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—De acuerdo, esto ahora va en serio, ¿por qué eres tan unida a Dark Pit?

Preguntó Viridi con algo de seriedad durante el desayuno, cosa que incomodó a todos los presentes. Arlón, Petrodius, Viridi y ____ estaban ahí, aunque no creía que Petrodius pudiera sentir algo.

Resulta que los escuchó hablar antes de que él se fuera, y se lo dijo en cara como si nada.

—¿Hablas en serio? Ni siquiera lo conozco. —  mintió, lo sabía casi todo sobre él. — No es nada, en serio.

—No parece.

—Vamos, quiero un desayuno normal, solo uno.

—De acuerdo. — cedió, rendida.

No iba a admitirlo, pero le preocupaba que hubiera algo entre ellos. Principalmente por su instinto de mamá osa, la segunda razón era porque no quería que saliera lastimada. Dark Pit no era exactamente el tipo que tratara bien a una dama.

 Dark Pit no era exactamente el tipo que tratara bien a una dama

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La verdad era que... cuando Dark Pit se fue, se sintió sola de nuevo. No quería que se fuera.

Eso no lo iba a negar, lo quería cerca de ella todo el tiempo. Por lo que, como es una rara de lo peor, salió del reino de noche solamente para verlo. Sabía que Viridi los había estado espiando, pero la verdad no le importaba mucho si aquella noche los observaba de igual manera.

Igualmente, no es como que algo demasiado importante fuera a suceder.

Sonrió levemente al verlo ahí, solamente que esta vez estaba de pie. Probablemente ya se estaba yendo, pero igualmente se iba a acercar para saludarlo rápidamente.

—Buenas noches. — saludó, bromeando.

Dark Pit la miró neutralmente, como si ya esperara verla ahí.

—Buenas noches. — las comisuras de sus labios se ensancharon hacia arriba, formando una sonrisa.

—¿Ya te estabas yendo? — se sentó en el pasto, mirando en su dirección.

Dark Pit imitó su acción, quedando frente a frente.

—No, de hecho casi acabo de llegar.

Mintió, ya llevaba un buen rato ahí.

—Oh, qué bien. — se quedaron en silencio por unos segundos. — ¿Sabes? Viridi me dijo que nos escuchó hablar anoche.

—¿Qué? — titubeó un poco.

—¡Sí! No tiene ningún derecho. Si ella y Pit estuvieran solos, le molestaría mucho saber que yo los escuché. Que mejor que no lo haga con nosotros.

—¿Qué? ¿Le gusta Pit?

—Lo sospecho, pero no ha dicho nada al respecto. — se cruzó de brazos y luego suspiró. — Todos esos temas del amor son una molestia, se complican demasiado. ¿Sabes? Si alguna vez me llega a suceder, golpéame en la cara.

✓ NIGHTS, dark pit. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora