MI VIDA
ES UN
CUENTO DE HADASPOR MÁS QUE FUERA EL SEÑOR DE LOS MUERTOS, HADES SABÍA RESPETAR CUANDO LAS COSAS NO TENÍAN RELACIÓN CON OTRAS. Bajo el fuego ardiente de su palma, la señora Jackson estaba en la misma pose que cuando el Minotauro estuvo a punto de tomarla. Con un movimiento de manos elegante, su cuerpo se evaporó limpiamente y el polvo dorado quedó como restos que se dirigían al techo, regresando a dónde correspondía.
—Es hora de que regreses.
—¿Qué?
¿Ya no me quería a su lado?
Cerbero, que en cuanto bajamos de la pila de tierra que se alzó, se recostó ante su dueño. Aunque tenía un tamaño colosal comparándolo con el normal que tenía Hades, se comportó como un cachorro con las tres lenguas afuera. La baba no parecía importarle a mi padre, así como a ninguno de los espíritus recién llegados.
Aunque protegió su casco a toda costa.
—¿No quieres ver cómo está tu madre? —preguntó.
Mis manos dejaron de tocar el pelaje suave del perro. Me había sentido mal en no traer el tema a la luz, como no mostrarme preocupada en todo el viaje por ella, pero ahora el cuerpo enteró empezó a hormiguearme como si me impulsara a correr hacia donde estaba. Miles de pellizcos invisibles obligaban a mis piernas a moverse.
—¿Va... le gustaría...?
Quería preguntarle a Hades si le apetecía venir conmigo a verla, pero entonces reparé que eso era ridículo. Aparte de lo extravagante que sería ir con el Señor de los Muertos en un auto hasta Nueva York, porqué ir en avión era imposible al ser territorio de Zeus, también se me había olvidado de su reina, Perséfone, que rondaba allá arriba. Mi padre junto a su esposa y amante... no es como me gustaría recordar una linda reunión familiar.
El rostro de Hades pareció esconderse en su túnica, pero sólo fueron sus cabellos los que se agitaron al empezar a caminar en dirección que yo no veía que tuviera más que seguir. El río Estigio era por donde había llegado, ¿dónde más podía dirigirse?
Cerbero soltó un ladrido feroz que creí que volvería a ser aquel monstruo, pero que en esta ocasión el que no nos quería dejar ir. Cuando más lo veía, más se me hacía familiar los rostros que hacía el can, como si ya lo hubiera visto con anterioridad. Pero no recordaba dónde.
—Adriana...Oh, sí. Tu madre no está nada mal para ser una mortal —declaró Hades con voz ronca, observando el recorrido del río aceitoso con añoranza. Por un momento sus ojos se habían tornado encantadoramente en un fuego purpura—. No se compara a ninguna que he conocido antes —de pronto su expresión se había ensombrecido, creando un camino con pinchos que me hicieron tropezar. A lo lejos, vislumbré una luz de fuego que se alzó repentinamente—. Cuando estuvo a punto de... No iba a dejar que sucediera de nuevo. No otra vez.
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𝐓𝐇𝐄 𝐋𝐈𝐆𝐇𝐓𝐍𝐈𝐍𝐆 𝐓𝐇𝐈𝐄𝐅 ──── pj
Fanfiction𝐓𝐇𝐄 𝐋𝐈𝐆𝐇𝐓𝐍𝐈𝐍𝐆 𝐓𝐇𝐈𝐄𝐅 | ' de las dificultades nacen milagros ' ‾‾‾‾‾‾‾‾‾‾« en donde Cíon Metaxás siempre ha sido una chica problemas. Había estado en ellos desde que tiene memoria y eso nunca podrá cambiarse » ‾‾‾‾‾‾‾‾‾‾ ▹ percy jacks...