¿? |HYUNHO|

DOCE~

Minho tenía bien sujetado al menor de la cintura mientras lo observaba dormir, no podía creer que el fuera tan dichoso de poder tener a Hyunjin ahí, en sus brazos. 

Minho había comenzado a sentir más que una simple atracción a comparación de cuando lo vio por primera vez, el empezó a sentir que lo quería, quería tenerlo todo el tiempo y sentía la necesidad de amar y proteger al dueño de la pequeña cintura. Necesitaba que ese omega se quedará junto a él. Se imagino a sí mismo despertando todos los días con la magnifica vista que la lechosa y suave piel del menor le brindaba, le encantaría despertar todos los días con unos bonitos ojos miel mirándole atento. Todo un sueño para el. 

Sintió al omega removerse y luego observo esos preciosos ojos abriéndose, la sonrisa que Hyunjin le regaló simplemente pudo con el. Se inclinó para besar sus labios, quiso ser dulce y gentil, quería transmitirle al omega todo lo que sentía. 

Afortunadamente Hyunjin lo sintió, se sintió tan querido y seguro que podía jurarle al mundo que ese era su lugar, estar ahí junto al alfa, sin importarle nada más. El omega también quería al alfa, y lo hacia en grande. Simplemente comenzó a amar la posesividad con la que su cintura era tomada y la gentileza que el alfa siempre le había demostrado.

Hyunjin se estaba enamorando y el mismo ya había aceptado caer rendido a los pies del alfa, no le importaba hacerlo.

—Buenos días, Honnie.

—¿Honnie? Eso es nuevo. — Hyunjin soltó una risilla y se escondió en el cuello del mayor.

—Si, te llamaré Honnie ahora. ¿Puedo, alfa? — Los ojos de cachorrito que recibió Minho, le hicieron imposible no aceptar.

—Tu puedes hacer lo que quieras, omega. Solo no me llames así enfrente de los demás. — Besó la frente del pelinegro y se levantó. Observó al omega taparse hasta la cabeza. —Fresitas, vamos a bañarnos, hoy iras conmigo.

—Mmmm alfa, báñate tú. Yo soy una persona ecologista. — Minho soltó una carcajada y el omega lo acompaño.

—¿Ecologista? Levántate a bañarte. — Al no ver ninguna respuesta de parte del menor, se acercó y lo destapo. Hyunjin se encogió en la cama y se aferró a las sabanas como si su vida dependiera de ello.

—¡Alfa, no me quiero bañar! — Minho volvió a reírse y sin tener que hacer mucho fuerza, levanto al omega de la cama. Le sonrió triunfante y lo dejo sentado en el lavamanos del baño.

—No hagas berrinche, bebé. — El alfa se encargó de desvestir a Hyunjin, en esta ocasión ninguno tenía dobles intenciones. Pero definitivamente disfrutó de la hermosa vista que el mismo se consiguió.

—Honnie deja de verme así, pareces un viejo pervertido que quiere comerme...Bueno viejo si eres pero...¡AH! — El alfa comenzó a hacerle cosquillas al menor.

—Nadie me dice viejo en mi cara.

—Min, p-para...— Hyunjin se retorcía y eso le causaba dolor. — M-me duele...— Minho se detuvo y beso las mejillas del menor.

—Me dijiste viejo, no se me va a olvidar.

—¿Querías que te mintiera entonces? — Minho volvió a acercarse al menor amenazante. — Ya ya, era bromita...o tal vez no.

Pasarón gran parte de su mañana con muchas bromas, risa y diversión. Ellos simplemente adoraron el hecho de pasar su mañana de esa manera.

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El omega se encontraba felizmente desayunando el cóctel de frutas que se le había antojado, fue lo primero que pensó cuando se levantó y la necesidad de comérselo eran enormes. Pero el alfa lo veía extrañado, era raro verlo comer tan apresuradamente el pedazo de sandía con lechera y chocolate encima, simplemente todo el coctel era raro.