Capítulo 92

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Athena : cariño no presumas y dime que creaste

Hefesto : bueno, solo cree armaduras, tres de ellas representando a nuestros animales simbólicos

El la sala aparecieron tres armaduras, cada una expulsaba el poder de un dios menor, Athena lo miro por un momento antes de sonreír

Hefesto : no te preocupes por los usuarios, las armaduras escogen a su protador y les brinda conosimiento para que logren dominarlas, también las echize para que destruyan a sus portadores si estos no siguen las reglas

Afrodita : que reclas cariño?

Hefesto : bueno, eso tendrán que ponerlo, yo no estoy muy relacionado con los caballeros que crearon así que se por que reclas o códigos de honor se rigen

Artemisa : podríamos usar las armaduras ahora mismo, así no tendríamos porbelmas para estar comandandolos

Athena : es verdad pero primero las reglas que deberán seguir cada portador

Afrodita : bueno yo no soy una diosa principal ahora mismo, solo ustedes dos así que se encargan

Layla : es verdad, yo tampoco lo soy

Las dos se sonrieron mientras tomaban a Hefesto para llevarlo con ellas pero el dios las detuvo, se volvió a sentar con cada mujer en sus piernas

Hefesto : yo si soy un dios principal, así que tengo que quedarme

Afrodita lo miro con un puchero pero cuando sintió los dedos de Hefesto acarisiando su intimidad se sonrojo mientras se pegaba más a él

Layla por otro lado empeso a besar el cuello de su esposo mientras sentía como éste jugaba con el agujero anal, dos dedos entraban y salían lo que causaba que el Ninfa se exitara

Athena : vien, comensemos antes de que Hefesto comience una orguia con todas

Artemisa asintio mientras los tres dioses empezaban a poder las reglas que cada armadura seguiría, la de Hefesto se encargaría de formar a los herreros, entrenar a los candidatos a caballeros y proteger al santuario

Artemisa : creo que eso es suficiente

Hefesto : si, aunque mi armadura es muy fuerte dudo que sea un guerrero al que escoga

Athena : tienes razón, bueno el de Artemisa

Artemisa : él mio se ría con mís cazadoras

Athena : esta bien

Las dos empesaron a discutir las reglas para su armadura, mientas eso pasaba Afrodita se bajó de las piernas de Hefesto

Sacó él miembro erecto de su esposo y empeso a lamerlo disfrutando cada momento, Layla también se bajó para empezar a chupar la punta

Hefesto sintió como sus esposas los complasian, sonriendo acarisio las cabelleras de ambas lo que provoco que tomaran más entusiasmo

Afrodita sacó sus enormes pechos y los puso al rededor del miembro de Hefesto, este solo cubrió un poco más de la mitad

Afrodita : sigue igual de grande

Layla : así es, no es increíble

Afrodita asintió mientras movía sus tetas apretandolos, Layla se metió el resto de la longitud en su boca, con su lengua lo acarisiaba y sus lavios succionaban con fuerza

Artemisa miro a ambas mujeres y se aserco a ellas, se quito su toga dejando ver todos su cuerpo desnudo

Artemisa : te gusta cariño

Hefesto : mentiría si dijera que no

Hefesto la tomo con sus manos para asercarla a él, entre todas sus mujeres Artemisa era la que menos busto tenía pero su culo firme y grande

El nuevo dios de la forja HEFESTODonde viven las historias. Descúbrelo ahora