Capítulo 93

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Un sonido trajo con sigo el miedo de Zeus, Prometeo había sido liberado y murió casi de inmediato.

Zeus : que demonios pasó!!!

Poseidon : no tengo idea, pero debemos apresurarnos para ganar esta guerra

Zeus : tienes razón, después nos ocuparemos de Hefesto y Hades

Poseidon asintió, ahora debian ocuparse primero de su Hermano Adamas, lucharian contra él y lo matarían por su acto de traición

Los hekatonquiros se pusieron en marcha junto a Zeus para peinar las zonas y encontrar al traidor de se Hermano

Poseidon tomó a los ciglopes y los dioses menores y se fue para buscar a su hermano por las islas y él mar, los bosques y los cielos por donde Zeus aún no recurría

Mientras ellos asían esto, Shion estaba recorriendo las mostañas costumbrandose a su nuevo poder, ahora se dirigía donde Atlas para liberarlo

Además se burlaba de sus hermanos evadiendo los y atacando cuando se distraian, esperando él momento para poder enfrentarse a ellos de frente y tener una victoria asegurada

Isla lemnos
Afrodita contemplaba la marca que le dejó a su esposo, por alguna razón sentía un sentimiento de alivio y seguridad

Isla lemnos Afrodita contemplaba la marca que le dejó a su esposo, por alguna razón sentía un sentimiento de alivio y seguridad

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Hefesto : cariño deja de verme o acaso deseas otra ronda

Afrodita : me encantaría pero llenaste mis dos agujeros tanto que estoy rebalzando

Hefesto : tu tienes al culpa, no dejabas de mover tus caderas y succionar mi miembro

Afrodita : puede que tengas razón, pero que me dices de Layla y Artemisa??, las dos están igual que yo

Hefesto : Artemisa también estuvo igual de exitada que tú y Layla bueno no dejaba de montarme

Afrodita : la éxito mucho aserlo en la sala de reuniones

Hefesto : si, ahora ven preciosa quiero probar tus lavios

Afrodita sonriendo se aserco, Hefesto la beso suave chupando sus labios mientra ella así lo mismo miéntras no podía evitar sonreír

Se subió en sima de Hefesto, estaban en una cama por lo que no había problemas, su ano y coño goatiaban la esperama de su esposo mientras este usaba sus manos para manosear sus nalgas

Las apretana, deformaba y estiraba, los gemidos no se isieron esperar, Hefesto la tomo con fuerza de sus nalgas asernadola más a él

Afrodita : me amas

Hefesto la miro, no entendía por que le preguntaba eso, se aserxo a su pechos y empeso a chupar uno de ellos

Afrodita : responde, me amas

Hefesto : lo ago, te amo Afrodita

Afrodita : vien por que yo también lo ago

Afrodita lo sujeto de la cabeza indicándole que siguiera, Hefesto no espero y metió una de sus retas en su boca y empeso a succionar mientras con una de sus mano masajeaba la otra

El nuevo dios de la forja HEFESTODonde viven las historias. Descúbrelo ahora