Matrimonio político (Itanaru)

Capítulo 18

Mientras corría la pareja iba emberrinchada, uno por ser despertado violentamente y otro por ser atrapado en una risa abierta -este es el punto, pero no se ve una entrada clara, tal vez es una trampa -el pequeño cerró sus ojos tratando de sentir el chakra, lamió sus labios con duda -no siento su chakra, pero sí su maldad, vamos, sígueme -ambos bajaron su chakra, caminaron con sigilo ocultándose a la vista, cien metros al oeste el Naruto se hincó en el lugar, tocó el suelo -tiene una barrera de chakra, por eso no lo podemos sentir, está bajo la superficie, esa mezcla entre su odio y las serpientes la puedo sentir con claridad -el Uchiha confirmó -debemos buscar la entrada -el rubio sonrió con maldad -o podemos crear una -

Itachi lo observó, el pequeño creó un clon que reunía energía de la naturaleza, cuando obtuvo suficiente desapareció, adquirió sus rendijas de sapo y un sombreado naranja sobre sus párpados. Itachi lo veía con sorpresa, sonrió con diversión -ahora entiendo a Kakashi senpai cuando dice que eres el ninja número uno en sorprender a la gente - el rubio se rio divertido -es un don con el que nací ttebayo, a ver veamos -el pequeño junto chakra de la naturaleza en su pie, brincó con fuerza al caer levantó su pierna -Tsūtenkyaku- Itachi brincó del lugar donde gigantes pedazos de piedra salían volando, la guarida cayó frente a los ojos de ambos, el pequeño sonreía con maldad, sus cadenas salieron a gran velocidad, entre ellas al retraerlas apareció un Kabuto tratando débilmente de safarse.

-Mal… di… to demo… nio -el rubio lo vio mal, apretó sus cadenas, mientras sus huesos comenzaban a tronar y fracturarse con violencia -eso es por lastimar a mi abuela bastardo -los gritos se escuchaban con fuerza hasta que el ninja médico se desmayó. Naruto le colocó un sello de supresión de chakra, lo selló en un pergamino para prisioneros, levantó el rostro mientras se sacudía. Itachi lo observaba con cuidado, al final sonrió divertido -vaya, eso fue rápido -el pequeño lo vio con una sonrisa pícara -tu serpiente quiere escaparse esposito -una serpiente blanca serpenteaba con velocidad fuera de la guarida. Itachi giró su sharingan con velocidad convirtiéndolo en un mangekyou, llamas negras rodearon el lugar con velocidad. Naruto hizo sellos de manos para bloquear su escape creando una barrera de contención color púrpura en forma esférica -gracias -el mayor caminó con tranquilidad hacia el sannin que se elevaba sobre su cola, su cuerpo comenzó a cambiar de forma creando una serpiente gigante de ocho cabezas color blanca -se hizo algo grande, ¿te ayudó?- Itachi negó con tranquilidad, sonrió arrogante -Susanoo- un gigante rojo de chakra se elevó con gracia sobre ellos.
Naruto abría sus ojos con brillitos en ellos, el gigante desplegó una espada con la que cortó las cabezas de un tajo.

El sannin abrió la boca de su última cabeza sacando su cuerpo original por ahí con la espada Kusanagi -me quedaré con tus ojos Itachi-kun, con tu cuerpo, eres mío kukukuku -el rubio frunció el ceño cabreado -oye tú serpiente lesbiana -el sannin vio al pequeño con molestia -Naruto-kun, el demonio de nueve colas, contigo no es mi pelea, Akatsuki se encargará de ti -el Uzumaki cambió sus ojos a las rendijas rojas apretando sus puños con coraje, su cabello se elevó en nueve partes, brincó con coraje golpeando el gran cuerpo de la serpiente derrumbándola- ese Uchiha de ahí es mío bastardo, vuelve a decir que es tuyo y te mueres serpiente asquerosa ttebayo -Itachi lo vio con sorpresa, sonrió divertido por los celos del pequeño, ya le había mostrado algo de esos celos con sus fans y con Izumi.

La forma de la espada de Itachi cambió adquiriendo la forma de una pequeña calabaza de sake, aprovechando que la serpiente se levantaba, el Uchiha perforó su cuerpo -no puedes destruirme Itachi-kun kukuku -el azabache negó con calma -no te destruiré, sellaré tu alma por la eternidad en un genjutsu eterno, Totsuka -el pequeño giró su rostro dejando caer su cabello y su coraje, sus ojos brillaron de emoción viendo a Orochimaru ser arrastrado en gritos de desesperación -oh por kami, oh por kami es uno de los tesoros de los dioses- el pequeño observaba la espada con emoción, vio como la serpiente gritaba y era absorbida -por… fa… vor noooo, Itachi-kun -el sannin desapareció dentro de la calabaza -¿cómo la conseguiste? ttebayo -el mayor levantó los hombros -un día apareció frente a mí y la acepté- el pequeño gritaba emocionado, un grupo de clones salieron de la guarida y entregaron pergaminos con todo lo que encontraron importante dentro de la guarida -larguémonos de aquí, esto arderá -ambos corrieron con velocidad, a la distancia pudieron escuchar la gran explosión que generaron los papeles bomba que el pequeño pegó por todo el lugar.

Decidieron no parar hasta Konoha, aún era temprano, llegarían casi en la noche, ambos continuaron platicando en el camino sobre la grandiosa espada del Uchiha y el escudo que también guardaba. Naruto no se cansaba de decir que el mayor era impresionante. Media hora antes de llegar, el rubio mientras corría comenzó a cerrar los ojos y rascarlos con su puños en tono cansado, con algo de vergüenza vio al mayor, respiró hondo, asintió decidido, se colocó a su lado, lo que le pareció extraño al Uchiha quien lo veía con duda. Los ojos del pequeño se hicieron grandes, temblaban reteniendo lágrimas, su boca formó un puchero. Itachi no entendía qué sucedía -¿me… cargas? ttebayo -el Uchiha lo vio con su rostro estoico, sonrió un poco al ver su versión de gatito, le ofreció su espalda.

Naruto subió de inmediato, se acomodó como con el sannin y Shikamaru, absorbió el aroma del mayor con cuidado sintiendo su calor y su chakra cálido. A los minutos se quedó completamente dormido el pequeño. Itachi lo había visto dormitar mientras corrían, estaba al pendiente para que no cayera, ahora sabía para qué quería que lo cargara. Horas después entraron con el mayor registrando a ambos en la puerta principal, a gran velocidad entró a la oficina de la Hokage quien sonrió al ver al pequeño en su espalda. Itachi giró su rostro, vio al equipo siete que regresaba de misión con un tal Yamato -misión cumplida Hokage-sama -Itachi entregó ambos pergaminos -perfecto, maldita serpiente, por fin se murió -el Uchiha confirmó -uno de los pergaminos tiene el cuerpo sellado de Kabuto para interrogación, Naruto lo dejó bastante mal, pero aún vive, el otro tiene todo lo que encontramos en la base, Orochimaru fue sellado para siempre, sellé su alma en mi espada, no hay cuerpo -todos abrieron los ojos con sorpresa. Sasuke veía a su hermano justo como Naruto lo había hecho, Itachi sonrió un poco.

-Esposito, hace frío- el pequeño se hacía bolita en su espalda, todos los presentes sonrieron con diversión ante el sonrojó de Itachi "por lo menos no dijo que lo desnudé", pensó el Uchiha -Tsunade-sama, mañana entregamos nuestro reporte -la rubia confirmó -maa maa Jiraiya-sensei lo dejó muy mimado -Kakashi y su equipo reían divertidos, el heredero del sharingan realizó una leve reverencia con algo de sonrojo, salió del lugar con prisa.