Afuera

Capítulo 45

Eva se encontraba en ese momento en casa de Aurora, habían estado viendo una película mientas comían palomitas que habían hecho en casa de la segunda, fue por petición de Aurora que estaban con aquel excelente plan, y había aprovechado Eva su excusa del supuesto trabajo final que estaba realizando en casa de una amiga, pero había avanzado un poco los suyos por si su padre le pedía pruebas de haber estado realizando aquel ficticio trabajo final.

Aurora ya solo debía de presentarse a la escuela para entregar algunos trabajos finales, pero ella ya había prácticamente terminado y podía sentir con las puntas de sus dedos las tan deseadas vacaciones de verano que eran lo suficientemente largas para olvidarse completamente de la universidad, pero siempre con la responsabilidad de regresar a aquel sitio.

La chica se le había hecho fácil la compañía de Eva quién nunca le reprochaba por nada, ya que ella también se encontraba cómoda en la relación que ambas tenían en ese momento, seguía disfrutando de una relación sin que nadie más supiera, a ella eso le agradaba, igual si había querido , desde tiempo atrás como tenía pensado marcaría su línea hasta donde iría la relación que tenía con Aurora, pero aquella mujer se había percatado de algo importante.

Aurora no era nada tonta para saber que en todas las ocasiones que salió con Jason, él siempre solía envolverse con otras chicas, e incluso en varias ocasiones ella solicitó que mejor la relación fuese abierta, pero él se molestaba mucho, ya que aquella mujer le acusara de ser infiel, sin embargo, lo era. Él solía hablar de que los hombres tenían instintos y por eso no contaba como engaño, y el problema era que no solo ella se enteraba, él tendía a presumir sus dotes de ligador a los demás "amigos" que también apoyaban todas esas prácticas.

Por ello ella tontamente siempre sentía aquella "responsabilidad" de no salir con nadie mientras se encontraba saliendo con él, pero ahora las cosas ya habían cambiado. Días atrás aquel hombre había reconocido por primera vez en toda la relación que ambos tenían, que él había sido infiel.

—Pero no te diré con quién—. Respondió él mientras miraba al suelo como si estuviese repasando las palabras que ya tenía elaboradas en su mente, como si previamente ya estuviera preparando el momento para soltar lo evidente.

Pero incluso con eso y ante la sorpresa de Jason, ella no decidió cortar con la relación en donde solía comprar a Eva con él de forma constante, cuando estaba con los dos se sentía bien, protegida, como si fuese la única en el mundo. También debía de darle un punto a las palabras que solía contarle Jason, aquel hombre comenzaba a susúrrale al oído haciéndola oír solo lo que él deseaba como si la hipnotizara, contrario a Eva quién solía hacerlo cuando besaba su cuerpo.

Pero incluso con todas esas cosas, muy en el fondo, sabía que aquellos dos no eran completamente de ella, eran simples seres con los que tenía una conexión de beneficio mutuo, estipulado en un contrato verbal que ella misma había propuesto, pero que deseaba que las cosas siempre continuasen de esa forma.

Alguien tocó el timbre, por lo que Aurora se levantó para abrir a la persona que estuviese, sorprendentemente se encontró a Elizabeth al otor lado, la miró de arriba abajo, ella tenía las manos metidas en su cazadora, sorpresivamente ella siempre solía hacer eso cuando pedía perdón , independientemente si hubiese calor o frio en la calle. Ella se asomó a ver un poco más alrededor percatándose que en el carro blanco en el que había llegado hasta la puerta de su casa, se encontraba Lucía esperando en el carro mirando la conversación de las dos.

—Ten—. Del bolsillo de la rubia había salido una pequeña cajita que al abrirla observó un pequeño brazalete de color amarillo que se le hizo muy bonito a Aurora, ladeando una sonrisa con sus comisuras ya que la rubia recordaba el dato que a ella le gustaba el amarillo—. Este es mi regalo de disculpa, ese día tenía algo de estrés por unas situaciones de mi tío, me percaté que fue mi culpa haber explotado de esa forma, pero quiero que las cosas estén bien entre nosotras.