NUEVE~

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—Hyunjin...

—Minho, no quiero escucharte. Vete...—El omega continuó su camino hacia su cuarto, planeaba encerrarse hasta que el alfa se dignara a irse.

—Vamos a desayunar mientras hablamos, ¿Si? — Hyunjin se detuvo solo porque si tenía hambre. Se dio la vuelta y volvió a bajar con dirección al comedor.

Minho no dijo nada más, solo observo a Hyunjin sacar platos y vasos para que pudieran desayunar. El alfa sirvió la comida y se dedicó a observar al omega mientras daba el primer bocado.

—Yo quiero...

—Minho, solo baje porque en serio tengo hambre, no porque quisiera escucharte. —El alfa se tragó sus palabras y comenzó a comer sintiéndose herido del rechazo que el omega le evidenciaba a su persona.

Pero no era el único que se sentía herido, Hyunjin también se sentía mal estando en la misma mesa que el alfa y era aún peor sabiendo que ambos intentaban aparentar que las cosas estaban bien. Al omega le dolía estar comiendo con alguien que parecía haberlo usado y abandonado. El también se sentía rechazado pero Minho no lo notó.

El pelinegro comió intentando aguantar las lagrimas que el dolor causado de tener al alfa ahí, le provocaban.

—¿Cuánto te debo de mi comida? No quiero tener otra deuda. —Hyunjin se paró de la mesa buscando su dinero.

—No es necesario, omega. Déjalo así por lo que pas...— El omega se detuvo y su expresión cambió, deseo con todas sus fuerzas que el alfa no hubiera dicho aquello y rezó por que las lagrimas no fueran a caer.

—Lo que...¿Qué? ¿Qué estas tratando de decirme? ¿Crees que con haberme acostado contigo ya te pague? Eres un idiota, Lee.

—Yo no dije eso, no pongas palabras en mi boca.

—¿Entonces? — El omega enfrentó al pelimorado, con lagrimas en los ojos y sin fuerzas.

—Me refería a que puedes tomarlo como una compensación por haber estado ausente todo el día de ayer. Intenté regresar pero siguieron surgiendo más...

—¿Compensación? Quédate con tu puto dinero. Si para eso me querías, podrías haberlo dicho desde el principio.

—Carajo que no, Hyunjin. — Tomó del brazo al omega intentando acercarlo a el. — No es algo que pudiera controlar, me hubiera gustado estar ahí cuando despertaras y bañarnos juntos, desayunar y todo eso que las parejas normales hacen, pero...

—No somos una pareja, lo entiendo. Déjame ir, no quiero verte. — Se jaló hasta que el alfa lo soltó y sin esperar respuesta subió a su habitación. El alfa lo siguió y se paró en el marco de la puerta, solo observando.

—¿Me vas a escuchar?

—No. — Un suspiro frustrado se escucho y pronto la puerta se cerró. Hyunjin bajo su mirada y se puso a llorar de lo mal que se sentía.

No paso ni una hora con comida en el estomago cuando corrió al baño a vomitar. El omega odio esa sensación de ardor que el vomito le provocó, definitivamente prefería el ardor del alcohol.

Se puso a levantar todo el desastre de la habitación. Entre todo lo que levanto encontró la sudadera del alfa y su camisa, las dejó a un lado y siguió con su limpieza. Cuando terminó metió las dos prendas a lavar y espero pacientemente a que el ciclo terminará.

El olor a tristeza inundaba la casa, las lagrimas siguieron bajando por horas en las que no hizo más que limpiar e intentar quitar de su piel todas las marcas y recordatorios de que el alfa lo había marcado como suyo. Al menos dos horas duró en el baño dejando sobre las marcas moradas unas nuevas pero rojas.

¿? |HYUNHO|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora