𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟒

530 41 0
                                    

― Me alegra no estar solo en el punto de ser uno de los más fuertes. ― dijo Satoru con una sonrisa y entonces escucho la puerta abrirse, miro y vio una Katana de mango verde con dorado y una espada algo gruesa, ambas portadas por dos de sus estudiantes.

― Te lo voy a tener que encargar. ― Suspiro Maki, que tenía su brazo derecho en su espalda en posición de fastidio.

― Querida Maki, Yuta ya es un joven muy fuerte, pero agradezco que me confi... ― Satoru fue interrumpido por la chica de cabellos verdes.

― Yuta te encargo que Satoru no haga mucho ruido con este asesinato. ― dijo la peli verde, ― Y que te involucres si se le sale de la malditas manos. ― Yuta sonrió y Satoru hizo un puchero, ― Iré con algunos alumnos de primero a exorcizar maldiciones por Japón, más te vale volver vivo.

― No te dejaría cuando por fin puedo estar a tu lado. ― Dijo Yuta antes de darle un beso a la peli verde feliz y entonces se escucho un estruendo de los cuartos de segundo año.

Toge se extraño, sintiendo un mal presentimiento, decidió entrar en silencio y asegurarse de que todo iba bien, incluso silenciando su celular. "¿Acaso los peces gordos han enviado a alguien?... Es muy arriesgado, ¿No?", pensó Toge antes de abrir la puerta. Entró al cuarto y todo parecía normal excepto unas manchas en el suelo, "Akane no sangro en la pelea para liberar al profesor", pensó Toge, mientras su corazón sentía que el mal presentimiento era mayor. Entonces escucho la ducha abrirse y una voz masculina, que lo alerto a correr hacia el baño. Antes de poder abrir la puerta del baño escucho quejidos de dolor, eran de Akane, se detuvo de abrir la puerta, para escuchar con atención. "Cada día me sorprendes más Akane, como primero te fuiste del clan y luego asesinaste a todos, ahora te resistes al ritual, pero sabes el desenlace de esto. Aunque admito que tus intentos me divierten", escucho la voz masculina de antes.

Akane se había metido al baño, se desvistió tranquila mientras colocaba música en su teléfono en un tono moderado para no molestar a los demás, luego dejo su teléfono y ropa doblada en el mesón junto al lavamos y se metió a la ducha, entonces escucho la puerta abrirse, ― ¿Toge?, ¿eres tú? ― pregunto la pelirroja, que tenía su mano sobre la llave para abrirla. ― Sabes, deberías escribir si vas a hacer algo así por excitación. ― dijo la pelirroja y cuando abrió un poco la puerta de la ducha vio al brujo que había controlado una maldición para atacarla y sintió sus manos congelarse por unos segundos.

― ¿Avisarte antes de venir?, pero eso le quitaría lo emocionante a mi visita sorpresa Akane. ― dijo el brujo.

― Kameko. ― Dijo Akane en un tono serio, pero su cuerpo temblaba de miedo.

― Pero admito que verte desnuda me hes excitante. ― dijo el brujo con una sonrisa perversa que parecía siempre estar en sus labios.

Akane no dudo un segundo, tomo su toalla y cerró la puerta de la ducha de nuevo, "Respira Akane... Kameko no es muy fuerte, recuerda su ritual maldito y analízalo... Y...", por unos segundos respirar se hizo más difícil para la pelirroja. ― No se porque te escondes si sabes como funciona esto. ― dijo el brujo manteniendo su sonrisa.

Akane por su parte abrió la ducha y se envolvió en la toalla. "Deje el teléfono fuera... Mierda, que puedo hacer...", pensó Akane mientras escuchaba el correr del agua, entonces escucho la voz del brujo recitar las palabras que hace unos días ya había dicho y sintió su cuerpo más pesados, no ser controlado por él, sabía que sucedía pero quería negarse, esa vez quería ir contra el ritual. Esos simples pensamientos causaron dolor en la cabeza de la chaman, quien comenzó a soltar quejidos de dolor, pero en vez de molestarse Kameko sonrió aun más, con malicia, ― Cada día me sorprendes más Akane, como primero te fuiste del clan y luego asesinaste a todos, ahora te resistes al ritual, ― dijo Kameko mientras abría la puerta de la ducha, ― Pero sabes el desenlace de esto. ― Akane seguía quejándose llevaba un minuto completo tratando de resistirse, ― Aunque admito que tus intentos me divierten. ― Entonces los quejidos se detuvieron y Akane quedo de rodillas justo como antes.

𝓕𝓵𝓸𝔀𝓮𝓻 || 𝙏𝙤𝙜𝙚 𝙄𝙣𝙪𝙢𝙖𝙠𝙞 ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora