LIGHTS DOWN LOW || Toji Fushiguro X Lectora || JJK (+18)

Capítulo VII

En la otra calle había una tienda de ropa y creo recordar que estaba abierta las 24 horas, no iba a dejar que Toji se pusiera esa ropa sucia, mucho menos que se fuera, así que tanteándole a su talla escogí una camisa, un pantalón cómodo y ropa interior, regrese lo más rápido que pude totalmente cansada pues todo el tiempo estuve corriendo.

Cuando entre escuche que me estaba llamando, así que entre al baño, estaba sentado en la taza con la tapa abajo y con la toalla alrededor de su cintura me miro con una cara aburrimiento y me reprocho – llevo como 5 malditos minutos hablándote, ¿dónde estabas? ¿y por qué estas vestida? – respire profundo, exhale y le entregue la ropa – te fui a comprar eso, no iba a dejar que te pusieras lo que trajiste, perdón por haberme tardado – el me miro con los ojos abiertos por la sorpresa y se paró – sabes, no era necesario, pude haberme quedado así para que nos divirtiéramos – sonrió y tomo mi mentón para besarme, pero cuando estábamos más cerca lo interrumpí – por favor, si quieres hacerlo cúrate primero, si no, no podría, enserio estoy preocupada, ¿sabes? – salí del baño y antes de cerrar la puerta voltee y le dije – quédate a dormir, no voy a aceptar que salgas herido a la calle –. 

Pero antes de cerrar me sobresalte y recordé otra cosa – no creo que hayas comido nada, ¿o sí? ¿Quieres que te caliente la comida de hace rato? Solo me comí mi plato, así que aún está ahí, – me quede pensando un segundo y seguí – sabes que, no me importa, estas herido, tienes que recuperarte, así que sal para cenar cuando termines – Toji que desde el momento en el que me separe del beso se encontraba sorprendido y cuando cerré la puerta se quedó intrigado aún más, nadie nunca se había preocupado por el de esa manera, obviamente le irrito que no hubieran tenido sexo (de nuevo), pero algo más estaba ocupando su cabeza en estos momentos, el hecho de que estuviera cuidando de él, si se ponía a pensarlo, ninguna mujer se preocupó por él antes; todas tenían las mismas intenciones y por él estaba bien, así tendría donde pasar la noche, pero en esta ocasión no era nada así, él podía quedarse sin dar sexo a cambio, una situación en la que jamás creyó que fuera a estar por muchas razones, como su inestabilidad y personalidad, cuando volvió a pensar lo buena que estaba siendo con él en ese momento algo en su pecho se sintió cálido por primera vez, se volvió a sentar en la taza de baño y lo proceso mejor, trataba de encontrar él porque estaba siendo buena con él y no encontró nada, aturdido se vistió con lo que le trajo y salió.

Lo vi salir del baño y mi preocupación se disipo, pues se había tardado un poco, lo mire bien y sonreí mencionándole lo bien que le quedaba la ropa – Dios, estaba preocupada porque te quedara muy ajustada, pero parece que si es tu talla, hice un buen trabajo escogiéndola para ti, la camisa negra se te ve bien, sin duda tienes buen cuerpo – le sonreí con sinceridad y le pedí que se sentara para que comiera, él se veía algo pensativo y en vez de sentarse como se lo pedí se paró frente a mí, lo observe algo preocupada y puse ambas manos sobre sus mejillas – Toji, ¿estas bien? ¿Te sientes mal? – el no dijo nada solo suavizo la expresión en su cara y presiono mis manos con las suyas, no entendía que estaba pasando, pero espere su siguiente movimiento con algo de duda en mi mente y reflejada en mi rostro, unos segundos después el deslizo sus manos por mis brazos, que ya se encontraba sin la chamarra que me puse para salir, pues estaba de vuelta en pijama, y cuando llego a mis hombros las paso por mi espalda y me acerco lentamente a él, envolviéndome en un abrazo.

Me sorprendí un poco, pero no me molestaba para nada y a decir verdad, su abrazo me hizo sentir bien, yo lo rodee también teniendo cuidado con su cintura y estuvimos así un par de minutos, no dije nada y el menos, podía sentir que ambos estábamos disfrutando ese momento, o es lo que yo espero, él se inclinó poniendo su cara pegada a mi cuello, su respiración me hacía cosquillas por lo que recargue mi cabeza en la suya para alejarlo un poco, ahí comencé a sentir que aspiraba mi aroma y como sus manos comenzaron a acariciar mi espalda, las deslizo a mi cintura y se reincorporo carraspeando y terminando por soltarme completamente, acto que copie, me le quede viendo esperando a que dijera algo, hasta que al fin dijo – espero que eso sea suficiente para ti, no planeo agradecerte de nuevo – yo solo vi cómo se iba a sentar para meterse comida a la boca rápidamente.