𝐍𝐀𝐍𝐀𝐌𝐈 𝐊𝐄𝐍𝐓𝐎 𝐘𝐀𝐍𝐃𝐄𝐑𝐄//𝐇𝐞𝐚𝐝𝐜𝐚𝐧𝐨𝐬 𝐲 𝐨𝐧𝐞-𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬

7

Casi todas las noches, Kento se colaba en tu apartamento para verte dormir.

Su mano acarició suavemente tu mejilla. Tarareabas y apoyabas la cara contra él. Tu mejilla era tan cálida, tan perfecta.

Tu cuerpo era tan tentador. Estabas acostada allí, indefensa. Su mano se movió lentamente por tu cuello, sus palmas callosas rozaron tu piel suave.

No llevabas nada más que una camiseta sin mangas y bonitas bragas rosadas. Muy tentador.

Kento deslizó la camiseta por encima de tu cabeza para exponer tu pecho desnudo. Tus pezones se endurecieron contra el aire frío.

Kento se sentó a horcadas sobre tus caderas y tomó tus grandes pechos tan hermosos.

No perdió el tiempo en enganchar sus labios a tu pezón. Lo chupó suavemente mientras movia suya dura polla entre tus muslos.

Tus muslos se sentía tan bien sofocando su polla. Dejaste escapar un pequeño gemido mientras mordisqueaba tu pecho.

Él sonrió contra tu piel. Sabía que lo deseabas, podía sentir la humedad de tus bragas contra su glande.

Se te aceleró la respiración y empezaste a retroceder contra la longitud de Kento. Dejó escapar un gemido bajo y metió la mano dentro de sus bragas.

Sus dedos rozaron contra tu clítoris hinchado.Estaba tan necesitado de ella, incluso si aún no lo sabías.

Kento deslizó su dedo índice dentro de tu coño mientras frotaba círculos cerrados con su pulgar en tu clítoris.

Gemiste cuando insertó otro dedo. Eras tan bonita así. Tan sumisa que podría hacerte cualquier cosa si quisiera.

Pero no.

Quería que tu primer orgasmo fuera especial. Él te quería despierta. Incluso si eso significaba esperar.

Kento quitó los dedos de tu coño y rápidamente deslizó la camiseta.

 —Pronto mi amor tú y yo estaremos juntos, me aseguraré de ello—Susurró.

 —Ya eliminé a ese ex tuyo, pronto no habrá nada en nuestro camino.

Kento apartó un mechón de cabello de tu cara y sonrió amablemente.

 —Hasta la próxima.