Capítulo 12: Villa Cocoyashi

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Los Piratas de Mugiwara estaban luchando fervientemente contra los Piratas de Krieg, mientras que Law y compañía actuaban de espectadores. Querían ver el verdadero poder del hermano de su capitán.
Fue sorprendente ver cómo usaba con gran habilidad el poder de su akuma no mi, la Gomu Gomu no mi, logrando enfrentar sin problemas a Krieg y su armadura impenetrable.
Aún así, lo que sin lugar a dudas fue el mayor evento del día, fue la llevada de Dracule Mihawk, el Ouka Shichibukai y maestro de Raion.

-Mocoso... encontraste a alguien más fuerte que tú, ¿eh?-le dijo a Raion, sonriendo.

-Es el aprendiz de su mayor rival... no era para nada débil. Ahora es mi capitán y aplastaremos a gente como a usted, maestro... Los Piratas Devil's Son gobernaremos los mares y algún día te superaré.

Mihawk rompió a reír, pero se vio interrumpido cuando Zoro lo retó a un duelo. A pesar de que lo humilló, Mihawk admiró la ambición de Zoro y, dejándolo muy malherido y derrotado, lo retó a que se volviese fuerte y lo retase de nuevo.
Finalmente, con los Piratas de Krieg derrotados, el Going Merry y el Polar Tang se dirigieron con Nami a su hogar, Villa Cocoyashi, aunque cada tripulación con una expectativa. Los Mugiwara, salvar el hogar de su nakama y navegante, Nami. Los Devil's Son, para celebrar la victoria segura de su capitán.

Simultáneamente con los eventos acontecidos en el Baratie
Nojiko y Helmeppo estaban dirigiendo el pequeño bote, con la ayuda de Tanke, en dirección a Villa Cocoyashi. Kelsier dormía plácidamente, apoyado en el borde de la barca, mientras que el mono Akagami descansaba en su regazo.

-Lleva durmiendo todo el viaje-comentó Helmeppo.

-Tal vez quiera reservar energías para lo que se nos viene encima-propuso Nojiko-Ha dicho que quiero enfrentar solo a los Piratas de Arlong... Aún no estoy del todo segura de que sea buena idea...

-Siempre he sido un cobarde, Nojiko, pero con Kel de nuestro lado, me da igual a quien enfrentemos-dijo Helmeppo decidido-Piensa en la facilidad con la que derrotó a Kuro, el hombre que derrotó a mi padre.

Nojiko asintió, aunque seguía teniendo miedo. Era cierto que los Piratas Devil's Son eran fuertes. Ella misma había visto sorprendida como se había fortalecido con los entrenamientos de Kelsier pero... Ella y Helmeppo no eran tan fuertes como Law, Raion, Shura... Y Kelsier solo contra todos los Piratas de Arlong... Tal vez fuese demasiado hasta para él.

-Respira tranquila, Nojiko-dijo sonriendo Kelsier, que se incorporó, mostrándose despierto, aunque ya llevaba un buen tiempo despiertos escuchando su conversación-Aún no habéis visto ni una quinta parte de mi poder... Me entrenó un yonkou y su tripulación.

-Kel...

-Quería ir con todos a Villa Cocoyashi porque quiero que cada uno de nuestros viajes sirvan para mejorar, para que todos nosotros nos volvamos más fuertes, pero nos estaba tomando demasiado tiempo llegar a Grand Line... Ya es el momento de que el Gobierno Mundial y la Marina sepa de qué está hecho el capitán de los Piratas Devil's Son.

-¿Eres más de cinco veces más fuerte?-preguntó sorprendido Helmeppo.

-Sí... Verás... Cuando Shanks y sus nakamas se marcharon, tuve que decirle a mi abuelo que iba a volverme marine para que me entrenara en las técnicas de la Marina... Así aprendí rokushiki. Me entrenaron un yonkou y el héroe de la Marina; un gyojin no podrá conmigo.

Helmeppo tragó saliva. No estaba seguro de si quería ver a Kelsier luchando verdaderamente en serio, pero una parte en él estaba feliz de que los acogiese a él y a su padre. Estar de su lado era la forma más segura de mantenerse con vida.

-Me sigue costando creer que seas pirata, Kelsier-dijo sonriendo Nojiko, abrazándose al brazo de Kel-Cuando me encontraste era una desconocida, pero me salvaste y me prometiste salvar a mi pueblo... En Villa Syrup hiciste los mismo por Shura, Kaya, Usopp... Un pirata no actúa así.

-En realidad, hay mil tipos de piratas-explicó Kelsier-En la época anterior a la era piratas, cuando Gold Roger aún no era el Rey de los Piratas, había otro pirata, muy poderoso y fuerte, llamado Rocks D. Xebec, de cuya tripulación salieron tres de los cuatro yonkou, cuya única intención era conquistar y gobernar el mundo... Mi abuelo y Roger, un marine y un poderoso pirata se aliaron para derrotarlo... Ahí está la diferencia entre piratas.

Helmeppo y Nojiko se miraron sorprendidos. Era la primera vez que escuchaban esa historia.

-Capitán, solo puedo decir una cosa... Eres sorprendente-dijo Helmeppo rascándose la nuca-Espero ser fuerte a tu lado.

-Lo serás... Algo me dice que eres más de lo que crees, que escondes un verdadero potencial que tú mismo desconoces. De algún modo sospecho que tu padre lo sabía y por eso que pidió que te vinieses con nosotros-entonces, Akagami, como loco, comenzó a saltar sobre los hombros de Kelsier y a señalar al frente-Parece que nuestro timonel ha visto tierra-dijo sonriendo.

Efectivamente, el mono de Kelsier había visto a los lejos una isla y, por la reacción de Nojiko, se trataba de su destino, Islas Conomi, el hogar de nacimiento de Nojiko y el lugar del que expulsarían a los Piratas de Arlong.

-Deja que lleve yo el timón-dijo Nojiko incorporándose-Conozco una ruta que creo que es desconocida para los Piratas de Arlong... Fue ahí por donde escapé. Tuve la mala suerte de que el gyojin Same estaba regresando a la isla por el mar. Se comunicó con Arlong y comenzó a perseguirme.

Kelsier asintió, pero aún así se mantuvo alerta, en caso de que detectase la presencia de algún gyojin, aunque teniendo a Tanke de su lado, estaba tranquilo.
La ruta de Nojiko se basaba en adentrarse en una zona montañosa, siguiendo un riachuelo que permitía a duras penas que entrasen Tanke y la barca, pero finalmente llegaron a una cueva, donde amarraron la barca y, tras liberar a Tanke para que fuese por libre, salieron los tres juntos de la cueva, caminando tranquilamente.

-¿Plan?-dijo Helmeppo, siendo el único que parecía preocupado por haber entrado en territorio gyojin.

-Por ahora iremos a casa de Nojiko-respondió serio Kelsier-Ahí comenzaremos a pensar en cómo lidiar con esos gyojin... Recordad, de los oficiales y de Arlong me encargo yo. Vosotros, con vuestro nivel de fuerza, podréis con los extras.

Nojiko y Helmeppo tragaron saliva. Agradecían la confianza de Kelsier pero él ya había escuchado historias sobre la fuerza de los gyojin y Nojiko la había visto de primera mano.

-¿Queréis una prueba? Os daré una prueba... Usad los dos tekkai ahora.

Los dos le miraron extrañados a Kelsier, pero asintieron y, recordando las lecciones que tuvieron en Villa Syrup, activaron el tekkai. Con fuerza bruta, Kelsier arrancó un árbol de raíz y los golpeó con fuerza.
Los dos habían cerrado los ojos del susto, pero los abrieron sorprendidos al ver que no solo estaban ilesos, sino que el tronco estaba destrozado.

-¿Veis? Vuestros cuerpos se han acostumbrado a la fuerza que adquiristeis en el entrenamiento intensivo. Ya veréis cuánto habéis mejorado.

Aún impactados tras lo sucedido, Helmeppo y Nojiko comenzaron a caminar, siendo guiados por ella, que los comenzó a llevar por la isla, logrando alcanzar, una vez atravesado el bosque, una cabaña en el monte, que no se podía ver a no ser que uno hubiese salido del bosque.
Una vez ahí, Nojiko comenzó a dibujar un mapa improvisado de los alrededores de Arlong Park.

-¿Cómo vamos a entrar?-quiso saber Helmeppo.

-De mi forma favorita... a lo loco.

-Kelsier... Creo que, ya que estamos poniendo en peligro al pueblo... creo que al menos Genzo san debería saber lo que vamos a hacer.

Kelsier asintió de acuerdo y, mientras que Nojiko salió de la casa, Kelsier se puso a preparar algo de comida, asegurándose de no usar la cocina para que no viesen humo saliendo de la cabaña.

-Kelsier... ¿Cómo puedes estar siempre tan confiado de la victoria?-preguntó Helmeppo-Law, Raion y tú sois iguales, pero tú siempre eres el más confiado.

-No confío en la victoria... confío en mis habilidades y, se que si lo doy todo, no hay nada imposible-explicó mientras le tendía unos sándwiches a Helmeppo-Siempre he considerado que el verdadero límite del cuerpo humano es la imaginación. En el momento en que piensas que vas a fallar, fallas.

Helmeppo asintió comprendiéndolo a medias.

-La razón por la que eras... con perdón... una mierda con patas, era porque nunca te habías imaginado siendo fuerte... Lo tenías todo servido en bandeja. En cambio, yo, entrené duro toda mi vida. Ahí está la diferencia.

Helmeppo miró con ojos de admiración a su capitán.

-¿Cuál es la akuma no mi que quieres? Lo mencionaron el otro día Shachi y Penguin.

-Sí... He leído sobre una akuma no mi... La Goro Goro no mi, una logia con el poder del rayo pero... soy feliz siendo como soy, haciéndome fuerte sin poderes ajenos... Creo que hay formas de usar los elementos a tu favor sin necesidad de akuma no mi.

-Creo que quiero ser como tú en ese sentido-dijo Helmeppo-Sí que mola ver a Law, Raion y Shura usar sus poderes, pero mola más ver que tú eres más fuerte sin ayuda de ellos.

-Gracias por verme así, shishishi... Me alegra que mis nakamas me admiren-Ya verás como Morgan se sorprende al verte cuando regresen.

-En ese caso... creo que quiero cambiar un poco mi aspecto... ¿Crees que podría quedarme una de tus chaquetas cuando regrese el Polar?

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