RECUERDOS ROBADOS

RETAZOS DE OLVIDO

RECUERDOS ROBADOS

CAPÍTULO 13

RETAZOS DE OLVIDO

—Aún nada— Respondió Makoto desilusionada tras cerrar la computadora portátil que Rei le había prestado.

A poco menos de un mes de haber escapado del cautivero en que la tenía Neflyte, una de las cosas que había aprendido a hacer era utilizar la computadora portátil y los programas de sistemas que le eran de mayor utilidad. Sorprendentemente había aprendido rápido, y supuso que quizá era porque su subconsciente estaba habituada a utilizarlos antes de perder la memoria; así mismo, también se había hecho un correo electrónico , pues no hubo manera de que pudiera accesar al que ya tenía, pues no recordaba cual era su contraseña.

Una vez que aprendió de nuevo a usar esas herramientas tan indispensables en la Era moderna, se dio a la tarea de comenzar a buscar un trabajo en el area gastronomica; pues depender de Rei y Darien para tener techo; así como de Andrew para tener dinero, le hacía sentir inútil; sin embargo, pese a que había mandado muchos currículos, en ninguna parte la llamaban.

—Makoto, siendo franca, veo difícil que te contraten estando embarazada— Comentó Rei.

El comentario hizo sentir mal a Makoto, y desvío la mirada para que Rei no viera el brillo en sus ojos.

—Por desgracia la sociedad es así— Siguió explicándole Rei— Las empresas difícilmente suelen contratar a mujeres embarazadas porque saben que antes y después del parto les deben de dar incapacidad. Además, tu único y último trabajo antes de tener la cafetería fue hace dos años y las cosas no terminaron bien porque golpeaste al hijo del dueño.

—Pero tu misma dijiste que lo hice porque intentó abusar de una de las meseras en el baño de mujeres. Entonces fue por una causa justa.

—Sí, Mako-chan, fue por una causa justa— Le respondió Rei— Pero si una empresa se interesara en tu perfil, llamará a ese restaurante para pedir referencias, y sólo por eso el dueño no hablará bien de ti.

Tras un momento de silencio, Rei volvió a hablar.

—Si no quieres regresar a LA HORA DE LAS HADAS, al menos...

—¡No!— La interrumpió Makoto— No voy a poner en mi currículo LA HORA DE LAS HADAS, mucho menos tomar posesión de esa cafetería cuando dices que fue Andrew quien puso el capital para emprender ese negocio.

Rei exhaló resignada. Sabía que no iba a convencer a Makoto de agregar LA HORA DE LAS HADAS como parte de su currículo, muchos menos retomar las riendas de su negocio.

—Está bien— Respondió Rei— Si tienes tantas ganas de trabajar, cuando regrese al juzgado te contrataré como secretaria, pero no voy a regresar a mi trabajo hasta tres meses después de que nazca Hanabi.

Makoto iba a protestar, pero entonces, Rei dejó escapar un grito.

—¿Qué sucede?— Preguntó Makoto asustada

Rei estaba a punto de responder, cuando de pronto otro grito escapo de su garganta.

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—Pasado mañana Makoto tiene cita con Ami— Comentó Darien despues de darle un sorbo a su taza de café— Por las semanas que tiene es posible que ya puedan saber el sexo del bebe y...

—Si todo marcha bien no es necesario que se me informe de cosas irrelevantes como el sexo de su hijo— Lo interrumpió Andrew

—¿Su hijo?, te recuerdo que los bebés no surgen por generación espontánea , Andrew— Lo regañó Darien