Gun Atthaphan, chico tímido al que no le gusta llamar la atención, es feliz viviendo en segundo plano. Es un chico inseguro que vive sobreprotegido y bajo las estrictas reglas de su padre, hasta que en su camino se cruza Off Jumpol, un joven peleado...
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Después de haberme corrido sólo con aquellas caricias y aquellos besos, me fue imposible dormir, menos cuando el corazón me latía a mil por hora.
Después de todo lo que pasó entre nosotros, Off me miró de una manera muy diferente a la que acostumbraba mirarme, y luego me dio un tierno beso mientras acomodaba mi alborotado cabello. Ese íntimo detalle me hizo suspirar y sonreír.
El que después se moviera con sumo cuidado evitando aplastarme para recostarse a mi lado abrazándome y pegándome a su pecho me hizo sentir que lo que habíamos hecho no había sido malo.
Todo el tiempo me cuidó para que estuviera bien, y aunque después de lo que hicimos ninguno de los dos dijo ni una sola palabra, el silencio que se había formado no era incómodo, al contrario, en ocasiones sentía como dejaba uno que otro beso en mi hombro o en mi cuello y eso definitivamente hacía que mi corazón se acelerará mucho más.
Ahora pienso en lo que mi padre preguntó: ¿Quién soy y qué rayos le pasó al Gun de siempre? Ya tengo una respuesta y es muy sencilla... NO LO SE.
En estos momentos no me reconozco, no sólo di mi primer beso... Maldita sea... Tuve mi primer orgasmo y me siento feliz de que fuera con él.
¡Diablos! A pesar de que no lo hicimos, no me arrepiento, esa ha sido la sensación más placentera que jamás he tenido, no sé si por la forma en la que Off me tocaba y me besaba tan intensamente, con sumo cuidado como si fuera a romperme en cualquier momento, o por los restos del alcohol que aún había en mi sistema; pero sea como sea, no me molestó, me gustó y me hizo sentir bien. No me importó que él me desvistiera y me tocara a su antojo, al contrario, fue algo que disfruté, y a decir verdad lo deseaba desde la primera vez que me beso.
Si mi padre se entera de lo que hemos hecho, sé que nos irá muy mal a los dos, no necesito ser un genio para saberlo. No quiero que por mi culpa Off deje de entrenar en el CARP, pero lo cierto es que él me gusta, me gusta demasiado, y algo me dice que yo tampoco le soy indiferente.
No quiero pensar en que sólo soy una persona más en su lista de aventuras, eso sería muy doloroso pero tampoco creo que él sea de las personas que juega a ser el clásico novio.
Maldita sea...
Ese pensamiento me inquieta, y no puedo evitar preguntarme ¿Qué va a pasar con nosotros?¿Cada uno va a fingir que nada sucedió?
¡Dios!... no quiero ni pensar en cómo va a reaccionar Ohm si se llega a enterar, porque siempre le dije que yo nunca podría corresponderle, y sin embargo ahora estoy casi desnudo y compartiendo la cama con el chico que me gusta y con el cual él, tiene problemas.
Tras ese pensamiento no puedo evitar liberarme del agarre de Off y me levanto rápido de la cama y él se levanta de inmediato tras mi repentino cambio de ánimo.
—Oye... ¿Qué pasa? ¿Hice algo que te incomodara? —pregunta algo nervioso.
Escucharle y sentirle me hace entrar en pánico. Estoy empezando a darme de topes por haberme dejado llevar por el momento, no puedo hablar, no quiero decir o hacer algo que pueda estropear más el momento.
