

–Está bien, relájate. Nos estábamos divirtiendo un poco.– Conrad explicó, y Love frunció el ceño. ¿Qué habían hecho? Probablemente algo en la cita de Belly.

–Vosotros sois unos imbéciles–, lo acusó Belly.

–Belly, vamos– suspiró Conrad, hubo unos segundos de silencio.

–Todo lo que quería era ir a un autocine con un chico que creo que es lindo y dulce y ustedes tuvieron que venir y arruinarlo–, explicó Belly con enojo en su voz.