𝐼𝑧𝑢𝑘𝑢. +18

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creo k habrá cosita subidita d tono... nose vamo' a ver k sale.

***

Estaba realmente cansado.

Izuku retiró el sudor de su frente con un pañuelo que llevó consigo al gimnasio, dónde entrenó por horas hasta llegar al punto dónde sus piernas tiemblen de agotamiento.

Claramente, para ser un héroe tenía que tener una condición física óptima y saludable, por lo tanto; él y sus compañeros y amigos de clase iban a un gimnasio cerca de sus aposentos e iban a ejercitarse en grupo.

El gimnasio se dividía en 2 partes, las de hombres y mujeres, se podía entrar a la otra parte siempre y cuándo tengas un carnet. El ambiente en cada lado era sereno y tranquilo, en el de los hombres casi que se podía oler la testosterona, y a mucho desodorante.
Y por el contrario, el de las mujeres, lo que mayormente se oía eran voces de chicas hablando o música baja. Allí olía más que todo era a sudor. Nada desagradable.

Todoroki se hallaba sentado en en suelo, también estaba agotado. Su rostro se encontraba algo sonrojado, debido la adrenalina y su ardua rutina de entrenamiento, sus cejas las mantenía un poco fruncidas y sus labios estaban abiertos, respirando profundamente.  Tenía puesto, igual que Izuku, una camisa blanca sin mangas, con un short negro corto y zapatos de deporte. Estaba sudado, nadie sabía porqué, pero el gimnasio estaba más caluroso de lo normal, suponían que era por su lado fuego.

En momentos jadeaba bajito por hacer pesas durante mucho rato seguido, en sus manos y brazos se resaltaban las venas, por la fuerza ejercida.

Bakugo estaba aún haciendo ejercicio, era una máquina. No se le notaba cansado o con sed. Al contrario, estaba motivado y con ganas de seguir ejercitando.
Estaba en una máquina corredora/caminadora, con unos audífonos puestos, semblante tranquilo y serio.

Empezó a correr, no tenía camisa. El sudor caliente bajaba lentamente por su espalda y cuello, su empezó a sentir ese ya acostumbrado ardor en sus musculosas piernas, le encantaba.

De todos los presentes, él era el que más aguante tenía. Le gustaba sentir como sus piernas o brazos ardían debido al ejercicio constante. Cada vez se hacía más fuerte.
Su manzana de Adán subía y bajaba cuando tragaba saliva, lentamente dejo de correr, y tomó un pequeño descanso.

Por otro lado, Denki, Sero y Kirishima, estaban todos juntos en hilera haciendo lagartijas, también estaban sin camisa, las manos de Kirishima estaban en su máximo esplendor, mostrándose venosas y temblando un poco por la presión.

Denki y Sero gruñían por el cansancio, a pesar de que los 3 estaban al puto límite, seguían con su entrenamiento, ya que... Ok, habían apostado a qué el primero que cae rendido, le tocaba lavar los platos por 2 semanas seguidas.

"Primero me quito un testículo."
Pensó Denki.

"¿Y si hago trampa? Puedo empujar a Kirishima, sí, eso haré."
Pensó Sero, mientas se reía internamente

"Mierda, siento que moriré. Igual no perderé."
Pensó el dulce Kirishima

Lo siguiente fue estúpido, Sero empujó "disimuladamente " a Kirishima. ¿Cómo lo hizo?, pues, "disimuladamente" quitó la mano derecha de Kirishima del piso, por lo tanto cayó.

ᴏɴᴇ sʜᴏᴛsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora