MAGIC //Jacob Black//

10: Verdad

Primrouse POV's:

Sonreí al escuchar la puerta sonar, baje las escaleras rápidamente y le dirigí una rápida mirada de advertencia a Charlie.

Él levantó las manos en son de paz, abrí la puerta y ahí lo vi. Sigo creyendo que el amor no es para mí, siempre lo creí y eso todavía no ha cambiado; pero Jake me hace sentir única, espacial, me hace creer en el amor, y no entiendo por qué si apenas lo conozco.

Pase mi pelo por detrás de mí oreja, él me abrazó. Respire su aroma mientras cerraba los ojos, cuando se separó sentí un ligero vacío en mi pecho.

—¿Jacob?

Pregunto Charlie detrás de mí, lo miré fijamente. Él levantó sus manos y se fue de vuelta al salón.

—Volveré un poco tarde, no me esperes—cogí mis llaves, me giré para seguirle hablando al tiempo que salía—; si sabes algo sobre Bella avísame y si Harry llama-

—No le digas que he salido con un chico, lo sé.

Charlie me sonrió burlón, cerré la puerta y giré para encontrarme con la sonrisa de cachorro de Jake. Bajé la mirada antes de caminar hacía el coche de Jacob.

—Hola, Prim.

Abrió la puerta del copiloto, le sonreí y entre. Cerró la puerta y entró por la otra. Me puse el cinturón, después me dejé caer en el asiento.

Bella estaba enferma en Suiza, Harry no sabía cuándo podría volver a Inglaterra, la fecha para iniciar el colegio cada vez estaba más cerca, y yo me estaba encariñando demasiado con "la manada", como Jake les decía.

Deje escapar un suspiro, cruce los brazos y me centre en el camino. La noche empezaba a caer. Jake quería llevarme a una fogata donde estarían todos los de la manada Billy, Sue y el abuelo de Quill.

Después de unos minutos en silencio llegamos a la casa de Jake, desde el día del beso no habíamos vuelto a hablar de nuestros sentimientos.

Jake se bajó, cuando quise abrir la puerta me detuvo y la abrió él. Cogió mi mano y me guió hasta donde estaban todos. Rachel fue la primera que se acerco, con Paul detrás como siempre.

—Hola Rouse—nos abrazamos, le sonreí—. ¿Qué tal? Tu y yo tenemos que hablar.

Miré a Jake que desvío su mirada hacia otro lado mientras silvaba.

—Claro, ¿sobre qué?

—Oh, no te preocupes, después de la fogata u otro día.

Entelazo nuestros brazos y tiro de mí hacia la fogata. Salude a todos y me senté junto a Rachel. Seth se sentó a mi lado devorando una hamburguesa, Jake gruño y se sentó a su lado.

—En nuestra tribu las leyendas han ido pasando de generación en generación, y hoy es tiempo de pasarla a los futuros miembros del consejo—se tomó una pausa, miró a su hijo, a Seth, a Leah, a Quil y a su hija—; es momento de contar la historia de cómo los Quileutes descienden de los lobos. La tribu Quileute se estableció en La Push y se convirtió en pescadores y constructores de barcos eficientes. A medida que pasaba el tiempo, otros pueblos codiciaban su tierra y se movían contra ellos por ella. La tribu era pequeña y no podían defenderse, así que tomaron sus barcos y abandonaron la tierra. En el mar, Kaheleha usó la magia en su sangre para defenderla.

>>Fue el primer jefe espiritual en la historia de Quileute. Él y todos los hombres abandonaron las naves solo en espíritu, usando el poder original de QuileuteAstral Projection, dejando sus cuerpos atrás al cuidado de las mujeres. Aunque no podían lastimar físicamente al enemigo, los guerreros tenían otras maneras.Soplaron vientos feroces en los campamentos enemigos; podían hacer grandes gritos en el viento y podían manipular a los animales para cumplir sus órdenes. Los animales eran los únicos que podían verlos y ayudar. La tribu invasora tenía paquetes de perros de pelaje grueso para tirar de sus trineos en el norte, y que estaban en contra de ellos. Los murciélagos fueron sacados de las cavernas del acantilado. Como resultado, los perros y los murciélagos ganaron y los sobrevivientes de los invasores se dispersaron pensando que el puerto estaba maldito. Los Quileutes liberaron a los perros, que corrieron salvajemente, y regresaron a sus cuerpos victoriosos.

>>Los Hohs y los Makah hicieron tratados con los Quileutes porque no querían tener nada que ver con su magia. Así fue como nuestros ancestros se convirtieron en lobos, y ese poder ha pasado por todos nosotros, descendientes de los lobos que hasta ahora todavía tienen esa magia corriendo por sus venas. No somos animales, pero tampoco personas. Todo lo que somos se lo debemos a la Luna, ella es nuestra madre. Que no se os olvide eso.

Miraba el fuego fijamente, note que terminó la leyenda, Jake se levantó y me tendió la mano. Nos alejamos de todos hasta llegar al bosque. La luna brillaba en el cielo.

—Jake, ¿qué pasa?

Note como tragaba saliva al tiempo que se alejaba de mi varios pasos.

—Las leyendas Quileutes, son ciertas.

Sin esperarmelo su cuerpo empezó a temblar, echando humo, y en menos de lo que podía parpadear, ya no estaba Jake, estaba Black. Me eche hacía atrás asustada.

Tropecé con una rama y caí, estaba muy asustada. Cogí mi varita sin pensarlo, la saque del bolso y la apunte hacia él. Black, o Jacob, se acerco hacia mí.

Prométeme que conocerás primero a la persona antes de lo que es, no todos los lobos son malos ni todas las personas son buenas.

Escuche un ruido a mis espaldas, cerré los ojos y solté el aire. Bajé la varita, abrí los ojos, Jake seguía allí aún como Black. Rachel se acerco a mí y me levanto.

—Jacob eres un bruto, mira a la pobre, esta temblando.

Me abrazó pero yo seguía viendo a Jake, se acerco más, pude notar a Paul y Seth poniéndose a nuestros lados. Quedo frente a nosotros, agachó la cabeza dando a entender que lo acariciara. Todo empezaba a cobrar sentido para mi.

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NOTA IMPORTANTE:

Dentro de poco me voy de vacaciones y no tengo Red WiFi, estaré escribiendo todo lo que pueda de esta historia pero no podre publicar hasta dentro de un par de semanas aproximadamente.

Cuando vuelva a publicar haré un maratón de cinco episodios en el mismo día.

Muchas gracias por leer, espero que os esté gustando la historia. Estaré leyendo vuestros comentarios ♡♡♡♡.