¡¿Intercambiamos... de Cuerpo?!

Capítulo 1: De Mal En Peor.

La semana había sido intensa, muchísimo más que otras.

Desde la pelea que tuvieron ambos líderes las cosa habían ido cuesta abajo.

La tensión de ambos era tanta que parecía que pronto iniciaría la tercera guerra mundial. Y lo peor de todo es que pasando desde Stark hasta los gemelos, eran todos ellos los que parecían llevarse la peor parte.

—¿Podrías bajar los pies de la mesa, por favor Natasha?—comentó amablemente el líder, intentando mantener la poca cordura que lo estaba superando.

Ella no le respondió, al contrario pateó con algo de fuerza, pero no la suficiente como para romper el cristal que se encontraba en el centro de esta.

—Quita los pies de la mesa —habían presenciado todos aquella vez. Donde su capitán intentaba de todos los modos posibles hacer que la pelirroja bajara los pies. —Natasha no estoy jugando.

La pelirroja parecía hacerse la sorda, haciendo que la ira de su capitán fuese en aumento. 

Steve realmente estaba siendo muy paciente con ella, pero es que no se lo estaba poniendo fácil. Realmente esa pelirroja quería verlo explotar de coraje.

—¡Quita los jodidos pies de la puta mesa!—había explotado aquella ocasión, haciendo que todos se quedarán boquiabiertos por la expresión utilizada en su líder.

Incluso la propia Natasha se vio algo sorprendida por el tono tan inusual e intenso de su compañero o en este caso ex-compañero de batalla.

Sin embargo la pelirroja no dejó notar su sorpresa, volviendo a la misma posición de antes y recargando con más fuerza sus botas sobre el cristal de la mesita que estaba en el centro de la sala.

Haciendo que el coraje de Steve Rogers fuese en aumento, arrinconandola en aquel diminuto espacio del sofá, sorprendiendo a todos. Pues el americano apretaba con tal presión su muñeca que tarde o temprano se la terminaría arrancando.

—¡BAJA LOS MALDITOS PIES DE LA PUTA JODIDA MESA!—expresó en un ligero susurro tan tenebroso que incluso la propia Wanda tuvo miedo del Capitán.

—N-nat —llamó ligeramente Wanda al notar la mira fría y estoica en esos ojos azules —Por... Por favor, ¿podrías bajar los pies de la mesa? Estamos cenando y se ve mal.

Natasha a regañadientes obedeció, no por complacer a Steve Rogers, lo hacía únicamente por Wanda, quien en estos años se había ganado su cariño.

Se levantó de la mesa, junto a su porción de Pizza a medio terminar y salió de ahí rumbo a su habitación. Donde un fuerte portazo se escucho por todo el complejo.

—Ah... Cap... Capitán —había llamado ligeramente Stark al líder del equipo.

—¡¿QUÉ QUIERES AHORA STARK?!—respondió con un tono tosco y rudo. —¡¿QUÉ NO VEZ QUE ESTOY OCUPADO?!

—S-sí... Yo se —comento el filantripo a duras penas —Es que estas apretando muy fuerte tu vasó de soda y estas manchando la alfombra, y ya ni de la rebanada de pizza hablamos. ¿Verdad?

—¡Me cago en la puta madre!—exclamó luego de ver su mano toda llena de kechtup y su lata de refresco, regada por toda la alfombra y parte de su ropa.

Todos venían con grandes ojos lo furioso que estaba el icono americano, no duró ni un solo segundo cuando la mirada del preciado capitán cayó de lleno sobre todos.

—¡¿QUÉ?!—había expresado sobresaltando a todos. —¡¿Que acaso no me puedo limpiar sin que estén de mirones?!

Steve azoto el pedazo sin terminar de pizza en la mesa del centro, dirigió una mira llena de coraje a todos. Siendo Stark el último al que escaneo con esos fríos ojos azules.