Día once: Barriga

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"Decisiones difíciles requieren voluntades fuertes, señorita. Mi embarazo va de maravilla, mi doctora me recomendó evitar las emociones fuertes o desagradables, eso incluye a cierto tipo de personas"

Esas fueron sus palabras hace más de dos semanas, Pero aún circulaban en internet gracias a la señorita Everhart quien había escrito absolutamente todo lo que su teléfono había grabado en su intento de entrevista, incluso tomándolo de grosero al haberla tomado del brazo de manera agresiva. No agregando la parte donde el se sintió terriblemente mal por el enojo que le causó la mujer, claramente por conveniencia no lo hiso, pero había videos en internet que corroboraban su versión de los hechos, narrados por él en la conferencia de prensa por la que tuvo que pasar por tal escándalo e incluso el mesero fue tan amable de salir a hablar de lo sucedido. Todo este circo le estaba había causado tantos dolores de cabeza y un estrés constante, llegó a desmayarse en una ocasión por la presión y todo gracias a la rubia. La cual no podía ser demandada por difamación, mucho menos por interrumpir su privacidad ya que no había una ley como tal para este tipo de situaciones, incluso Tony estuvo leyendo sobre leyes, para encontrar algún agujero legal del que pudiera aprovecharse para poder demandarla. Algo que lo había estresado también, sin contar que al padecer síndrome de couvade el castaño estaba sufriendo los mismo síntomas que su rubio amor, en su cita medica a Steve se le recomendó absoluto reposo, algo que en New York no podían lograr. Porque incluso los paparazzis y reporteros estaban siempre parados frente la entrada de la torre, esperando a que cualquier vengador o empleado doméstico saliera para envolverlo de preguntas innecesarias y demaciado íntimas, por esa razón ya no había podido asistir a sus cursos. Ni siquiera a caminar y estaba bastante arto de ver el gimnasio de la torre, asi que el castaño optó por quedarse en la zona recidencial en Malibú, dónde se encontraba la mansión stark. Y así al menos el rubio estaría más relajado, pues su respiración se hacía difícil con cada día que pasaba, pues a medida que su útero creía más y más durante este mes, su espacio en el abdomen disminuía y su estómago se pegaba a los pulmones, dejando menos espacio, el esfuerzo del ejercicio solo lo hacía más difícil y ni hablar de la fatiga durante el día, que no lo dejaba hacer mucho durante el día, mientras que de noche trataba de conciliar el sueño. Ocupando todas las almohadas de la cama para poder dormir, incluso durante el día dormía y eso ya era bastante raro en él pues meses atrás estaba bastante activo a comparación de él actualmente. Había estado viéndose al espejo, su barriga era lo suficientemente grande ahora, sus caderas se habían ensanchado y sin hablar de la aparición de las várices en sus piernas por la mala circulación en esa zona gracias su bebé. Quien estaba más activo que los meses anteriores, el estaba lo suficientemente emocionado por el día que llegue si bebé y por fin pueda tenerlo en brazos, aunque también tenía miedo de lo que pudiera pasar de ahora en adelante, pues tendrían tantas cosas y responsabilidades. Sin contar las cosas en shield y ser un súper héroe, era su preocupación constante e incluso en sus noches de desveló llegaba ese pensamiento "¿Seré un buen padre?" Aunque sabía que no debía tener este tipo de pensamientos, pues eran negativos y podían llegará afectar su actual estado emocional frágil, por las situaciones pasadas. Así que siempre trataba de mandar esos pensamientos a un lugar sin luz en su mente, para no recordarlos y estar tranquilo.

—Ahora señor osito va a acompañar a su bebé, para que no esté tan solito ahí dentro—.La voz inocente de Kobik lo hizo despegar la vista del mar frente a él, era una hermosa vista y el día era favorable, el clima de igual manera lo era y sinceramente no pudo resistirse a acostaré en un camastro de playa. Para tomar el sol frente a la piscina de la mansión, Tony tuvo que irse por asuntos de Stark industries. Pero en su lugar, llegó Natasha acompañada de Kobik, junto a Sam y estaba seguro de que Bucky llegaría más tarde, la pelirroja había comprado pintura vegetal para pintar sobre su vientre, eso mismo había estado haciendo la pequeña castaña. Había pintado un osito de peluche, Nat había pintado una cigueña con un tutú rosa y Sam un pájaro rojo. Él mismo se había echo un corazón y dibujado la silueta de un árbol de cerezos en su línea alva, bastante simple pero lindo.

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