Mine (Momo & tú)

Asi se siente la depresión

YOU

Todo el día del domingo me la pase en mi cama llorando en las piernas de Misuk, mi papá no comprendía lo que había pasado ya que vió que me había ido emocionada, pero sabe que no es momento de preguntar y Eunyeong no sabe como preguntarme lo que sucedió.

Hoy... no me siento mejor que ayer, no pude dormir bien tenía nauseas gracias a la ansiedad, ni siquiera me he parado de la cama, se preguntarán ¿cómo algo que una chica que conocí hace dos semanas duele tanto? Bueno, pues yo me encariñe mucho con ella y por eso duele tanto.

Claro que me ha llamado, pero no quiero saber nada de ella, me dolía el hecho de que me vio como una puta y que todas lo sabían, me siento humillada, engañada, traicionada... y eso último, es lo que más duela.

- hola...

- no quiero ver a nadie Misuk - estaba acostaba dándole la espalda a la puerta.

- solo... vengo a dejarte comida, desde ayer no comes.

- no tengo hambre.

- por favor ____, ya llevas casi una semana sin comer bien, te vas a enfermar.

- ¿y eso a quien le importa?

- a mi, a mi me importa lo que te pase.

- solo déjame en paz ¿quieres?

- yo no soy el enemigo aquí ____ - escuche la puerta cerrarse.

Tiene razón, ella no merece que la trate así, pero no tengo ánimos para estar bien con la gente y tratar de ser amable, me siento destruida. Toda la tarde me la pase viendo la ciudad desde mi ventana, estuve así hasta que se hizo de noche y todos fueron a dormir.

Tome una cobija, me pare de mi cama y salí al balcón; me senté en uno de los sillones subiendo mis pies en él.

- ¿por que tuve que conocerla? - mi pecho sintió de nuevo esa presión - ¿por que no solo la ignore ese día en el baño? Pero no, tuve que ser tan estúpida como para creerle, para ella solo fui una puta más con quien acostarse.

Abrace mis piernas llorando contra ellas, sentía cada vez más la presión aumentar y que el aire me faltaba, empecé a hiperventilar y a llorar aún más; trate de entrar a la casa, pero no pude ya que mis piernas empezaron a temblar.

- te odio Momo, te odio... - caí al piso aún con lágrimas en el rostro, mientras trataba de regular mi respiración - ¡te odio!

- hey... hey, tranquila - escuche la voz de mi papá, me cargo llevándome adentro - tranquila, respira.

- ya no quiero sentirme así - lloré en su pecho.

- lo sé mi amor, lo sé... - está noche dormí en los brazos de mi papá.

Y bueno ese es el resumen, ya llevo dos semanas así, hoy se cumplen las dos semanas y yo no salgo de mi cuarto. Algunas noches me voy a sentar al balcón para evitar dormir y así no tener pesadillas.

Eunyeong y mi padre han intentado hablar conmigo, pero yo me he negado en casa una de las ocasiones, simplemente no quiero recordarlo, aunque irónicamente lo hago todos los días...

Mi fiel compañero ha sido churro, aunque siento que le estoy pasando mi tristeza y le pido a Misuk que lo saque; solo quiero quedarme en cama hasta que deje de doler y no sé cuánto tiempo me vaya a tomar.

- hola... ¿puedo pasar? - mire a Eunyeong y solo asentí - ¿cómo estás?

- me siento muy cansada ¿te molesta que esté en cama? - me senté para hablar con ella.