Capítulo 13

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"Knowing me, knowing you"

¿Existirá sonido más irritante que la alarma predeterminada del despertador del movil? Por supuesto que no, Conway en ese preciso momento estaba siendo testigo del dolor de cabeza que podía causar ese estridente y monótono sonido "beep, beep, beep"

De haber sido otro día se hubiera molestado y en un intento de apagar la alarma lanzaría el aparato a ver si eso funcionaba. Pero no, este día curiosamente el sonido en bucle no lo desesperó, y lo frenó al primer intento, levantándose sin una mínima aparición de su característico mal humor matutino.

Era obvio que este cambio de la noche a la mañana tenía unos motivos muy claros, el primero, después de años, si no es que décadas, había dormido las ocho horas recomendadas, y el segundo, pero no menos importante, hoy iba a tener un patrullaje especial, distinto. Y eso lo tenía ¿emocionado? Sí, es una forma de llamarlo.

Enderezó su sillón y cuando su vista ya estaba cien por ciento clara, la enfocó en la hora que marcaba el móvil , exactamente las 5:00 am, perfecta para iniciar su día y que le dé tiempo a todo.

Lo primero en su rutina era, por muy cliché que sonara, entrenar un poco, no tenía mucho tiempo durante el día, de hecho no tenía nada de tiempo, entonces utilizaba sus mañanas para salir a correr por las calles, e incluso eso le ayudaba a conocer mejor la ciudad en la que llevaba menos de un año y ya alucinaba con salir de ahí y volver a Los Santos.

Para él, Londres era un buen lugar... sí quieres verte como gilipollas tomando el té a la misma hora todos los días, de ahí en fuera no le veía nada bueno, esa ciudad, ni ninguna, podrían ofrecerle lo que Los Santos, de eso estaba seguro. Por eso le pesó bastante cuando el "jefazo" de la CIA, le dijo que debía no sólo salir de la ciudad, sino que del continente, no era muy fan de la idea, ni del caso que le estaban asignando, ya había lidiado con traficantes en el pasado, y no estaba en sus planes volver a hacerlo, pero tampoco es como si se pudiera negar, nadie podría.

Después de recorrer esa ciudad como cada mañana, y convencerse a si mismo de que, entre las famosas ciudades, no era la gran cosa, volvió a su casa para bañarse lo más rápido que pudiese como le enseñaron desde pequeño y ahorrar la mayor cantidad de agua posible, por lo que no tardó más de cinco minutos en salir de la ducha.

Obviamente lo siguiente era vestirse, aunque claro, tampoco le tomaba mucho tiempo, porque su atuendo era idéntico al del día anterior y al del día siguiente con variaciones como el uso de pistoleras o de chaleco antibalas por fuera de la camisa del traje. Y como ayer le había tocado llevar el chaleco de policía por fuera, optó por utilizar sus pistoleras ese día.

Totalmente arreglado, tocaba ahora su desayuno, y como este día se sentía diferente, se animó a evitar al que proclamó "Desayuno de campeones" que consistía en una Coca-cola y un cigarro, hoy estaba inspirado y cocinaría un poco, aún faltaba bastante para la hora en la que recogería a Fred, tenía tiempo de sobra.

No era un excelente cocinero pero sabía bastante, y aún cuando no cuidaba su salud por las cantidades absurdas de alcohol y tabaco que consumía, si le gustaba comer saludable, por lo que se preparó un omelette de claras de huevo con espinaca, una tostada de pan para acompañar y un café americano sin azúcar ni leche, y se sentó a degustarlo con mucha calma, alegrándose un poco más por cada bocado.

Al terminar de lavar su plato miró al reloj y notó que quedaban treinta minutos para las 8 de la mañana, por lo que se lavó los dientes, retocó el gel en su cabello, tomó sus lentes de sol, su reglamentaria, sus llaves y su movil, y salió al patrulla de secreta para irse al edificio donde dejó al agente el día anterior.

Can't Help Falling in Love - IntenaboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora