8. Bienvenido

691 147 59
                                    

Extraño

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Extraño...

Confuso
Sorprendido
Impactado
Desilusionado...
Y la lista puede seguir, y seguir, y seguir en aumento, y aún así, no me cansaría de catalogar la forma en como me siento en estos momentos.

—¡Ya basta! ¿Esto es lo que querías? —escucho a Baby gritar desesperado y me quedo congelado ante su aterrada y furiosa mirada.

Ésta es la primera vez que mi hijo ha actuado tan extraño, es la primera vez desde que nació que ha ignorado por completo una orden mía, y es la primera vez que me ha hablado de esta manera.

En estos momentos tengo tantos sentimientos encontrados y aún estoy bastante desconcertado con su extraño comportamiento.

Baby suele ser un chico tranquilo, por más que lo he intentado incluir en el mundo del pugilismo, no he podido y me ha costado hacerme a la idea de que esto no es lo suyo, él no es amante de las peleas, ni tampoco es un chico que le guste andar en líos.

En pocas palabras, mi hijo es todo lo opuesto a mí.

Tal vez por eso cuando me habló histérico y muerto de miedo pidiendo ayuda. Mencionó una pelea, patrullas, personas detenidas...y yo simplemente entré en pánico.

Esa es la verdad, el sólo pensar que algo malo pueda pasarle me llena de miedo, el sólo pensar que pueda perderlo, es como si me clavaran un puñal en el costado.

Dirán que soy un maldito controlador por cuidarlo demasiado, y tal vez tengan razón; pero no puedo evitarlo. Mi hijo fue lo único que me mantuvo a flote después de que su madre decidiera abandonarnos a nuestra suerte.
Cuando su madre nos dejó yo no sabía lo que era el cuidar de un niño pequeño, no sabía nada sobre qué era bueno o malo para su crecimiento, no sabía que más hacer para que dejara de llorar desconsolado día y noche porque extrañaba a su madre.

Entiendo que ella me haya dejado de amar y quiso salir de aquí corriendo, entiendo que ella odiaba el boxeo y la vida que llevábamos... de verdad lo entiendo, puedo hacerlo.

Lo que no puedo entender es como ella tuvo la frialdad para abandonar a su único hijo, como fue capaz de no sentir remordimiento alguno al ver el dolor de su hijo cuando salió por aquella puerta con un par de maletas.

Baby no merecía ese sufrimiento.

Fue entonces que juré que haría hasta lo imposible para que él jamás tuviera que sufrir por un corazón roto, juré que haría hasta lo imposible para que él fuera siempre un niño feliz.

Tal vez ese fue mi error... Yo sólo me dediqué a cuidarlo y a protegerlo, me dediqué a darle todo lo mejor de mí, me dediqué a hacer todo lo posible para que mi hijo volviera a sonreír.

Tal vez hice mal en aferrarme a él, a mi pequeño hijo quien sin querer fue el más lastimado por los errores y las diferencias que tuvimos su madre y yo.

El chico de los tatuajes - H.A #10Donde viven las historias. Descúbrelo ahora