Jungkook se ve en el espejo y acomoda su cabello. Luego de especular frente al armario y de vaciarlo por completo, decidió llevar una camisa azul de seda con unos pantalones negros. Aquella le fascinaba, pero a su ex-esposa no le agradaba el color por lo que él nunca tuvo la oportunidad de usarla.
Coloca algunas cosas que puede usar en sus bolsillos y parte para la fiesta de cumpleaños a la que fue invitado.
Afortunadamente, el viaje es corto.
Toca timbre y Taehyung abre con una enorme sonrisa (y muy linda). Jungkook le devuelve el gesto y le extiende una bolsa, a lo que el rubio responde con un rostro de sorpresa.
—Oh, gracias, no tenías que traerme nada —sonríe mientras deja a su compañero pasar. Mira la bolsa y saca de allí un abrigo que es muy similar a uno que perdió. Le encanta—¡Jungkook! Es genial, gracias.
—Olvidaste uno parecido en casa y lo rompí cuando estaba enojado. Lo siento.
—Oh, mierd... ¡Descuida! Jeje, no pasa nada. De todas formas, este me gusta mucho más —dice con pura sinceridad y Jungkook sonríe.
El lugar está lleno de gente, supone que es la casa de un amigo de Taehyung que le permitió celebrar su cumpleaños ahí. No es sorpresa para nadie que haya tantas personas, pues Taehyung demuestra tener mucha confianza y ser bastante sociable.
Jungkook, en cambio, es todo lo contrario. Cuenta con un pequeño grupo de amigos y no suele reunirse con mucha gente. A veces lo invitan compañeros del trabajo a sus cumpleaños o a una cena por un evento importante, pero tampoco las disfruta al máximo. Es tímido y, a su vez, muy vergonzoso.
—¿Quieres tomar algo? —pregunta el cumpleañero y el contrario asiente—. Ven, te serviré un trago ¿Qué te gusta? No soy muy bueno haciéndolos, pero hay muchas cosas.
—Yo lo hago.
—¿Sabes hacer tragos?
—Cuando era joven fui bartender —menciona Jungkook y comienza a moverse alrededor de la mesa con las bebidas, etc—. Me gusta hacer tragos.
—Oh ¿De verdad? ¿Qué trago es tu favorito?
—Caipiroska ¿El tuyo?
—Ese mismo —Taehyung apoya sus brazos sobre la mesa y se inclina, mirando a Jungkook preparar un daiquiri.
—Algún día te lo prepararé —Jungkook lo mira, sonriendo ladinamente y el otro muerde su labio inferior, sintiendo un leve calor en su rostro.
—¿Me vas a emborrachar?
—¿Hay algún problema?
—Tengo mucha resistencia —dice y Jungkook prueba su trago, para luego pasar su lengua por su labio inferior.
—Entonces tendré que quedarme hasta tarde hasta lograrlo.
—Me gustaría verte intentarlo, pero no puedo ser el único ebrio.
—Entonces estaremos el doble, porque también tengo mucha resistencia.
—No me molesta, tengo todo el tiempo del mundo —murmura Taehyung y sonríe. Jungkook hace lo mismo y se apoya contra la pared. Ambos se mantienen en silencio unos segundos más—. Vamos a bailar.
—Oh, no, yo no bailo.
—¡Dijiste que te gustaba hacerlo! Vamos.
—Me da vergüenza.
—¡Jungkook! Soy buen compañero de baile, vamos. Por favor~
—Nunca he bailado en frente de nadie.
—Bueno, aburrido.
Taehyung cierra la puerta de la cocina. El volumen de la música es bastante alto por lo que ambos pueden escucharla aún. El chico se acerca al mayor y toma sus manos, recibiendo una mirada confundida.
—¿Qué haces? —cuestiona Jungkook a lo que el otro sonríe.
—Si no quieres bailar frente al resto, bailemos aquí. Sólo somos tú y yo —susurra Taehyung, haciendo que las mejillas del pelinegro se tiñan de un fuerte color carmesí.
Ambos se mueven al ritmo de la música. Jungkook decide olvidarse de todas sus preocupaciones, pues se merece un poco de tranquilidad luego de haber tenido días tan complicados y abrumadores.
Taehyung está intrigado, pues siente que algo se enciende cuando Jungkook está cerca y la incertidumbre le come la cabeza, pues no sabe qué es.
—Me gusta mucho tu camisa, hace que tu rostro se vea lindo —halaga Taehyung y Jungkook se sorprende ante el comentario.
—¿De verdad? ¿Te gusta?
—Sí, me gusta el color.
—Gracias... —sonríe y aprieta los labios—. Lamento haber roto tu abrigo. Estaba furioso y triste.
—No te preocupes, lo entiendo. Es lo mínimo que puedes hacerme por lo que hice.
—No hiciste nada... Tú no sabías.
—No puedo evitar sentirme culpable al respecto.
—Yo tampoco. No hablemos del tema, dejémoslo atrás, al menos por hoy. Es la primera vez en tanto tiempo que me siento tranquilo —dice Jungkook y el contrario asiente.
—Me alegro que estés tranquilo, ambos merecemos esa tranquilidad ¿No crees?
—Sí.
La puerta se abre, dejando ver a un chico de una estatura un poco más baja y contextura delgada. Taehyung se separa.
—Ha llegado más gente, quieren verte —avisa el desconocido y Taehyung asiente.
Mira a Jungkook y sonríe.
—Luego volveremos a bailar, debo irme ahora.
—Está bien.
[...]
Jungkook termina su trago y suspira, un poco aburrido. La gente a su alrededor parece estar disfrutando bastante de la celebración de cumpleaños de su compañero de trabajo, pero no es su caso, por ahora.No sabe donde se encuentra el cumpleañero y, aunque le cueste admitirlo, cree que se sentiría mil veces mejor teniéndolo a su lado hablando sin parar como siempre.
Se encuentra en el jardín espacioso de la casa ajena, el pasto está un tanto húmedo y el viento le pega en el rostro con suavidad, sin ser demasiado a tal punto de provocarle un resfrío. Agradece haberse llevado un buen abrigo, porque hace frío.
No hay nadie fuera y lo agradece. Le gusta estar solo, disfruta de la soledad y usa cada oportunidad de estarlo que se le da.
Su soledad es irrumpida ya que Taehyung sale al jardín. Las miradas de ambos se encuentran y el menor sonríe enormemente al encontrarse con el pelinegro.
—Aquí estás, te estuve buscando —menciona Taehyung y Jungkook esboza una sonrisa.
—¿De verdad? Apuesto a que hay muchas personas más entretenidas que yo.
—Pues no —Taehyung le pega suavemente con su hombro—. Eres divertido.
—¿Lo soy?
—¡Sí! Claro que sí. Me gusta estar contigo.
—No pasamos mucho tiempo juntos.
—Bueno, yo creo que deberíamos ¿Tú no?
—Oh —Jungkook lo piensa un poco y no le parece desagradable la idea—. Sí, deberíamos.
—Voy dentro ¿Quieres venir?
—Estoy bien aquí.
—De acuerdo. Búscame si necesitas algo —Taehyung sonríe ladinamente y aprieta el brazo de Jungkook, para luego entrar a la casa.
El mayor siente los dedos de Taehyung sobre su brazo por unos segundos más y un escalofrío recorre su espalda. Sus mejillas se sienten acaloradas y le sorprende lo mucho que le hizo sentir el más mínimo contacto físico.
¿Qué le ocurre?
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Broken.
FanfictionJungkook se entera de que su esposa tiene un amante y Taehyung se entera de que su novia lo usa para serle infiel al hombre con el que ella se casó. [kooktae]