Todo era extraño, por un momento no recordaba donde estaba ni lo que había pasado. Cerró los ojos de nuevo ya que la luz le molestaba.
–Muy bien, Sara vamos a pasarte a recuperación. Necesitas estar tranquila, cuando estés mejor te pasaremos a una habitación.
–¿Qué me paso?
–Tuviste una hemorragia pero afortunadamente pudimos detenerla a tiempo.
–Me siento un poco mareada. –Pestañeó de nuevo tratando de acostumbrarse a la luz.
–Es normal, perdiste mucha sangre, dentro de unas horas estarás mejor.
–¿Mis hijos, cómo están?
–Están estables, más tarde podrás verlos.
–¿Y mi esposo, dónde está?
–En estos momentos debe estar con tus bebés. Cuando te pasemos a la habitación podrás ver a tu familia. Ahora la enfermera te pondrá algo para que no sientas tanto dolor. –Sara asintió y poco a poco fue cerrando sus ojos hasta caer en un sueño profundo.
***
–¿Puedo ver a mi esposa?
–Ella ahora está en recuperación, una enfermera le avisara cuando pueda pasar a verla. –Franco soltó el aire que estaba conteniendo. Al fin podría verla después de lo que había pasado. –En un momento la doctora va a hablar con usted y su familia.
–Está bien, ¿puede darme un momento? –La enfermera asintió y salió dejándolo solo junto a sus hijos. –Mis bebés, tengo que irme, pero les prometo que pronto estaremos todos juntos y nunca nos volveremos a separar. –Sus manos acariciaban las incubadoras donde estaban sus pequeños bebés– Su mamá estará feliz de verlos. Los amo muchísimo.
Salió a la sala de espera, allí estaban sus hijos, sus hermanos con sus cuñadas y su suegra. Ellos al ver que Franco se acercaba se pusieron de pie.
–¿Papá, qué paso? ¿Cómo está mamá y mis hermanitos?
Franco se acercó a sus hijos y sin decir nada los abrazó. Necesitaba tanto ese contacto con ellos, necesitaba sentir la seguridad de que todo iba a estar bien.
–Los bebés... Ellos están bien...
–¿Y mami, cómo está? –Franco vio la preocupación en el rostro de sus hijos y no fue capaz de contarles lo que había sucedido.
–Ella está bien, dentro de un rato nos dejarán pasar a verla.
–¿Pero tú no estabas con ella? –Peguntó Doña Gabriela.
–Sí, estaba con ella pero me sacaron del quirófano y fui a ver a mis hijos...
–¿Y nosotros podemos verlos, papá?
–Yo creo que sí. Después de ver a su mamá los llevaré a verlos. –Gaby se abrazó a su padre y este la sostuvo fuerte.
–¿Flaco, ya comiste? ¿Quieres que te traiga algo de la cafetería?
–No, yo estoy bie...
–Vamos Óscar, traigámosle algo para que coma este canijo.
Al rato de regresaron con un sándwich y un jugo para Franco, quien a pesar de no tener hambre se lo comió todo. Estuvieron un rato esperando hasta que por fin la doctora salió a hablar con ellos.
–Sara ya está mejor, tuvo una pequeña hemorragia, que pudimos controlar rápidamente. Ya la pasaron a una habitación y pueden entrar a verla, solo les pido que no entren muchas personas.
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Una Noche de Pasión
FanfictionSara Elizondo, una mujer fuerte que ha sacado adelante su hacienda y su familia. Franco Reyes, un hombre con un corazón enorme que tuvo que abandonar a su familia para que estuvieran a salvo.