-Capítulo 9- El susto

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Antes de empezar el capítulo, pido perdón por la tardanza, llevo días indispuesta emocionalmente, os dejo este capítulo porque lo acabo de pasar por aquí desde Word pero me faltan muchos capítulos para pasarlos y terminar la historia.

Cuando me sienta un poco mejor (espero que pronto) lo terminaré y los publicaré.

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Mi tía y yo estábamos en una tienda de vestidos de novia cuando apareció la hija de la diseñadora. La conocía desde la universidad, éramos amigas pero no tanto como Alina y yo. Mi tía estaba confusa.

-¿Os conocéis?- preguntó mi tía confusa

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-¿Os conocéis?- preguntó mi tía confusa.

-Claro, estudiamos juntas la misma carrera en la universidad.- contesté. Miré a Jade. -Veo que sigues el legado de tu madre.- dije.

-Sí pero tenías que hacerme abrir los ojos para que me diera cuenta de que nos necesitábamos una a la otra.- dijo con lágrimas en los ojos.

-Oye, no te culpes, ahora estás con ella y sigues sus pasos como siempre has querido.- dije consolándola.

-¿Pero a qué precio? Estando ella al borde de la muerte.- dijo llorando.

-¿De qué hablas?- pregunté confusa.

-Mi madre tiene ELA, la enfermedad está muy avanzada, le quedan menos de seis meses de vida.- dijo Jade llorando.

-¡Dios mío!- dijimos mi tía y yo a la vez. Jade carraspeó.

-Bien, te voy a enseñar algunos bocetos de mis diseños y me dices cuál te gusta más.- dijo Jade cambiando de tema.

-De acuerdo.- dije.

Miré varios bocetos con los diseños de los vestidos, todos eran preciosos y me costaba decidirme. Estuve casi una hora mirando los bocetos con el ceño fruncido.

-Veo que no sabes cuál elegir.- dijo Jade.

-Son todos preciosos.- dije.

-Hacemos una cosa, llévate todos los bocetos y te lo piensas tranquilamente y ya me dirás con cuál eliges.- dijo Jade.

-Sí, será lo mejor.- dije.

Cogí los bocetos y me lo llevé. Nos despedimos de Jade y fuimos a comer al restaurante favorito de los Lombardi.

-¿Se sabe algo del juicio de tus abuelos?- preguntó mi tía.

-No habrá juicio, el juez los sentenció a quince años de prisión por conspiración, dos años por robo, además de devolvernos el dinero de la herencia junto con una compensación de cincuenta mil euros y por último tres años por venta ilegal de un bebé.- dije.

-¿Van a pasar veinte años en la cárcel?- preguntó sorprendida.

-¿Te parece poco, después de lo que hicieron?- pregunté.

Luchando por amor (CORRIGIENDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora