Capítulo 9

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El favor

–¡Mol no vas a creer el susto que he dado!– Exclamó el fantasma entrando desde la ventana– Iba a asustar a tu padre como siempre pero de repente vi...– Paró de hablar en seco tras ver lo que hacía su amiga– ¿Que es eso?

–Un dibujo– Contesto mientras seguía pintando

–Sí pero ¿Qué expresa?– Repitió Scratch confuso por lo que veía

Lo primero que se podía apreciar era un caparazón de tortuga vacío que parecía estar en el espacio. Molly estaba sentada encima mirando el cielo el cual estaba lleno de estrellas amarillas y algunos libros abiertos.

La protagonista no supo que responder con exactitud– No lo sé

–¿Como no lo sabés? ¿Que pensabas mientras lo dibujaste?

–En verdad no lo sé. Solo hize lo que mi cabeza y corazón dijeron

–Pensé que no tendría porque preguntarte esto pero si ni siquiera tú te das cuenta debo preguntar

–¿A que te refieres?– Preguntó Molly confusa. No sabía por donde iban los tiros que pegaba Scratch

–Molly– Hizo una pausa y se sentó en el borde de la cama con la mirada de la humana fija en él– ¿Te gusta Libby?

La chica abrió los ojos como platos. Estaba impactada, no se esperaba esa pregunta de su amigo.

–¿¡Qué!? ¡¿Por qué piensas eso?!

–La pregunta debería de ser porqué no lo pienso– Sostuvo su opinión– Vuestras miradas, la cara que pones cuando la ves, tus sonrojos y sonrisas involuntarias. ¡Volvíamos a casa y tus mejillas se pusieron rojas cuando Libby te tomo la mano!

–¿En serio? No me di cuenta– Dijo un poco incrédula

–¡Sí! ¡Todo da una señal de que sientes algo! Y definitivamente esta pintura no ayuda– Señaló la obra

–¿Por qué no? Es hermosa

El espectro se dio una palmada en la frente y dijo– El caparazón de tortuga representa a Libby clarísimamente, los libros son una referencia a todos los que ella te enseño, literalmente estás sentada feliz mirando todo y esto está lleno de corazones y brillos

Molly se quedó callada unos segundos– Eso no tiene nada que ver– Negó cruzando sus brazos

–Normalmente todos estos comportamientos que tienes serían normal porque eres así pero te recalcó algo. Libby es la primera persona con la que te he visto sonrojada múltiples veces. A lo mejor tú no te das cuenta pero yo sí, estoy ahí como un espectador

Molly dejo de escuchar a Scratch en cuanto dijo “múltiples veces”. Estaba analizando la situación y no tardó mucho en darse cuenta de que su amigo tenía razón. Nunca se daba cuenta de ello en el momento pero volviendo a analizar si le pasaba.

Su mundo se estaba cayendo ante sus pies, no tenía ni idea de cómo reaccionar. Ella había notado que no sentía una gran atracción hacia los chicos pero pensó que eso llegaría con el paso de la adolescencia pero ahora se dio cuenta de que eso no iba a suceder. Sentía confusión y agobio, no sabía cómo manejar la situación

–¡Ey! ¿Me estas escuchando?– Chasqueó los dedos delante de su amiga haciendo que reaccionara

–¿Eh? Sí, sí...– Se podía ver a la chica claramente confundida por todas las emociones encontradas en tan solo unos segundos.

Nuestra protagonista se sentó en la cama junto a Scratch

–¿Estás bien?– Preguntó el fantasma

«rin, rin»

–¿Hola?–Contestó Molly el teléfono

–¡Molly!– Saludó una voz femenina y conocida para la chica– Soy Andrea

–¿Como has conseguido mi número? No recuerdo dártelo

–Eso no importa. ¿Te acuerdas del favor que me debes? Pues tenemos que hablar, nos vemos en la heladería hoy a las seis. ¡Chaíto!– Dijo de una manera rápida y directa

–¿Quién era?– Preguntó Scratch

–Andrea. Me ha dicho que vaya a la heladería hoy a las seis, quiere hablar conmigo

–¿Es por el favor que le debías?– Cuestionó algo apenado recordando que fue un poco su culpa

–Seguramente– Respondió la chica animada

–¿Y por qué estás feliz?

–Me ayudará a distraerme, es lo mejor que me puede pasar ahora 

–Tienes un problema con evitar tus problemas– Comentó el fantasma pero sin que Molly hiciera caso

–Iré yo sola. ¿Quieres que te traiga algo?

–Un helado de chocolate y fresa pero, ¿tú no habías quedado con Libby para leer hoy?

–¡Oh maíz dulce! ¡Libby! Me había olvidado de eso– Era más que obvio que no lo había olvidado, incluso lo menciono en la mañana pero por los pensamientos y emociones que habían pasado prefería interactuar menos con Libby– Solo... Le diré que no podemos quedar hoy– Decidió algo desalentada, quería ver a Libby, sin embargo; tenía miedo de lo que podía pasar. No quería que las cosas cambiaran

Molly agarró su móvil y escribió a Libby quién le respondió rápidamente

Molly
Ey Lips
No podemos quedar hoy, perdón por avisar a último minuto

Libby
No te preocupes
Creí que querías terminar lo antes posible el libro para ir comenzado el trabajo
¿Pasó algo?

Molly
Solo surgió algo que es un poco importante

Libby
¿El qué?

Molly
No puedo decírtelo ahora mismo, lo siento

Libby
Ntp, no tienes pq disculparte
Nos vemos en la escuela ;)

Molly
:)

Soltando el móvil junto a un suspiro, Scratch preguntó– ¿Por qué no le dices la razón? Andrea no dijo que el favor fuera secreto

–No lo sé, solo hay algo en mí que me dice que no lo diga

Caminando sin saber que esperar, Molly se dirigió a la heladería. Estaba sola, ni siquiera tenía la compañía de su amigo fanstamal. Era raro, pero ella lo pidió  así que siguió su camino hasta llegar.

Al entrar pudo ver a Andrea sentada en una de las mesas. La peli azul saludó al ver a Molly quién se dirigía hacia ella.

–¿Cuál es el favor?— Preguntó Molly sentándose

–Necesito que me hagas una pintura– Contesto directa

–¿Qué? ¿Solo eso?— Volvió a preguntar. Se esperaba algo más

–De momento sí

–¿Como de momento? Solo te debía un favor

–Eso lo iremos viendo. Quiero que me hagas un retrato con una geoda

–Esta bien pero, ¿puedo preguntar algo?

–No– Le respondió levantándose de la mesa y dejando dinero encima– Mañana en mi casa a las cinco. Puedes comerte un helado con el dinero– Ofreció para después irse del lugar

–Eso a sido raro– Pensó la chica– Supongo que tendré esta semana ocupada

Continuará...

  

La Elección del Destino (mollibby) (The Ghost And Molly Mcgee)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora